Parte 24|Te necesito a mi lado

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Vegetta sabía que debía buscar a esa persona en quién siempre podía confiar, la persona que lo hizo quien es hoy en día. Partió rumbo al este de Karmaland en uno de los poblados vecinos, sabía muy bien a que lugar dirigirse, una casa para nada pequeña, un monumento a uno de los héroes del pueblo, una casa con una enorme tortuga en la cima...

Narra Vegetta:

Regresar aquí era bastante agradable, pero no en estás circunstancias, procedí a tocar la puerta de aquel inmenso lugar, pero nadie contestó, rodeé la enorme casa y fui al lugar de cultivos que estaba en la parte de detrás. Ahí estaba, esa persona que tanto me ha apoyado, que le tengo un cariño inmenso. Justo antes de llegar a él volteo y me sonrió.

- Vegetta, ¿pero qué haces aquí compañero?

- Willy, tío, no sabes cuánto te extrañé -lo abracé fuertemente.

- Y yo a ti Vegetta, pensé que ya no vendrías a verme.

- Bueno, siento que tenga que visitarte cuando más necesito de ti.

- ¿Que pasa?

Le conté toda la historia con lujo de detalles, de principio a fin, después de todo él era la persona en quién mas confiaba en el mundo.

- ¿Pero que le pasa a ese tipo? ¿No le ha bastado con dejarte en el altar o que? Ah perdón, no quería recordártelo...

- No te preocupes, ahora lo importante es que te necesito... no puedo hacerlo sin ti, las personas de mi pueblo son buenas, pero tú me acompañaste en cada aventura exitosa que tuve hasta hoy.

- Cuenta conmigo compañero.

Una vez explicada la situación, juntos regresamos al pueblo y nos reunimos todos junto con Roier.

- Entonces Roier, ¿cuál era la misión en la que estaba Cellbit?

- Estaba investigando extrañas desapariciones en el bosque, se llevó a Richarlyson porque no pensó que fuera algo demasiado peligroso... no pensamos que esto pasaría. Si lo hubiese acompañado...

- No fue tu culpa muchacho, nadie sabía que esto pasaría -comentó Maximus.

- ¿Entonces no hay forma de que lo localices Vegetta?

- No Quackity, al momento de su desaparición perdimos todo rastro de él, no responde su radio tampoco, no parece tener señal o algo así, es una magia bastante poderosa para poder ocultar tan bien a una persona.

- Dices que su último rastro fue el bosque, ¿cierto?

- Así es Willy.

- Vamos a revisar, quizás haya algo que nos de alguna pista.

- Ya lo revisé Willy.

- Pero no conmigo, anda vamos, por lo mientras, los demás intenten despertar al niño, es importante que nos haga saber lo que pasó, Roier, chico no estés triste, haremos todo lo posible porque vuelva con bien ese tal Cellbit.

- Muchas gracias Willy, me da gusto tenerte aquí.

Comenzamos a preparar algunas armas para partir hacia el bosque cuando vimos entrar a la pequeña Leo.

- Hola mi niña -la alce y giré un poco con ella en el aire- ¿qué haces aquí eh?

- Vinimos a ver como estaban.

- ¿Vinieron? -vi entrar por la puerta a Foolish- ah ya veo.

- Vegetta... ¿cómo estás?

- Bien Foolish, gracias por preguntar, por ahí está Roier por si quieres hablar con él.

- Bueno, de hecho quería...

- Listo Vegettita -dijo Willy entrando a la habitación con una gran sonrisa.

- Willy -sonreí correspondiendo su sonrisa- él es Foolish, es... el príncipe de los siete reinos.

- Un gusto Foolish.

- Un gusto... ¿van a algún lado?

- Iré junto con Willy a buscar a Cellbit.

- Así es, el gran equipo que hacemos es necesario en esta misión.

- Ya veo... suerte entonces...

La actitud de Foolish había cambiado completamente al ver a Wily, no había razón para ello, cada día comprendo menos a este chico.

- Mi niña, papi tiene que ir a una misión, sé buena ¿si?, te traeré algo de por allá.

- Cuídate pa, te extrañaré.

- Y yo a ti mi niña. Nos vemos Foolish.

- Adiós, Vegetta...

Narra Foolish:

¿Quién era ese y por qué demostraba tanta confianza con Vegetta? Al parecer se conocen de antes, con nadie lo había visto sonreír al verlo entrar. Debo averiguarlo.

¿Realmente me amas? | FooligettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora