Estiró su cuerpo en el momento que la luz solar finalmente se filtró por el espacio de la cortina que oscurecía la amplia habitación. Jungkook bostezó, estirando su descansado cuerpo y percibiendo sus piernas un poco dormidas después de permanecer en la misma posición por horas.
Se removió sintiéndose incómodo ante el aparato que cubría sus orejas, así que lo retiró, frotándose los ojos hasta que pudo abrirlos con pereza, mirando con interés la habitación en la que se encontraba y sonriendo ante la comodidad de estar ahí, en un espacio tan ordenado, fresco y grande. No supo porque, pero se sentía poderoso al ver los colores neutros que él fácilmente podría llenar de color si se lo preguntaba a Yoongi.
No sabía qué hora era y debido a la poca claridad, tampoco pudo adivinarlo. El deseo de conocer cada espacio del apartamento del alfa le hizo emocionarse, mas su mayor deseo ahora era seguir durmiendo al lado de su padre, quien le colocó una cómoda pijama y le arrulló hasta que cayó en un sueño profundo.
Se movió hasta que sus pies tocaron el suelo frío y caminó con lentitud abriendo la puerta y mirando con curiosidad el segundo piso donde había otras tres puertas. Desde su posición era capaz de ver la sala abajo, y tuvo que entrecerrar los ojos al no ser capaz de divisar a su padre omega en el lugar.
—¿Papi?—susurró muy bajo, solo para él, antes de dirigirse a la habitación que mantenía la puerta semiabierta.
Asomó su cabeza, abriendo la boca en una perfecta O al admirar el espacio extenso de la que parecía ser la habitación de Yoongi ¡De verdad tenía mucho dinero! Se encontraba sorprendido, y sonrió al divisar al omega profundamente dormido con las cobijas cubriendo su cuerpo y los mechones de su cabello totalmente desparramados en la almohada.
Fue cuestión de segundos para que corriera en su dirección, subiéndose en la cama de un salto que le hizo reír bajito debido a la manera en la que el cuerpo de su padre se removió un poco debido al rebote. El entrecejo de Jimin se frunció entre sueños, mas tan pronto como el menor se acomodó sobre él, su cuerpo se relajó, atrayendo al pequeño inconscientemente y abrazándolo como si se tratara de una almohada.
Jungkook se dejó abrazar, cubriendo sus piernas con la cobija antes de cerrar los ojos, totalmente a gusto.
En medio de su trance para quedarse dormido solo pensó en la rara sensación liviana que estaba instalada en su pecho, no sabía descifrar los sentimientos que lo invadían desde el momento en que abrió los ojos, y decidió no darle mucha importancia, porque se sentía muy bien. De hecho, percibir el aroma a fresas y menta le hizo dormitar hasta que poco a poco pareció darse cuenta de algo, y es que el aroma de Yoongi estaba muy concentrado en el castaño, demasiado para su gusto.
Ante su descubrimiento, el cachorro arrugó la nariz, subiendo la cabeza para olfatear cerca de la clavícula cubierta por una camisa blanca que mantenía un leve aroma a jabón. Y después de mover su nariz un poco más, supo que sus sospechas eran ciertas. ¡El alfa le había impregnado su aroma de nuevo!
El gruñido que amenazó con salir de sus labios fue silenciado al instante, justo al momento en que se percató de la marca rojiza y fresca que adornaba el cuello de Jimin.
Sus ojos se abrieron en grande, y las pequeñas manos apretaron con fuerza la manta de la cama, no logrando controlar los sentimientos negativos que surcaron su cabeza como un tsunami imparable, sin poder creer lo que estaba viendo, no era posible. Los ojos se le llenaron de lágrimas y quiso llorar ahí mismo, pero su atención se centró en su instinto auditivo, tan pronto como escuchó un golpe provenir del piso de abajo. Sus sentimientos se transformaron en una horrible ira.
Se levantó tan rápido de la cama que se desequilibró un poco al echarse a correr. Supo que Yoongi se encontraba en la cocina, gracias al aroma a comida y frutas frescas. Y no se equivocó, lo miró pelando la cascara de una mandarina antes de llevarse un pedazo a la boca, con la mirada perdida en la ventana que tenía al frente.
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The alphabet killer | YoonMin
FanfictionLuego del abandono de su predestinado al estar en cinta y bajo la agonía de un lazo roto, Jimin se había prometido no volver a permitir que Min Yoongi le destruyera la vida por la que tanto luchó para recuperar, sin embargo...no esperaba que sus cam...