¿Realmente me amas? | Fooligetta

Parte 28|Reencuentro

A la mañana siguiente continuaron con su viaje y al salir del bosque por fin consiguieron usar los teletransportes que había hecho Vegetta y regresar a la entrada de la casa de Roier fácilmente.

- Benditos aparatitos los tuyos eh Vegetta.

- Sabes que siempre intento facilitaros la vida Willy -dijo con una sonrisa el de ojos violeta.

- ¡CELLBIT! -escucharon un grito entusiasmado y pudieron ver a un menor correr hacia el mencionado y besarle intensamente- ¡Estás bien! te extrañé tanto gatinho.

- Y-yo t-también guapito.

Dijo entre quejidos el mayor, esto debido a que sus heridas habían sido lastimadas por aquel abrazo, aunque no se quejaba de ello en realidad, amaba volver a ver a su pareja después de tal tormento.

- Oh, lo siento mucho... estás muy lastimado, te curaré, Vegetta, Willy, muchísimas gracias chicos, les debo la vida en serio.

- No es nada Roier, fue un placer. -mencionó el de ojos verdes al menor.

- De nada pequeñajo, ahora ve a curar las heridas de tu amorcito anda.

- Lo haré, gracias en verdad.

Se fue dejando a los dos aventureros solos.

- Bueno, otra aventura completada por el equipo Wigetta compañero.

- Vaya que si Willy, es increíble contar contigo para estas aventuras, contigo son mucho mejor.

- Sabes que me gusta pasar tiempo contigo compañero.

- Oye, ¿por qué no te quedas un tiempo aquí?

- ¿Y dónde viviré?

- Willy por favor, todo lo mío es tuyo, venga vamos a la torre.

Ambos jóvenes se fueron camino a la torre del de ojos violetas, este abrazando por el hombro al de ojos verdes.

Con lo que no contaban es que a lo lejos estaba observándolos un joven tótem herido.

Narra Foolish:

Estaba viendo aquella escena y no puedo describir lo que sentí, quizás eran celos o algo por el estilo, ¿la razón?, bueno, en algún tiempo solía ser yo a quien Vegetta abrazara y llevara a su torre. Solo quería ir y decirle todo lo que sentía, hacer que todo volviera a lo de antes, pero sabía que yo había ocasionado todo esto, él lo quiso arreglar y yo no puse de mi parte, quizás no lo merecía en realidad. Solo quería oírlo decir nuevamente "don't worries Foolish, yo te protejo".

Narra Vegetta:

Llegamos a mi torre Willy y yo.

- Bueno, esta es mi humilde morada.

- Humilde dice, nunca dejas de sorprenderme con lo que haces Vegetta, las remodelaciones aquí están increíbles.

- Gracias tío, te mostraré tu habitación.

De camino a la habitación de invitados era inevitable cruzar por las habitaciones que eran de Leo y de Foolish, al hacerlo me quede mirando hacia dentro de ellas.

- ¿Pasa algo?... oh ya veo, ¿eran sus habitaciones?

- Si... lo eran, da igual, ven.

- Tienes que presentarme a esa niña pronto.

- Quizás lo haga hoy.

Le mostré su habitación y lo deje acomodar sus pocas pertenencias que había traído consigo.

- Bueno vamos, tengo ganas de ver a Maximus y a Luzu.

- Claro.

Fuimos rumbo a casa de Maximus y para buena suerte de Willy ahí estaba Luzu y Leo, aunque para mi mala suerte, estaba Foolish.

- ¡Papá volviste! -Leo corrió hacía mí y me abrazó.

- Te dije que volvería mi niña, mira lo que te traje -le entregué una pequeña florecita morada- directo desde las profundidades del bosque.

- Me encanta pa, gracias.

- Hombre Willy.

- Maximus, cuanto tiempo, Luzu lo mismo para ti eh.

- Bueno es que no vienes a visitarnos -comentó Luzu.

- Les comento que es la misma distancia de por medio.

Reímos ante aquel comentario, excepto Foolish, por lo que me acerqué a hablar con él.

- Foolish, ¿cómo estás?

- Bien Vegetta, gracias por preguntar.

- Tan borde como de últimas fechas eh, no me sorprende ya.

Dije para alejarme de él y volver con los demás.