1:La Muñeca de la mafia [Mentiras Y Secretos]

capítulo 4

Islas Canarias. Una de las islas más hermosas y visitada de España. Las islas Canarias eran muy famosas por su clima y por las hermosas playas, y ni hablar de su gastronomía. Nos encontrábamos en una de las propiedades que teníamos aquí.

Estábamos terminando de vestirnos y arreglarnos para irnos a la fiesta. Al parecer era el cumpleaños del mejor amigo de los Vasileiou.

Neo Georgiou. Hijo de Amón Georgiou y June Georgiou. Es hijo único. Griego. Ojos azules. Cabello negro. Piel dorada. Cuerpo de atleta. Un gran sujeto sin antecedentes.

Era uno de los socios más jóvenes de los Vasileiou; sin dejar a un lado que es uno de los solteros más codiciados de España junto a los Vasileiou.

Neo era el proveedor de armas para los carteles Griegos. También es un muy buen comerciante en cuanto a las drogas.

Qué suerte la de él.

El negocio de los Georgiou y Vasileiou tienen generaciones.

El cartel Griego...

—¡Mis muñecas es hora irnos! —dijo nuestra mejor amiga al entrar a la habitación—. Santísima madre...¡Están hermosas! —exclamó estupefacta.

Apenas dejamos Madrid, ya teníamos todo preparado para la fiesta.

Esperando por nosotras.

Jonas se había ido a la agencia otra vez. Después de la noticia y una noche en casa debía volver a trabajar y revisar que todo estuviera en orden... Y por orden me refiero a que no hayan encontrado las rutas de nuestros tráficos.

Al principio no entendíamos el porqué, el señor Argent mandó lejos a Jonas...

Ahora sabemos el porqué..

Necesitábamos ojos dentro de las agencias para poder actuar sin ser detectados. Si queríamos invadir un país sin escándalo, Jonas era quien nos pasaba la información de por dónde ir. Aunque no todo aquí es lo que aparentamos.

Maldito Jonas y su suerte.

—Bianchell sabes que te amo ¿verdad? —la miro —. Pero por favor no digas que me veo hermosa porque no lo estoy.

—No le hagas caso...solo esta amargada porque no viste de negro —mencionó sharlene quien se observaba en el espejo.

—Aaaaa...jajajaja, eso explica tu cara de culo —ríe a carcajadas.

Madre llegó a la habitación para decirnos que debíamos irnos o se nos haría tarde. A decir verdad, la puntualidad nunca ha sido nuestra fuente...

Salimos de la habitación y nos dirigimos a nuestros autos. Madre nos dijo que dentro encontraríamos unas máscaras que debíamos usar.

Resulta que era una fiesta de máscaras.

¿A quien en su sano juicio se le ocurre hacer una fiesta de máscaras a la 1300 horas?

Creo que a él.

Subimos a nuestros autos. Bianchell se fue con mamá en la camioneta mientras que mis hermanas y yo íbamos cada una en su propio auto.

Encendí mi auto para colocarme el cinturón. Observe en el asiento del copiloto la máscara que habían dejado por órdenes de la matriarca de la familia. Era blanca con piedras plateadas y perlas blancas .

Era hermosa no iba a negarlo.

Comencé a conducir hasta mi nuevo destino...

La mansión de los Georgiou..

Era increíble. Su arquitectura fue diseñada hace al menos unos 100 años. La construyeron del otro lado del mar. Eso le daba una entrada y vista espectacular. Los Georgiou se daban sus lujos.

Baje del auto y tome la máscara. Mis hermanas se acercaron a mi con sus máscara en mano. Al parecer teníamos las mismas, sólo qué... Distintos colores, acordes a los vestidos.

—¿Listas para el inesperado momento? —comentó shayna.

—No, y no creo estarlo nunca —exclamo irritada.

—Hay no empieces con tu humor por favor... Ya bastante que aguante durante el viaje en el avión —comentó Sharlene agotada.

—De acuerdo ¿entramos? —asintieron—. Cualquier cosa que se les haga sospechoso avisan —me coloque mi máscara y ellas hicieron lo mismo.

Caminamos a la mansión donde la música llenaba cada esquina y rincón de esta. Personas iban y venían, caminaban de aquí a allá. La fiesta era muy sofisticada. Muchos socios y empleados estaban en este lugar. Todos tenían su rostro cubierto. Podría haber un asesino entre nosotros y nadie lo sabría. Avanzo hasta la mesa dónde un gran bufete reposaba. Tome una copa de ambrosía y me alegra saber que estas personas saben de bebidas. Comencé a observar el lugar en busca de algo extraño.

Socios...

Empleados...

Familiares....

Amigos...

Todo en orden al parecer...

No había mucha seguridad..

—¡Atención a todos!... Quiero agradecerles por venir a mi fiesta de cumpleaños —Apareció por quien estábamos festejando—. La verdad no tienen la mínima idea de lo especial que me siento al verlos reunidos aquí —habló por el micrófono—. Desde que mis padres fallecieron en ese horrible accidente no creí que volvería a tener una familia —se quedó callado por unos segundos y luego continuó—. Pero he vivido rodeado de un gran ambiente familiar donde he convivido con los mejores chicos que se convirtieron...No solo en mis socios...Sino en mis hermanos...¡Un aplauso para los hermanos Vasileiou! —exclama fascinado.
 
El lugar se llena de aplausos y halagos para los hermanos Vasileiou. Dos figuras se acercaron a su mejor amigo y lo abrazaron. Varias chicas los miraban enamoradas y se les caía la baba.
Que patéticas.

Uno era:

Percy Vasileiou, hijo menor. 19 años de edad, cabello claro, ojos verdes, piel blanca, sonrisa Colgate ,buena forma, simpático. Sabe usar un arma si de defenderse tratase. No tiene ningún antecedentes. Un aficionado del fútbol y de McDonald's....

Era el prometido de shayna.

Miré al otro chico que estaba había terminado de saludar a su mejor amigo:

Axell Vasileiou. 21 años. Cabello oscuro. Ojos café. Piel dorada. Hijo del medio. Buena forma. Tampoco tenía antecedentes. Simpático y educado. Muy sociable. Usa armas al igual que su hermano menor…
Era el prometido de sharlene.

Ahora la pregunta que todos se hacían...

¿Dónde está el mayor de los Vasileiou?.

—Nuestro hermano mayor tuvo un inconveniente pero esta por llegar en cualquier momento —habla Axell con ese acento español mezclado con un toque griego.

¿No podría quedarse dónde anda para poder largarme de aquí?.

—Bueno, no vamos a esperar por el...así que.. ¡A disfrutar! —exclamó Neo muy feliz.

Algunas personas se acercaban a la pista de baile con su pareja. Cambiaron la música y comenzaron a bailar.