Capítulo 2

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No estuvo preparado para contener la respiración, por lo que cuando escuchó pasos acercarse tuvo que cubrir su boca con ambas manos para evitar que su agotamiento lo delatara.

Contó hasta tres lentamente: Uno...dos...tres.

Detrás de la tarima era imposible localizar al hombre, y no se podía arriesgar para dar con él, solo podía esperar que el mínimo movimiento delatara su ubicación exacta, o que Taehyung apareciera milagrosamente con refuerzos. Las probabilidades eran casi nulas tomando en cuenta que parte de ellos se habían dedicado a perseguir al resto del grupo, mientras que él decidió ir tras el primero al que observó correr, y ahora solo estaban ellos dos.

Tuvo que cerrar los ojos con tal de calmar las ganas de tomar una gran bocana de aire por el drástico subidón, y si soportaba unos segundos más así lo más probable es que él mismo se terminaría matando de asfixia antes de que el hombre lo hiciera.

Apretó sus labios y miró alrededor. Habían fragmentos de botellas de vidrio y cristales rotos esparcidos por todo el suelo. Tuvo suerte al notar que la mitad de una de esas botellas estaba a unos centímetros de él. Siendo cauteloso, la tomó con su mano izquierda y la elevó a la altura de la cara, manteniendo su brazo alargado. Entonces descifró la posición exacta del hombre, pero contrario a sentir alivio, su corazón dio una vuelta cuando este le devolvió la mirada a través del reflejo del vidrio.

Un disparo hizo explotar la botella y varios fragmentos volaron directo a su rostro que a duras penas logró cubrir.

Se incorporó sin quedar expuesto del todo, aun estando a la altura de la tarima corrió escuchando como los disparos parecían querer clavarse en su nuca.

—¡Sal de una maldita vez!—escuchó gritar al hombre, y después el crujido de los cristales tras él le pisaron los talones.

Quitó el seguro del arma que había estado sosteniendo y dio su primer disparo justo sobre la bombilla que iluminaba el lugar. Los restos calientes cayeron justo sobre la cabeza del contrario lo que le dio la oportunidad de salir corriendo con rapidez para volver a ocultarse. Ahora ambos estaban lado a lado y no tardaron en comenzar una lucha a fuego armado.

—¡Suelta el arma o esto será peor!—gritó Jimin cubriéndose tras la pared—¡Estás arriesgándote a que acabe con tu vida!

Escuchó otro disparo y nuevamente silencio, sin embargo, Jimin no pudo estar más que emocionado. Había contado alrededor de 9 disparos, si sus cálculos no fallaban y tomaba en cuenta el leve vistazo que tuvo del arma que portaba el hombre, este solamente tenía una oportunidad, mientras él, aun teniendo su arma cargada, tenía el éxito asegurado. Solo necesitaba hacer un movimiento claro.

A su lado no había nada sólido que pudiera lanzar por lo que tampoco lo meditó mucho antes de tomar su celular.

Maldición, aún no lo terminaba de pagar. 

Y lo lanzó con fuerza hasta que este se estrelló en la pared contraria, rompiéndose en fragmentos. El hombre lanzó un disparo al aire debido al sonido repentino y cuando Jimin escuchó el gatillo siendo apretado sin éxito, supo entonces que lo había conseguido.

—Im Sanwoo, haber atacado a un oficial no ayudará en lo absoluto con su arresto—escuchó otra voz agitada provenir de la entrada del lugar.

—Se supone que soy yo quien diga eso—respondió Jimin saliendo de su escondite. Sacudió su ropa y luego de tanto contener su respiración dio una gran bocana de aire sintiendo un alivio inmediato—. Encárgate de lo que te corresponde.

Taehyung a unos cuantos metros hizo una mueca, sin dejar de sostener su propia arma contra el hombre que ahora estaba quieto con las manos levantadas.

—Eres demasiado lento—se quejó el rubio.

The alphabet killer | YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora