4. Alegrías y Decepciones

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A la mañana siguiente, Axl despertó algo tarde, miró el reloj maracaba las 11:23, el pequeño nunca se paraba tan tarde, se restregó los ojos inocentemente mientras bostezaba, miró a su alrededor ubicandose de nuevo; miró la silla de Zero, estaba vacía. Axl intentó recordar si Zero se había quedado dormido allí la noche anterior, estaba todavía reincorporandose como para darse cuenta si estaba allí o no. La puerta se abrió, Zero entró con una bandeja de comida y la dejó en las piernas del niño, Axl sonrío ante la sorpresa y agradeció mientras sonreía muy tiernamente. Zero retomó su actitud fría debido a que había más movimiento en la enfermería, se sentó en la silla y esperó a que Axl terminará de comer para llevarse la bandeja y el plato; Lifesaver entró a la habitación para revisar la recien puesta pierna del pequeño, apartó la bandeja de comida y alzó la manta para ver.

- Esta un poco suelta - mencionó mientras movía un poco la mala conexión, dandole un dolor desagradable a Axl, que, desde luego, ocultó con todas sus fuerzas. - Volveré después para acomodarla, y en la tarde te podrás ir.

Axl asintió con la cabeza, algo retraído. Lifesaver se retiró y se despidío de Zero. Zero miró al niño que estaba viendo por la puerta abierta; Zero trató de ver en sus ojos el reflejo de lo que veía tan concentrado luego su mirada cambio a una de terror y se acostó de golpe fingiendo dormir. Zero se sorprendío por su reacción y se asomó disimuladamente, gracias a sus habilidades sigilosas, logró ver a X acercandose a la habitación con cada paso seguro, con el orgullo arriba y con un toque de malicia en su mirada. Zero se susurró que él aquí no llegaba y se le ocurrió un plan para deshacerse de X. Se ocultó detrás de una de las paredes laterales a la puerta, pues la puerta daba directamente con la cama y luego con el resto de la habitación. Justo cuando X iba a pasar...

- Hola X, Buenos días - saludó fríamente Zero apoyandose con un brazo sobre el marco de la puerta y el otro brazo lo tenía apoyado sobre su cadera, había interferido el paso en el momento preciso.- ¿que te trae tan temprano por aquí?.

- Vine a darle una pequeña visita a Axl. - dijo X sorprendido por lo rápido que había salido por detrás de la puerta. - Saber como esta, pues ayer hizo un desastre en el puente aquel.

- No puedes verlo, esta durmiendo. - exclamó Zero secamente mientras una vena se le brotaba en el cuello. - Espera a la tarde.

- Zero, lo ví de pie hace unos momentos esta despiertó.

- Acabó de entrar y eso que entre golpeando la puerta no se levantó.

- Zero...

- X...

A X le sorprendió la actitud de Zero, algo protector y más intimidante de lo que recordaba; se fue sin querer ver más hacia adentro de la habitación. Zero se aseguró de que se fuera bien ido, Lifesaver lo vió extrañado por la posición y sitio que miraba. Zero lo miró y le dejó el paso hacia la habitación. Lifesaver entró, acomodó la pierna de Axl y revisó que todo estuviese bien.

- En menos de una hora te puedes ir, Axl.

- Ok - dijo con voz apagada Axl.

- Por cierto, que le pasa a Zero?.

- No lo sé.

- Esta actuando raro. Viste como botó a X de aquí?.

- No.

Lifesaver notó al pequeño muy cortante y decidió dejar la conversación, llamó a Zero preguntandole, un poco más apartado del pequeño, porque lo estaba ayudando.

- Sencillo - contestó Zero bajando la voz - recuerdas que ayer dije que no solo nesecitaba compañía?.

Un poco más comprendido, Lifesaver se fue y dejó al chiquito. Unos minutos más tarde, Lifesaver dió de alta a Axl y el niño se pudo ir a su recámara. Zero debía ir a entrenar así que se fue tranquilo sabiendo que el pequeño estaría bien. Axl llegó a su recámara, pero la manilla de la puerta estaba doblada como si alguien hubiese forzado para abrirla; empujó la puerta ya abierta y una rara desesperación lo invadió. Sus cosas, sus papeles, su camilla, partes de su armadura, tela, Todo estaba regado por el piso, Axl intentó cerrar la puerta sin dejar de ver aquel desastre, Axl caminó lentamente hacia el centro de su recámara, se arrodilló en el frío suelo tomando sus cosas; estaban pisoteadas, rotas, destrozadas, una parte de su armadura quemada, varias abolladuras, una foto enmarcada que tenía de Red Alert escondida estaba allí en el suelo, tenía el marco destrozado, el vidrio roto y la fotografía ya no estaba dentro; buscó entre los papeles rotos y pisoteados, encontrando una mitad, la guardó en un pequeño bolsillo escondido en su peto y buscó la otra mitad. Después de un largo rato y de que, Axl perdiera la noción del tiempo, consiguió la otra mitad, guardándola en el mismo bolsillo. Se levantó con cuidado, ya se le había olvidado a que iba; solo tenía que recoger ese desastre. Mientras recogía y, guardaba, botaba papeles y guardaba y metía partes de su armadura en una bolsa para darselas a Douglas, se cortó con una de sus hombreras en la palma de la mano; que desagradable sensación la que sentía, tomó el primer pedazo de tela que vió y lo enrrolló, la poca sangre que salía por el pedazo de tela, negro de la suciedad, le daba una horrible picazón. Terminó lo más rápido que pudo y se llevó la bolsa al hombro mientras veía su herida.

Heridas de batalla [Megaman X]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora