Capítulo XV, Parte I

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Inicio del flash back

- Tengo tanto miedo, como desearía que Julie estuviera aquí, al menos me daría compañía, Candy, ¿habrás escapado? Si has escapado estarás buscándonos, si mi abuela Martha se enterara me la imagino con un montón de órdenes, es capaz de que ella viene aquí, pero no sabe dónde encontrarme. Annie parece preocupada y está muy triste, Candy una vez me dijo que ella era una cobarde, pero realmente pienso que está aterrada, también lo estoy, pero al recordar como Candy es valiente yo, yo lo intento con muchas ganas, pero creo que nadie me cree, nadie cree que yo pueda resistir éste encierro. Ha pasado una semana desde que Terry desapareció de aquí, Archie sigue enfadado porque al parecer se ha escapado, sin decirle a nadie, los guardias dicen que su padre ha intercedido, lo que hace preguntarme, mis padres harían lo mismo por mí. Ya no quiero estar aquí, por qué estoy aquí. Siento como si mis fuerzas me abandonaran, mi espíritu temeroso solo está en mi cabeza, pero lo demás, no sé de dónde ha salido, supongo que de algún lado, solo tenía que verme en un gran problema para reaccionar y ahí si que tampoco sé cuando vendrán por mí y cuándo me sacarán – se preguntaba mentalmente Patty.

Fin del flash back

Archie llevaba un par de horas despierto, la verdad es que todos dormían poco, pero lo que más hacia era estar en vigilia para oír que hacían los guardias. De un momento a otro, la portezuela se abrió ferozmente, alguien entró con sigilo, observando cómo las chicas estaban dormidas, Archie pareció notar que aquel hombre los estaba analizando, cuando de pronto...

- ¡Hey, despierten! – les ordenó en un alemán muy brusco.

Archie enseguida se levantó, queriendo saber que sucedía, después despertó a las chicas y uno a uno se colocaron juntos, en la pared.

- Así me gusta, que sean obedientes. Han aprendido muy bien en lo que va de éste mes, les queremos dar una buena noticia, tienen nuevo carcelero dado que al otro lo fusilamos – sonrió alegremente. No quieren saber ¿por qué? – cuestionó Stear.

- Porque el otro, recibió dinero por sacar al castaño, creo que se llamaba Grandchiton...bueno algo así, ahora el teniente será su nuevo guardia – les mostró a un joven pelirrojo y de ojos verdes.

Archie y Stear se quedaron pensando, un alemán pelirrojo y de ojos verdes y más alto que los alemanes comunes, eso estaba muy raro. Pero más raro aún era que al verlos les haya ligeramente sonreído, eso sí que no se lo esperaban.

- Bien, ahora que lo conocen, espero no tener noticias de que ustedes también han escapado ¿verdad, teniente Wilham? – los miró a todos para que supieran que no iban a recibir gran trato por tener nuevo guardia.

- ¡Por supuesto que no señor! – respondió el teniente con la mano en el pecho.

- ¡Teniente, sígame! – ordenó su jefe, salió de la celda tan rápido que el teniente Wilham al momento de cerrar soltó un papel y les guiñó un ojo.

- ¡No es cierto...! – exclamó Archie presintiendo lo que ese papel significaba.

Una vez que el militar se fue, Archie corrió por el papel, desdoblándolo.

- ¡Candy! – susurró Archie, sorprendido.

Mientras el teniente Wilham era aleccionado para su puesto, en el campo escocés...la supuesta familia de Candy no encontraba consuelo.

- ¡Mujer, deja de preocuparte, ella está bien! – aseguró de determinada forma Sir Borthwick.

- ¿Cómo lo sabes? ¡Además ella debería escoger con quién casarse! ¡R quiero abrazarla! ¿Cómo podemos estar seguros, de que Sir Andley es la persona correcta? – se cuestionó.

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