21. Hay que hacer silencio

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⚠️ Este capítulo puede contener escenas explícitas. Se recomienda discreción ⚠️

Aquel accidente donde Mia nos vio a Leyla y a mí en mi sala de estar nos obligó a tener que dejarlo para otro momento, ya que se había perdido el ambiente tan erótico.

Por culpa de que estuve ocupado con el trabajo por el cierre del mes y por culpa de que Mia está demasiado intensa queriendo saber cada detalle de la mujer que vio conmigo, no tuve tiempo a estar con Leyla, y de hecho ella conmigo tampoco, que al parecer se hizo bastante amiga de Mark.

Pasó una semana desde entonces, ahora es miércoles, estos días me voy antes de la escuela al no tener que dar ninguna clase. Me estoy dirigiendo a la secundaria, pero con Mia en el auto, que me dijo que la vaya a buscar porque debía ir a un sitio cerca de donde trabajo, aunque presiento que me mintió para poder hacerme el interrogatorio que tanto ansiaba.

Sabía que mentir era inútil, ella lo descubriría. Voy a ser totalmente sincero con Mia, a excepción de contarle quien es aquella "mujer"

— ¿Tuvieron sexo antes? —preguntó.

— Sí.

— ¿Cuántas veces?

— ¿De qué te sirve saber?

— ¿Cuántas veces tuvieron sexo? —repitió ignorando mi pregunta por lo que suspiré.

— Dos.

— ¿Pero fue sólo sexo? ¿No hicieron nada más?

— Tal vez alguna que otra cosa, pero no voy a entrar en detalles —el semáforo se puso en rojo y yo lo aproveché para mirar a Mia— ¿Cuándo va a terminar el cuestionario?

— Cuando yo quiera —evité rodar mis ojos y devolví mi mirada al semáforo— ¿Ella sabe de tu secreto?

— Sí, no me juzgó —Mia se sorprendió.

— ¿No te dijo nada de nada?

— Nada de nada.

— Debes casarte con ella de inmediato —me alarmé y volví a mirarla— ¿Es una mujer dulce? ¿O sólo están de calientes? ¿Siquiera tienen algo? Tal vez alguna etiqueta de su relación.

— Para empezar; no me casaré jamás con ella.

— ¿Por qué no?

— Porque... no y punto. Segundo; creo que es una chica bastante dulce, pero no conozco bien ese lado de ella.

— Es decir que no están tan involucrados sentimentalmente —dijo al entender mágicamente toda la situación.

— Exacto. Apenas hace una semana y poco más nos arreglamos para "tener algo"

— ¿Qué? ¿Son amigos con derecho?

— ¿No hay un término parecido a ese pero sin la palabra "amigos"?

— ¿Amantes?

— Siento que esa palabra involucra amor.

— Lo que sea, se entiende. Entonces ahora estás de caliente con ella y cada vez que quieren pueden coger —suspiré.

—Sí, pero puedes decirlo de manera menos vulgar —el semáforo cambió a verde por lo que continué conduciendo.

— Ahora entiendo todo —asintió con lentitud y miró hacia la ventana, pero algo la puso eufórica— ¡Espera! —se giró a verme— ¿Crees que van a crecer sentimientos por su relación? Tal vez se terminan enamorando, después de todo no sales con una mujer hace años.

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