𓇊Capítulo 32𓇊

10 1 2
                                    

Día 28, ciclo 12, en horas de la tarde.

Roy

Podría tratar círculos pocos profundos, pero que ardan. Podría jugar a rellenar cuadritos cortando lentamente a la plasta de mierda que causó todo esto, también me aseguraría de que el dolor mental nunca cabe; ese es peor.

—Deja las maquinaciones para otro momento —regaña Mike arrebatando arrebatándome la imaginación —vendrán por cargamento y es la única oportunidad —me recuerda el plan.

Cuatro ciclos en los que hemos perdido contacto con todo, las bastardas hijas de Evelyn usan sangre de Alice para obligarnos a crear armas y no importa qué tanto de inmunidad hayamos desarrollado, una parte siempre termina cediendo.

Han dejado que Alice hable con nosotros, solo para ver cómo la hicieron mierda con los equipos de extracción.

—Los sacaré de esto pronto —dijo contándonos que entregará los máximums a cambio de nuestra liberación.

Ni ella se cree eso, pero en su actual estado se aferra cualquier esperanza.

Con la pérdida de magia Valentia no podría estar con ella y eso aumenta mi ira porque sé en lo que acabará, una desconexión entre ellas.

Estar aquí solo ha hecho que evalué aún más la existencia, a la verdad existo solo por ella, jamás tuve un sentido y sé que no lo tendré. Pase años engañándome con que lo encontraría, conque encontraría algo que me diera algún sentimiento hasta que la conocí.

Sus ojos rojos no encajaban con el atuendo rosita o la tiara que llevaba todo el tiempo; tenía doce ciclos de existencia, mientras yo hacía todo tipo de trabajos temporales para poder sostenerme en la academia de exploración mágica, Alice estaba en un internado preparándose para hacer reina, pero escapándose en las noches con la ayuda de Mike, a quien conocí desde los once.

La imagen de la pérdida Alice no se compara a la que fui conociendo, después justo cuando se convirtió en mi Davola.

El grupo de los Santuairis entra al sótano y antes de que pueda avisar a Mike, él ya está sobre los barrotes atrayendo la atención de todos.

—¿Qué te parece si empezamos el juego? —me anima y disparo todas las navajas que ha estado acumulando en los lapsos de control.

Los vivos no tardan en venir, buscan sedarnos y parto una de las cápsulas, dejando que se esparza por los barrotes hechizados y tomó la oportunidad destruyéndolos y atravesando a unos de los guardias. Su sangre me repugna, porque con esto solo estoy teniendo misericordia de sus miserables vidas.

Mike disfruta de manipular sus emociones y acciones desde sus poderes, salimos del sótano buscando la salida del exterior donde será la invocación rara que atraerá los máximums aquí.

Agudizo mis sentidos buscando el rastro de Alice, mientras escapamos del radar de los santuarios que resguardan el perímetro.

Son solo unos minutos, algo recorre mi cuerpo en cuanto la concentración que me propuse logra su cometido y ubicamos a Alice concentrando sus fuerzas en el hechizo.

Es evidente que su magia creció cuando libero los poderes ocultos, trato de no estar sorprendido con que logre una invocación inter dimensional, como trate al igual hace unos ciclos cuando descubrí que ella misma trajo a sus padres de vuelta. Su poder es casi incalculable y a pesar de no tener fuerzas y mostrar los efectos de un desgaste constante en su cuerpo más delgado, se ve que logra la invocación, pero no el cometido de esta.

Su expresión es muy obvia para mí y confirma mi pensamiento, está en conflicto con sus acciones.

—Hay muchas barreras —le explica A Evelyn y está la golpea renegando.

Eternidad es ÉpicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora