-es precioso- susurro contemplando el refugio iluminado, con cabañas armoniosas, hamacas en la orilla, cultivos fértiles y esa hoguera tan grandiosas.
-lo es- agarra mi mejilla y lentamente me obliga a mirarle -recuerdas a que hemos venido ¿verdad?- asiento -bien- me guía hasta su rostro y me besa con suavidad.
-me estoy muriendo cabrones, dejad de daros el lote- sonrío sobre los labios de Gally y giro la cabeza para mirar a Jasper.
-cierto- le doy la razón -continuemos, que todavía nos queda la bajada -Gally se pasa el brazo de Jasper por encima de los hombros y todos seguimos el rumbo.Han pasado nueve años, cinco meses y doce días desde que nos fuimos.
Lo cierto es que tardé más de un año en dirigirle la palabra a Gally, fue verdaderamente molesto, no podía ni mirarle de la rabia que me llenaba al pensar en cómo había decidido por mí y había hecho todas esas cosas sin consultarme nada. Fue un acto impulsivo y aunque ahora sé que fue lo correcto, no acepto la forma en que lo hizo, no la aceptaré jamás y como hice con la muerte de Chuck, le perdoné, pero no lo olvidé.
Vuelvo a aquellos primeros días, cuando todavía viajábamos hacia el otro extremo de la isla y recuerdo la tensión en el ambiente, la incomodidad, la falta de confianza que había entre nosotros.
Os estaréis preguntando qué cojones estamos haciendo nuevamente en el refugio tras todo este tiempo, pues lo cierto, es que no venimos por gusto, esta era nuestra última opción y por desgracia no hemos tenido más remedio que optar por ella.
Vivimos en el otro extremos de la isla, a dos días de viaje en coche sin parar, con Maddy, mi mejor amiga y la esposa de Jasper. Ya, lo sé lo sé, no estáis entendiendo nada, empezaré por el principio.Un día, después de dos años vagando por la costa, encontramos a una mujer hermosa, la más bonita que he visto en mi vida, con los ojos de un color grisáceo único, la piel oscura y brillante, el cabello negro y rizado como la noche, y los labios gruesos y secos, recuerdo la sequedad en sus labios porque a pesar de su belleza, no pude evitar fijarme en su aspecto demacrado y agotado.
En cuanto nos vio se asustó, lo vi en sus ojos, el miedo, y en el momento que ella vio mi mirada, algo cambió, yo sabía que estaba a punto de salir corriendo, y tras esa mirada furtiva comenzó a caminar hacia nosotros.
-hola, soy Nala- me presenté con voz dulce mientras sacaba la cantimplora de agua de mi mochila y se la tendía.
-hola- susurró apenas sin voz -soy Maddy- agarró la cantimplora con las manos temblorosas sin dejar de mirarme a los ojos, siempre alerta y cautelosa.
Observe impaciente cómo se llevaba lentamente la cantimplora hacia los labios y antes de que bebiera, inesperadamente, se la llevó hasta la nariz y la olfateó para después repasarnos a los tres con la mirada como si estuviera examinándonos. Al segundo le quité la cantimplora de las manos, le pegué un trago y saqué la lengua para que viera que me la había tragado y que no tenía nada, pero no pareció convencerla.
-bebe- le ordené a Jasper entregándole la cantimplora.
No dudó en hacerme caso y luego se la pasó a Gally, quien sin darle importancia también lo hizo.
Cuando volví a mirar a la chica sus ojos estaban fijos en mí y me contemplaban como si fuera asombrosa. Le volví a ofrecer la cantimplora y esta vez la aceptó con ansias.Así nos conocimos, dos hombres y dos mujeres, vagando juntos por la costa hasta que encontraron un lugar en el que asentarse.
Una preciosa playa de arena blanquecina y aguas cristalinas, la playa de los desgraciados, así la llamamos, un nombre curioso ¿no creéis?
Se nos ocurrió una noche, sentados alrededor de la hoguera, cuando ya habíamos termina de construir nuestro hogar. Ya éramos fieles amigos, habíamos pasado cientos de tardes hablando de nuestras desgracias, yo conté mi historia y Gally la suya con más detalles de los que conocía, Jasper reveló que tuvo una hermana pequeña y un padre abusivo que acabó con ella, y Maddy, Maddy me asustó con su historia. Estuvo tres meses en manos de un grupo de hombres que le hacían cosas horribles y después, cuando logró escapar de ellos, se subió a una barca diminuta y emprendió un viaje sin rumbo por el mar, sin saber a dónde iba, sabiendo perfectamente a dónde no iba a volver. Pasó un infierno en ese bote, y su único consuelo fue pensar en que el lugar del que venía era mucho peor.
Así que ya lo veis, somos unos auténticos desgraciados y más ahora que Jasper está en sus últimas. Hace cuatro días le picó un insecto volador, no sabemos nada de él, pero está claro que era venenoso, porque Jasper ha comenzado a toser sangre y se le duermen las extremidades con demasiada frecuencia, intentamos curarle, ya hemos pasado por fiebres, bronquitis y demás enfermedades, pero nada como esto, nada de este calibre. Por eso estamos aquí, porque no nos queda más remedio, venimos en busca de medicinas y ayuda profesional.Ya es noche cerrada, la fiesta de la hoguera terminó hace un par de horas y todos están dormidos.
-vale, esperadme aquí- les digo rodeando la cabaña de Thomas.
-novata- Gally agarra mi brazo y me mira fijamente -recuerda a lo que venimos y que no podemos quedarnos- trago saliva y asiento.Abro la puerta de la cabaña con sigilo y entro sin hacer un mínimo ruido, camino hasta estar frente a la cama y justo cuando llego, Thomas se da la vuelta de golpe y se levanta para en décimas de segundo estamparme contra la pared y ponerme un cuchillo en el cuello.
-hola Tomy- sonrío al ver su rostro después de tanto tiempo.
-¿Nala?- el cuchillo resbala de sus dedos y comienza a retroceder llevándose las manos a la cabeza.-----------}{----------
Bueno, ya veis que este no va a ser el último capítulo, pero esta historia está a punto de acabar así que prepararos.
Nos veremos en el próximo y puede que el último!<3
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Roja (The Maze Runner)
FanfictionEs un fanfic de la película en el que se introducirá a una chica quien será la protagonista. La historia seguirá los hechos de las tres películas y durante ellos habrá un romance (no se sabe con quién ni cuándo será)