5. Mírame

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⚠️ Este capítulo puede contener escenas explícitas. Se recomienda discreción ⚠️

El profesor me confundió bastante con aquello que dijo.

"Lo hablaremos el viernes"

No se me ocurre nada sano con esa frase. Los viernes tengo historia en las últimas horas, es decir, un rato antes de que cierre la escuela. Sólo se me ocurre que quiere estar a solas conmigo, ¿pero por qué? Salió más que enojado de la tonta reunión con mi papá y la directora, se notaba que él me tenía odio y luego se vio triste porque mis comentarios lo hirieron, ¿y de repente quiere tener sexo conmigo? No, espera, me estoy adelantando.

Aunque tal vez tengo razón, el profesor ya se mostró algo provocativo aquella vez que explicaba un tema en clase y me miraba con tanto deseo... ¿o yo sola vi el deseo? Es irritante no poder entender los sentimientos de ese hombre, siempre lleva la misma maldita expresión.

No importa, le quitaré la cara seria. Ya me decidí, intentar seducirlo de nuevo puede ser buena idea, logré convencerlo la primera vez, ¿por qué no la segunda? Por supuesto que hago esto por mi nota, además del atractivo del profesor. Lo máximo que pido es un siete, ni siquiera pido un nueve o un diez, así que espero no se queje porque no le cuesta nada darme esa nota.

La semana pasó y se hizo viernes. Como mis pensamientos se dedicaron puramente a fantasear acerca de aquel "hablemos" del profesor me encargué de estar preparada para la situación en caso de que acepte. Ilusionada de que tal vez el señor Kelly me quite la ropa esta tarde me puse lencería. Un brasier rojo de encaje con pequeños detalles de flores en las copas que combinaba con mis bragas, aunque estas venían acompañadas de una tira que rodeaba mi pelvis, agregando un detalle sexy.

Me sentía una loca cuando me estaba poniendo la ropa interior, jamás creí que iba a seducir a alguien, mucho menos a un profesor. Seguro no lo parece, pero soy muy vergonzosa, hago esto sin tanto miedo porque voy a seducir con el propósito de mejorar mi calificación, pero si no fuera así estaría roja como un tomate.

Tuve novios (lamentables novios) y perdí mi virginidad hace bastante, eso me ayudaba a tener algo de confianza con el tema de coger con otra persona... aunque... esta "otra persona" es un profesor que veo todos los días...

Ya estoy sintiendo la vergüenza.

[...]

— Oye, ¿estás bien? —me llamó Ana asomándose por mi hombro ya que se encontraba en el asiento detrás mío— Estuviste callada todo el día.

— Tengo sueño, me desvelé viendo una serie anoche —contesté con la mirada clavada en la puerta esperando a que entre el profesor de historia, ya que el receso terminó hace poco.

Desde que entré a la secundaria estoy nerviosa, temblando, sudorosa y toda inquieta por culpa de la última clase. Tanto pensar en esa situación me quitó la seguridad, ya que se me ocurrieron millones de variables negativas a cuando seduzca al profesor, pero luego recuerdo que cuando se lo propuse él no fue malo conmigo, si no, comprensivo.

Tengo muchas emociones mezcladas, no sé como sentirme.

— ¿Copiaste lo de geografía? —interrumpió mis pensamientos Emily mientras tomaba asiento en su respectiva mesa a mi lado— Porque estuviste toda la clase con tu celular y el trabajo de Hidrografía se entrega el lunes.

— Puedes pasarme las respuestas como haces siempre.

— Ya hablamos de eso. Si te seguimos pasando las respuestas te meterás en problemas como pasó con el de historia —y justo cuando tuvo que mencionarlo, el Diablo pasó por la puerta.

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