Parte 38|Let's go my friend

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Al regresar a casa usando el teletransporte Vegetta se encontró con Willy en su habitación, estaba dormido al parecer, lo miro por algún tiempo y a su mente regresaron aquellos momentos que pasaron años atrás, quizás se estaba equivocando en sus decisiones, pero ahora no quería lastimar a Willy con su indecisión.

Narra Vegetta:

Al llegar la noche daba vueltas en la cama sin lograr conciliar el sueño, a mí mente solo venía aquel reencuentro con Foolish, me había hecho tan feliz verlo, ya no había sentido aquel sentimiento de que el corazón quisiese salir de mi pecho, sé todo lo que pasé por los sentimientos hacia Foolish, pero no puedo evitarlo, en el fondo trato de justificar su actuar, aunque sé que quizás en verdad estuvo mal.

A la mañana siguiente recibí el llamado de Maximus, necesitaba que saliera de exploración nuevamente, al parecer la misión había sido adelantada, temían por la seguridad de los habitantes pues ya habíamos tenido el ataque de criaturas nada habituales, seguramente causadas por alguien, ¿el principal sospechoso? Doblas por supuesto.

Justo antes de emprender camino a la casa de Maximus recordé la promesa que le había hecho a Foolish el día anterior, así que primero fui a su castillo, esta seria nuestra primera aventura, espero no arrepentirme de ello. No entiendo porque la timidez me invade cada vez que vengo a verlo.

Llamé a la puerta y después de un rato abrió aquel chico con esa sonrisa tan característica, ahora sus colmillos me parecían inclusive lindos, aunque para otros eran espeluznantes.

- ¡Foolish!

- ¡Hey, Vegetta! ¿y Leo?

- Bueno, ¿recuerdas la misión que te comenté?

- Claro, apenas fue ayer que me lo contaste.

- Pues resulta que la han adelantado, ¿te gustaría acompañarme?

- Por supuesto, iré por mi capucha, entra.

- Gracias.

Mientras Foolish buscaba yo solo contemplaba aquel inmenso lugar, no era nada como lo recordaba, él había restaurado cada esquina, este chico era increíble, no para jamás de sorprenderme.

- I'm ready.

- Let's go my friend.

Juntos llegamos a casa de Maximus para recibir ordenes de aquella misión.

- Hombre Vegetta, oh Foolish, que sorpresa.

- Hola Maximus, Foolish me acompañara a la misión en esta ocasión, espero no te moleste.

- Claro que no, es nuevo, todo hay que decirlo. Por cierto, aquí hay bocadillos por si tienen hambre. Bueno para lo que los cité, saben que últimamente hemos tenido bastantes ataques en el pueblo, y tenemos la pequeña corazonada de que viene desde las montañas, y necesitamos que ustedes dos vayan ahí e investiguen a ver que encuentran.

Mientras Maximus hablaba Foolish estaba comiendo uno de los bocadillos que nos había ofrecido, una pequeña dona glaseada, debo admitir que gracias a ello solo había puesto un poco de atención a la explicación de Maximus. Al darle un bocado a una de las donas al tótem se le formó un pequeño bigote de glaseado por lo que reí al ver aquella tierna escena.

- Vegetta, hace bastante tiempo no te había visto reír así -aclaré la garganta para responder a aquel comentario.

- Bueno que te digo, no lo controlo, Foolish, límpiate muchacho.

Pude ver un pequeño sonrojo en el rostro de este, ahora me parecía aun mas tierno, que me pasa por dios, no recordaba lo lindo que era, estuve cegado bastante tiempo.

Entonces, Maximus, vamos, investigamos y volvemos con el informe ¿cierto?

- Como de costumbre Vegetta.

- Ok, nos vamos entonces, hasta luego.

- Nos vemos Maximus.

- Hasta luego Vegetta, hasta luego Foolish.

Estuvimos bastante tiempo del camino en silencio, Foolish venía unos pasos detrás de mí, yo estuve intentando recordar si había empacado víveres suficientes en caso de cualquier emergencia, y de pronto aquel chico rompió el silencio.

¿Realmente me amas? | FooligettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora