Te Juro Que Te Sigo Amando

Te Juro Que Te Sigo Amando (Final)

Pov Poché

Después de un par de horas cuidando de que no le repitiera la fiebre salí de la habitación para llamar a Calle.

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-Hola. Lo siento mucho por lo de esta noche. No era mi intención dejarte así-.

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-No te preocupes. Es comprensible tu familia te necesitaba ¿Cómo está tu papá?-.

Preguntó con un tono de voz suave.

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-Está mejor ahora. Gracias por preguntar-.

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-Me alegra escuchar eso ¿Y tú cómo estás?-.

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-Angustiada por ti. Lo siento de nuevo por no terminar nuestra conversación-.

Realmente me sentía mal por haberla dejado sola esta noche.

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-No te preocupes Poché. Lo importante es que tu papá esté bien. Ya habláremos mañana con más calma-.

Sonreí sintiendo un gran alivio de que no estuviera enojada.

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-Gracias Calle. Te amo mucho. Descansa.

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-Descansa tú también-.

Dijo antes de colgar.

El alivio que sentí se desvaneció al no recibir de parte de ella un te amo de vuelta.

[...]

Estábamos los tres sentados en la cocina desayunando, papá había amanecido mucho mejor para tranquilidad de todos. Desde anoche que hablé con Calle no había tenido más comunicación con ella. Había pensado en llamarla, pero siendo hoy sábado no sabía si aún estaba dormida, así que desistí de mi idea y preferí dejarla descansar, ya la llamaría más tarde, no se me olvidaba que hoy teníamos una importante conversación que terminar.

-No pudiste tener mejor idea hermanita, este desayuno que pediste está delicioso- dijo Vale terminando de atacar los waffles sobre su plato.

-Dadas nuestras dotes culinarias y que la persona que realmente cocina delicioso está enfermita- apunté a mi papá -Pedir un domicilio era lo mejor-.

-Bueno todo muy rico, pero esta que está aquí tiene que irse a duchar porque tengo que ir a terminar un trabajo en casa de Emma- le dio un beso a mi papá, luego uno a mí y salió de la cocina.

-¿No te gustó el desayuna hija?- papá señaló mi plato a medio terminar.

La verdad era que mi situación con Calle me tenía preocupada -No es eso, es solo que no tengo mucho apetito- tomé el vaso de la mesa y bebí un poco de jugo.

-¿Qué pasa Poché? Pareces preocupada ¿Todo bien con Daniela?- preguntó cauteloso.

-La verdad es que no sé- coloqué el vaso sobre la mesa.

Hizo a un lado su plato ya vacío -¿Quieres hablar al respecto?-.

Lo pensé un instante y sí, definitivamente hablar con mi papá era lo que necesitaba. La mirada de él estaba fija en mí, claramente esperando a que hablara sobre lo que me estaba molestando. Finalmente, tomé una respiración profunda y comencé a hablar -Bueno, papá, Calle y yo hemos estado teniendo algunos problemas últimamente y eso me tiene preocupada- respondí jugando con mi comida sin mucho apetito.

-¿Qué clase de problemas? ¿Tiene que ver lo que pasó con esa chica que se aprovechó de ella?- preguntó con una expresión preocupada.