XXII

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" Un paso a lo desconocido es de temer,
El volver a tu encierro es loco de creer,
Pero contigo estaré sin importar que llegue a suseder "

⊰ ❦ ⊱

El doncel de a poco abrió sus ojos, notando que estaba en la habitación del poeta, este lo estaba abrazando por la espalda como si de un peluche se tratara, recordando el como llegaron allí, pues mientras que el quiso entregarse al azabache este lo paro y tenía razón, era muy pronto para el hacer "eso". Solo se la pasaron besuquiandoce como locos hasta el cansancio.

Era consiente que para poder irse del pueblo, primero tendría que tener el valor de ir con su padre y enfertarlo, agarrar algunos cambios de ropa, incluso llevarse alguna pertenecía que le de valor y no olvidar su pueblo natal, hoy sería el segundo día del festival a lo que tendría que estar a más tardar a las doce en el castillo.

Tiene tiempo, tiene un día.

Respiro profundo y se dio la vuelta para ver al poeta, ya era para el verle dormido como una roca, pero aún haci le parecía curioso y más deste que descubrió sobre sus malos sueños, volviéndose a prestar sobre el pasado de ese chico.

También pensaba en una manera de decirle que tenía que volver al castillo, tenía que dar a entender que ya no estará allí nunca más, ya era mayor de edad a lo cual no lo pueden obligar a estar allí ahora, nunca más.

Miro nuevamente al azabache, sintiendo esa sensación en su cuerpo pero era un poco más tranquilo pero era presente, pasó sus manos con cuidado por sus mejillas para darle un suave beso en los labios, en cuestión de segundos sintió que algo lo pego a él, apenas se separo, vio los ojos del demonio atentos a él.

—Buenos días majestad - susurro con un poco de cansancio.

—Buenos días - sintió como sus orejas bajaron.

—¿Ocurre algo malo?

Eso tomo por sorpresa al doncel, parecía que el demonio leía mentes o algo por el estilo.

—Nada realmente - sonrió un poco para ocultar sus nervios.

—Se que esta mintiendo - acomo el cabello del castaño - Pero si no quiere hablar esta bien, no esta obligado.

—Bueno... si hay algo... - tomo un gran bocado de aire - Quiero volver al castillo.

Missa se quedó callado, estaba confundido pero curioso a la vez de lo dicho por el doncel.

—No será para siempre - aclaro - Solo ocupo unas cosas de allí y luego nos vamos.

—Esta bien, ¿pero a que hora tendría que estar allá?

—Más tardar a las doce de la noche...

Estaba nervioso, pues temía que algo le hiciera su padre al volver, recordando aquellas palabras que salieron de su boca, temía por su vida.

—Yo lo llevare alteza, no se preocupe.

Y sonrió, esa sensación de ser protegido le gustaba demasiado y más cuando se trata de alguien cercano.

Missa lo abrazo nuevamente y se acurrucó junto al chico, cerrando nuevamente sus ojos, enroscando su cola alrededor de la cintura del doncel, empezando a ronronear.

—¿Enserió tienes sueño? - Phillip aguantaba la risa.

—Si... Si tengo sueño - susurro a su oído.

Sintió como los brazos del doncel también lo abrazaban - Entonces durmamos un poco más.

⊰ ❦ ⊱

Se viene cap con los hermanos.

¿Pero con cual quieren ver?

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𝘗𝘰𝘦𝘮𝘢𝘴 𝘥𝘦 𝘶𝘯 𝘱𝘭𝘦𝘣𝘦𝘺𝘰 / Mr.Phissa / Mpreg AU.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora