Roja (The Maze Runner)

09

Tres golpes en la puerta me despiertan.
-¿puedo pasar?- escucho la voz de Thomas.
-claro- contesto mientras me peino con los dedos.

-buenos días- sonríe entrando.
-buenos días- respondo sentada en la cama, atándome las zapatillas.
-Newt me ha dicho que venga a buscarte- dice serio.

-¿pasa algo?- pregunto preocupada.
-no no para nada- niega con la cabeza -es solo que tardabas demasiado- sonríe -y no sabíamos si Gally te estaba reteniendo para que le limpiaras las botas o algo parecido-
-¿Gally?- repito confusa.
-sí- asiente divertido.
-¿no está en el porche?- me levanto.
-¿por qué iba a estar en el porche?- pregunta extrañado.
-por nada- hago un gesto con la mano -déjalo- camino hacia la salida.

-vale pero ¿por qué iba Alby a entrar en el laberinto? No es un corredor- pregunta Thomas tras comentar que le vio cruzar el muro esta mañana con Minho.

-Ahora las cosas son diferentes, Alby ha ido a desandar los pasos de Ben antes del atardecer, ¿me vas a ayudar?- responde Newt molesto.

-así que va a volver al sitio donde picaron a Ben- añade Thomas ignorando su pregunta -pero él sabe que...- se queda callado.
-es peligroso- digo lo que todos pensamos.

-Alby sabe lo que hace ¿vale?- habla Newt -mejor que cualquiera de nosotros- acompaña sus palabras señalándonos y vuelve a su trabajo.
-¿eso qué significa?- insiste Thomas.

Newt suspira cabreado -esto va como ya os explicaron, cada mes la caja sube a alguien nuevo- hace una pausa sin dejar de mirarnos -pero hubo un primero, alguien tuvo que pasarse un mes entero en el claro, sólo- le escucho atenta imaginándome de quién habla -ese fue Alby, y eso no debió ser fácil- continúa talando el tronco sin dejar de hablar -pero cuando los otros chicos empezaron a llegar, él vio la verdad y aprendió que lo más importante es que nos tenemos los unos a los otros- levanta la cabeza y sus ojos se cruzan con los míos para acabar en los de Thomas, quien sin decir nada más se levanta de la roca en la que Chuck y yo estamos tallando, agarra un machete y comienza a talar el tronco junto a Newt y Sam.

La mañana pasa rápido, la hora del almuerzo llega y todos nos reunimos en el comedor.

Cuando termino mi plato me levanto con este en la mano y voy hacia las cocinas.

-hola fritanga- asomo la cabeza.
-hola roja- responde con una sonrisa -¿qué tal la comida? ¿Estaba tan mala que has tenido que venir a decírmelo?- pregunta divertido

-no no para nada- niego con la cabeza -estaba buena, aunque nada superará el desayuno de ayer- fritanga suelta una carcajada y sigue con su trabajo.
-¿y a qué has venido entonces?- me mira sujetando un montón de platos apilados.

-pues- sonrío avergonzada -es una petición un poco rara- el resto de chicos en la cocina, quienes no habían dicho una palabra desde que llegué, se dan la vuelta para mirarme y me pongo roja al instante.
-vuelvo en dos minutos- informa fritanga caminando hacia la salida.

-¿qué petición rara quieres hacerme roja?- sonríe como si le fuera a pedir la cosa más tonta del mundo.

-yo- pienso las palabras -te gustaría, podría- me corrijo -podría ayudarte con los platos- veo su expresión extrañada -me gusta hablar contigo- suelto al fin.

Fritanga me mira en silencio durante un par de segundos que me ponen de los nervios, y de repente, suelta una sonora carcajada.

-¿cómo no iba a querer que me ayudaras? y encima me vas a dar tema de conversación- lo dice como si eso fuera algo surrealista -has visto el ambiente en esa cocina- susurra señalando la entrada a nuestra espalda -los primeros días todo era animado, ahora las cocinas no le gustan a nadie- me explica.

Sonrío ampliamente -¿eso es un sí?- pregunto emocionada.
-es un gran y rotundo sí- aclara devolviéndome la sonrisa.

-pues en cinco minutos vuelvo, voy a buscar los cordones para atarme el pelo- fritanga asiente y entra en la cocina dando órdenes.

-nos vemos mañana- me despido de fritanga mientras me quito el delantal y salgo de las cocinas.
Está lloviendo, veo a Newt y a Thomas en el porche y voy junto a ellos.

Tienen la mirada fija en las puertas de laberinto, están serios y sin poder evitarlo pregunto -¿no han salido todavía?- no recibo respuesta y me tomo su silencio como un no.

-¿qué pasa si no lo consiguen?- habla Thomas un rato después.
-lo conseguirán- afirma Newt.
-ya, pero y si no- dice de nuevo acercándose a nosotros.
-lo conseguirán- repite Newt y siento la duda en su voz.

Thomas da la vuelta y se marcha, paso la mirada por el claro y veo a los chicos asomados desde las cabañas o sitios cubiertos, todos están igual de preocupados y por algún motivo presiento que algo malo va a pasar.

La lluvia cesa y la noche se acerca, todos los chicos se juntan en la entrada y hacemos un corro alrededor a la espera de que Alby y Minho lleguen.

Los engranajes del muro suenan y comienzo a escuchar los suspiros de terror.

-tienen que conseguirlo- susurro en el silencio.
-¿no podemos enviar a alguien a buscarles?- propone Thomas inquieto.
-va en contra de las reglas- responde Gally serio -o logran volver o nada- añade.
-no podemos perder a nadie más- dice Newt en alto mirando a Thomas fijamente.

Esa conocida ráfaga de viento aparece y mi corazón se acelera.
-no por favor- murmuro preocupada.

-¡ahí!- exclama Thomas señalando la esquina.
Giro la cabeza y veo cómo Minho cruza la esquina arrastrando a Alby.

-algo va mal- asegura Newt nervioso.

Todos comienzan a llamar a Minho, mi pulso se desboca, quieren que deje a Alby en el laberinto.

Las puertas están apenas a dos metros de cerrarse y Minho carga con Alby a quince de la entrada.
-no van a llegar- escucho a Newt entre los gritos.

Un metro queda para que el muro se cierre cuando Thomas sale corriendo hacia el laberinto.

No me lo pienso dos veces y corro tras él.

Estoy a punto de cruzar los muros, separados por un par de centímetros, cuando alguien rodea mi cintura y tira de mí hacia atrás.

-¡Thomas!- grito histérica tratando de zafarme de quien quiera que me esté reteniendo.

El muro se cierra por completo, el chico que me agarraba deja de hacerlo y caigo de rodillas con los ojos muy abiertos.

Derramo una lágrima y la seco al instante, recupero la compostura, me levanto y me giro llena de ira.

Todos me miran mientras respiro bruscamente, fijo mi mirada en el chico frente a mí y uniendo cabos entiendo que es él quien me agarró.

El furor me invade, le miro furiosa y me abalanzo sobre él.
Le pego un puñetazo, cae al suelo y me pongo sobre él -¡a ti qué coño te pasa!- grito agarrándole de la camisa para acercar su rostro al mío.

Gally me mira fijamente y se pasa los dedos por el labio que le acabo de partir, cuando los mira y ve la sangre en ellos sonríe.

-¿te hace gracia?- digo rabiosa.
-te acabo de salvar la vida- sonríe de nuevo.
-te voy a partir la cara- respondo levantando el puño para volver a pegarle.

No hace nada para impedírmelo y cuando estoy a punto de propinarle el segundo golpe, alguien me agarra y me levanta de encima de él.

-¡capullo!-le grito mientras me alejan de él.

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He vuelto! Siento haber estado tanto tiempo inactiva, estaba en época de exámenes y apenas tenía tiempo para escribir.
Lo bueno es que ya he terminado y en un par de días volveré a subir capítulo diario, hasta entonces espero que creéis vuestras propias teorías y comentéis que creéis que va a pasar.
Nos vemos!

<3