18. De Confianza a Humillación

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- ¿Axl? - preguntó sorprendido el ojiverde abriendo completamente la puerta. - ¿Qué puedo ofrecerte?.

- Necesito que... - a Axl se le quedaban las palabras atoradas en la garganta. - Necesito que me hables de Zero.

- Supongo que puedo hacerlo. - exclamó pensativo X, apartándose de la puerta. - Adelante, Axl.

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Zero buscaba en los lugares más inhóspitos que se le ocurrieran en la base, recorriendo cada rincón que se le presentaba. Recorrió de arriba a abajo la maldita base buscando al menos un rastro del pequeño hunther azul marino, luego optó por buscarlo en las afueras de la base: En la gran ciudad. Pero ¿como hallarlo? un pequeño reploid en una inmensidad de personas y reploides, jamás lo hallaría, en ese momento recordó unas dulces palabras que le había dicho alguien especial: "Nunca digas nunca, Zero". Pues si, no podía rendirse sin haberlo intentado y, aún con esperanzas salió a la gran ciudad a buscar a su pequeño. Pero su niño se encontraba en el suelo de la recámara de X, sentando en una "posición de indio" frente al dueño de la recámara que le copiaba la manera de sentarse en el helado suelo mientras que con su mirada buscaba la del más pequeño que jugaba con sus dedos nervioso, estaba total y completamente muerto de miedo pero no podía retroceder ahora, tenía que saber de su padre, y era muy muy urgente.

- ¿Qué quieres saber?. - preguntó suavemente X tratando de no parecer dominante o intimidante para el niño, realmente tenía intriga por saber de que se trataba.

- Zero... Verás, él... - las palabras que Axl eran prácticamente susurros obligando a X acercarse un poco para escuchar, poniéndolo más nervioso. - me habló de... del 4to alzamiento Maverick y de Repliforce... él me contó sobre... una reploid y... como la - tragó saliva con fuerza, increíblemente asustado. - la mató... luego salió de mi recámara y se fue.

- Estaba enojado, ¿verdad?. - cuestionó serio X. - Es extraño, Zero nunca le contaría a nadie personalmente lo que ocurrió en aquel momento, ¿por qué contártelo a ti?.

- ¿Por qué Zero se fue enojado?.

- A veces, - comenzó X hablando con franqueza. - Zero se ve enojado y frio, puede que se vea malo pero en realidad está triste. Verás, esa reploid de la que te habló se llama Iris, obviamente no te dijo su nombre al parecer. - Axl asintió muy tímido. - Bueno ella era una chica tierna y muy alegre, todo lo contrario de Zero. Pero aún así, ella lo buscaba mucho al principio creí que era debido a las constantes batallas que tenía Zero con su hermano pero luego noté que su preocupación en realidad estaba dirigida a Zero y no a su propio hermano. Muchas personas dieron a conocer sus rumores sobre aquellos 2 reploid pero yo creo que estaban... enamorados el uno del otro.

- Entonces, Zero... ¿Perdió a alguien que amaba?.

- Si, perdió a alguien que amaba. Nunca habló del tema con nadie, a penas se desahogaba conmigo contándome toda la frustración y la rabia que le hacía sentir su muerte, pero yo sé bien que no es rabia ni frustración sino dolor y tristeza.

- ¿No podré...?, claro si se dan las mágicas circunstancias. - mintió Axl ocultando la relación que tenía con el rubio.- ¿... ayudarlo a que no se sienta así?.

- Te lo contó, diría que eso es más que suficiente. - el reploid de ojos de esmeralda miró fijamente al niño, desconcertado. - ¿Para eso viniste, no es así?. - El niño tarareó asintiendo. - ¿No necesitas saber más nada?. - el pequeño negó con la cabeza, el tono de X era de inseguridad a la presencia de él y sus ojos se tornaban lentamente a rojo. - Extraño, muy muy extraño.

