16. Un divertido paseo.

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- ¡Oye! - gritó el rubio corriendo en dirección a el sujeto de la moto que ni siquiera le dió tiempo de arrancar, ya se encontraba en el aire siendo asfixiado con las enormes manos del ojiazul. - ¿Qué crees que estás haciendo aquí? ¿Por qué nos sigues?.

- Yo... - habló con palabras ahogadas y casi inaudibles, desviando su mirada al niño que aguardaba por el mayor en la acera asustado evidentemente de él, mientras apretujaba el gatito en sus brazos de manera temblorosa, sus ojos notaban su inseguridad, su temor. - ... tan solo fue... casualidad...

- Lo dudo - dijo Zero con una pequeña risa sarcástica mientras dirijía su otra mano a su espalda buscando el Z-Saber.

- Zero... ¡ESPERA! - gritó el pequeño en tono aterrado. El carmesí detuvó sus acciones y le dirijió la mirada. - D-Dejalo... no queremos... problemas.

El reploid que Zero sostenía en el aire todavía estaba usando una especie de chip sombra con la armadura total y completamente negra al igual que su rostro y no se reconocía la verdadera identidad del "espia", apenas sus ojos destellaban pero no era un color reconocible. Zero lo miró clavandole la mirada a donde el creía era el alma, luego de pensarlo unos cuantos segundos lo soltó de golpe en el suelo, dañando el chip sombra y relevando la identidad del "espia", Zero no estaba evidentemente sorprendido por el resultado pero el chiquillo por su parte estaba aterrado y su pequeño cuerpo no dejaba de temblar incluso su gato se escondido en los brazos del pequeño.

- Dynamo... - exclamó el rubio con desprecio.

Axl avanzó muy despacio hacia el portón dorado que se encontraba entrecerrado apoyandose de él sin quitarle la asustada mirada a el reploid de cabellera blanca, Dynamo se levantó sin quejarse del dolor o de una sencilla molestia tan solo miró impresionado a Zero que se veía tan grande, tan orgulloso, tan protector, tanto que daba miedo. El rubio al notar que de Dynamo no salía ni una sola letra, giró sobre sus talones y caminó hasta el pequeño, al notarlo asustado le dió un cálido abrazo y abrió el portón con intensión de que pasara. Luego miró a Dynamo con furia para dirijirle unas palabras: " Que ni se te ocurra acercarte a él porque sino voy a encontrarte", dicho esto empujó levemente al pequeño adentro con él atrás, cerrando el portón detrás de ellos. El reploid azul se asomó a leer unas palabras talladas en el portón, solo por curiosidad de saber donde estaban: "Machine Forest". Era curioso, él nunca había oido de ese lugar pero era no era un mal sitio para pasar el rato, pensó un poco recordando las palabras firmes del hunther carmesí, a toda prisa subió a su moto y abandonó el lugar antes de que Zero volviera con el Z-saber a matarlo como mínimo. Mientras ya por el sendero de Machine Forest, Axl no se molestaba en siquiera darle una mirada a el mayor que lo veía preocupado hasta que decidió parar en una parte llana, tomando a su niño de la mano y llevandolo bajó la sombra de un árbol, sentandose recostado al tronco y dejando que el pequeño se sentara frente a él.

- Oye, - intentó fallidamente Zero conseguir su atención, tratando de no sonar enojado o molesto. - Axl. Axl mirame...

No obtuvó resultado, tan solo a su chiquillo mirando el suelo ocultando su visión de la de Zero mientras acariciaba a el gatito en su regazo.

- Axl... Está bien, no me mires pero dime algo, lo que sea... lo que tu quieras.

- ¿Lo ibas a matar?. - preguntó con los labios temblorosos el pequeño aún sin alzar la vista.

- ¿Qué?.

- ¿Ibas a matar a Deina... dina...? agh.

- ¿Dynamo?. - preguntó con una sonrisa el hunther carmesí. - No, pero aún así ¿por que me detuviste?.

- Es que yo... yo... - alzó rápidamente su mirada mostrando la enorme cantidad de lágrimas que estaban presentes en su rostro. - ¡NO QUERÍA VERTE COMO UN ASESINO!.

Heridas de batalla [Megaman X]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora