Max salió del coche, estaba más calmado, sabía que debía controlar la situación y adelantarse a los pasos de La Reina de Corazones.
Se apoyó en la puerta delantera del coche delante de Duende y esperó a Violeta.
Muchas chicas que pasaban se le quedaban mirando o le guiñaban en ojo, pero él las ignoraba, todo era distinto desde que conoció a esa chica, esa increíble chica, lo que haría si la tuviera para él solo un par de horas, era guapísima.
A lo lejos se acercaba Violeta al lado de un chico que tenía su brazo pasado por los hombros de la chica mientras le daba besos en los labios. ¿De dónde había salido ese tío?
- ¡Max! -Violeta se acercó casi corriendo a darle un abrazo, Max la besó en la frente sin quitar la mirada fija en H que estaba delante de ellos con las manos metidas en los bolsillos.
Violeta dejó de abrazar a Max y volvió al lado de H.
- Max, este es H. Es... Un amigo. -Dijo riéndose mientras besaba a H en los labios.
- Ya, claro. Un amigo. -Le respondió riendo también. - Encantado, tío. Soy Max. - Se saludaron.
- Bueno, nena. ¿Nos vamos? -Le preguntó Max.
- Sí, me muero de hambre. - Se dispuso a despedirse de H y miró a Max con cara de complicidad.
- Vale, vale, ya lo pillo. Os dejo solos. - Dijo Max mientras Violeta le daba las gracias moviendo los labios y riéndose a carcajadas.
Max se metió en el coche.
- Bueno, pues me voy a comer. -Le dijo Violeta a H mientras este la abrazaba y le daba besos en el pelo.
- Anda, vete ya, tu hermano te está esperando. - Le subió la cabeza empujándole la barbilla con los dedos y la volvió a besar. - Después te escribo, amor.
- Vale, pórtate bien. - Se despidió Violeta mientras le devolvía el beso.
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Veni,vidi,vici (EDITANDO)
Novela JuvenilQuizás creas que esta es una novela cualquiera. Pero te marcará para siempre. Todo va a cambiar en la vida de Violeta, pero no solo en la de Violeta... También en la tuya después de leer esta intrigante, misteriosa y romántica novela. Juveni...