X se levantó y en ese mismo momento Dynamo pasaba por la puerta junto a Alia y Spider. Axl se levantó asustado, buscando desesperadamente un pequeño agujero por donde salir huyendo. Sentía que había caído en una trampa de manera estúpida, Alia sonrió acomodando su cabello de manera segura y presumida, acercándose a X para susurrar algunas palabras que desgraciadamente Axl no escuchó, Dynamo traía las manos atrás y Spider traía un bate al hombro, miraba al niño directo a los ojos robándole el alma. El cuerpesito de Axl empezaba a temblar, respirar era la tarea más difícil que tenía en ese momento, apenas pudo tragar saliva manteniéndose con su cuerpo retraído sin intenciones de buscar problemas, más bien, evitarlos. Pero era tarde, estaba entre la pared y los reploides que se acercaban muy lentamente a él. Mientras eso acontecía en la recámara de X, Zero se devolvía apresuradamente a la base, había pedido a Layer localizar al pequeño reploid, al momento que dió sus coordenadas el rubio se sentía como un idiota por no haberlo buscado bien, en unos segundos ya se encontraba corriendo en los pasillos de la base, siguiendo la lucesita parpadeante del radar de su muñeca, corría sin saber que se dirigía a la recámara de X donde Alia daba la orden de atacar al niño, orden la cual hizó sonreír a Dynamo y a Spider que saltaron sobre el niño. Quizás Zero llegara antes de que Axl terminara malherido. Spider usó el bate que traía golpeándole el rostro, dejando su nariz y su boca llenas de su propia sangre. El ojiazul estaba a pocos metros del lugar. Dynamo sacó las manos de su espalda mostrando una gran bolsa negra. El hunter carmesí persivía aún más cerca la señal del pequeñito. Muy tarde, Spider le había dado un "golpe de gracia" dejando al pequeño muy golpeado, desmayado y hasta con partes de su armadura sucias de sangre y abolladas, el mercenario no perdió tiempo en meter al medio-cádaver en la bolsa y cerrarla bien. En ese preciso instante, la señal de Axl murió, el ojiazul se detuvo en seco y golpeó el radar con su dedo verificando de que no estuviera dañado o muerto, se comunicó con Layer y pidió de nuevo su ubicación, ignorando como X, Spider y Alia pasaban justo a su lado arrastrando a bolsa entre los 2 chicos, la chica de pelo púrpura no pudo localizarlo y se lo dió a saber a Zero, éste último le sugirió que lo localizara con el radar-escaner de las misiones, Layer le dió a saber a su comandante que le iba a tomar un tiempo debido a que no se encontraban en una misión real, Zero quedó conforme, tan solo necesitaba saber donde estaba el niño y decidió buscar en los diferentes lugares cerca de su posición entrando en una pequeña oficina, temporalmente en desuso, no notó como justo en ese momento Dynamo salía de la recámara del reploid azul y corría en la misma dirección que éste. El hunter carmesí salió en un par de segundos y pasó a asomarse en las recámaras cercanas sin nesecidad de entrar, al fin y al cabo eran todas iguales. Mientras tanto en el jardín delantero de la base, los Hunters y Dynamo aprovechaban la estatua de algún tanque antiguo lo realmente les llamaba la atención era el , Spider sacó de la bolsa al niño todavía inconciente dejando que rodara por el suelo, miró a la operadora rubia al momento que ella hacía una mueca de alegría, y sacaba unas sogas que traía colgando de la cadera, eran algo delgadas pero muy resistentes y elásticas. Fueron relativamente segundos ¿o quizás horas?, Axl abría lentamente los ojos desconcertado, sentía la sangre en su cabeza, ese líquido espezo y caliente que se hacía presente en su nariz, su boca y su frente, y sentía como venía más, alzó la cabeza, más bien, la bajó, estaba consciente de que estaba de cabeza, su visión no enfocaba absolutamente nada todo eran manchas y luces que parecían soles cada una (por la potencia de la luz), por alguna razón veía todo lento despacio, había colores y no estaba seguro de que fueran del sitio, parecía ser más bien la perdida de sangre, era algo hipnotizante, algo que no podía describir era tan solo colores, luces fuerte. Intentó mover las manos lentamente y descubrió que estaban amarradas, suspiró cerrando los ojos cansado, agotado, debilitado; unos papeles arrugados no tardaron en golpearlo seguido de rocas e insultos. Suspiró entrecortadamente reventando a llorar, no le fue necesario abrir los ojos para escuchar como gritaban: "¡PIÑATA!". Sintió el mismo bate que Spider usó unos minutos atrás, solo que en la cabeza, haciendo volar su sangre por todos lados en la estatua, las lágrimas volaron también, los reploids traían ramas y barras de hierro para disfrutar del dolor de la víctima. Era un ardor exesivamente doloroso, mordió con desesperación la soga que imposibilitaba sus manitas, se dió por vencido a los segundos. Gritó que se detuvieran, cubrió su cabeza intentando quitar los golpes que solo hacían llenar de sangre los barrotes frios. Se dió por derrotado, solo lloraba mientras los crueles y maltidos reploides se reían, mientras los barrotes de rompían de la fuerza de los impactos, mientras su sangre abandonaba su cuerpo y comenzaba a vomitar sangre. Al momento que comenzaba a mostrar toda la sangre que cuajaba en su interior, los hunters huyeron con la conciecia llena de culpa, estaban todos casi seguros de que habían matado al pequeño. Zero estaba corriendo en dirección al desatre curioso de saber, aunque se arrepintió al instante; Saltó hacia él utilizando su Z-saber para cortar la soga que lo hacía colgar de cabeza, pero cayendo antes que él y atrapándolo en el aire. Axl sintió el omiso calor de los brazos de Zero rodeándolo, lentamente alzó la cabeza mirando a los preocupados ojos del rubio, por alguna razón no pudo evitar sonreír, apesar de su cercanía con la muerte ¿O quizás era eso?.

- Papá. - exclamó en un susurro consiguiendo la atención completa de Zero. - Esto es mi culpa, jaja. Soy un estúpido.

Justo antes de que el rubio dijera algo, el niño rió un poco luego quedando inconsciente, la gema de su cabeza comenzó a brillar, intentando detener la perdida de sangre, pero era tarde. Los brazos de Zero se llenaban del espeso líquido vinotinto oscureciendo su armadura, al igual que a su rostro. No tardó en correr a la enfermería, al momento que una pequeña lluvia nocturna se hacía presente en el lugar.

- Un estúpido ... - repitió el inconsciente niño al momento que pequeñas gotas de lluvia caían en su rostro.

Heridas de batalla [Megaman X]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora