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No fue más que por las apariencias, no seas tonto, Omega... Cálmate de una vez, ya se está volviendo molesto verte temblar y esparcir feromonas como un niño recién presentado —El alfa terminó por entrar con Namjoon de la mano, con una mueca al verlo más inconscientemente que en si, sin expresión y solo siguiéndolo

T-tu... — me besaste, quería decir. Lo beso, Seokjin lo beso en frente del pueblo y su animal no hizo más que retorcerse en su interior, dejándolo pasmado. No sabía que pensar, o qué decir, solo estaba que se tiraba al piso de la emoción

Ajá, más bien vamos ya... Tus padres y los míos nos esperan para el brindis y recibir los presentes de los invitados —rodó los ojos, le parecía ridículo el espectáculo del Omega, pues bien él sabía que era todo por mantener una imagen real de matrimonio

Namjoon soltó un profundo suspiro, sintiendo el calor en sus mejillas mientras regresaba su vista al frente, pensando en lo ridículo que debió haberse visto temblando por un beso de su alfa.

Su primer beso, de hecho.

No quiso preocuparse más por eso. Por culpa de su animal, había actuado extraño y ya había vuelto a molestar al alfa, que todo el día pareció estar de buenas, y seguro ahora mismo lo había hecho enojar.

Sonrío a sus padres, que tomaron las manos del alfa saludándolo y felicitando a este. Su padre revolvió un poco su cabello, regresandolo a su lugar luego.

Su abuela, por otro lado, ni siquiera lo miró, saludó de forma sería al alfa, muy diplomática, para luego irse a sentar en su lugar. Se alejó un poco al ver a los padres del alfa, que lo abrazaron con fuerza, felicitandolo. No esperando que luego, lo unieran al abrazo muy felices.

Bueno, comiencen con el  brindis y traigan la comida, no hay tiempo qué perder hoy —Habló Siwon, ayudando a su esposa a acomodarse en su asiento, todos celebrando mientras se levantaban con su copa en mano.

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Había sido un día muy largo, muchos saludos y caminar entre invitados de la manada y de fuera de esta, familiares, amigos del alfa, empleados... otra vez, lo de siempre.

Y con su cabeza en otro lugar, ese día no había hablado mucho, aunque en realidad no es como que pudiera, solo era el omega del líder.

Solo había hablado con la señora Hari y su Omega, el señor Sung, y supo que su abuela estaba disgustada, se notaba en su aroma y en la mirada que le dio cuando la pareja se alejó y Namjoon regresó a la mesa.

Mm... ¿Por qué ese proyecto, Seokjin? Hay cosas más importantes que tenemos que hacer en la manada, conseguir alianzas, estrategias para generar más dinero y empleo... tenemos lo adecuado de salud, es un desperdicio esas campañas, solo les llenamos los bolsillos a esos inútiles de ciudad — la mujer le dio una mirada de desaprobación a su hijo cuando intento hablar, haciendo una ceña a Seokjin para que hablara.

La familia del alfa lo miró, espectantes, esperando la respuesta del alfa que intentó no rodar los ojos al recordar que Siwon lo había convencido de cumplir un capricho del omega.

Pues verá señora Kim, la mayoría de los acuerdos son intercambios comerciales, escogí dos para inversión en la manada, realizar la restauración del salón de reuniones del pueblo para llevar a cabo actividades culturales y deportivas, me pareció una buena idea pues la manada, sobre todos los jóvenes están muy felices... — tragó al ver la mirada de la mujer, sabía que no había dado respuesta a su pregunta — y la segunda, campañas de salud, invertir en algunos cambios al hospital, algunas renovaciones en equipos, capacitación de personal, ampliación de las instalaciones... fue por pedido del personal del hospital, y una manera de hacer que las personas de la manada se motiven a hacer otras cosas...

El alfa siguió hablando, diciendo lo maravilloso que sería que la manada se preocupará por su salud, la de los niños, promover las actividades en familia y los chequeos médicos. Todos lo miraban impresionados, incluso sus suegros y la alfa anciana, impresionada por la idea, la manada estaría más que agradecida al sentir que los líderes se preocupaban por ellos y los incluían, pidiendo su participación.

Namjoon sonrío viendo al alfa, mirando a las personas al rededor mientras apretaba los manos bajo el mantel, manteniendo la calma al oír a Seokjin decir toda la charla que tuvo con los señores Kim. Seokjin recibió todo el crédito, palmaditas en su espalda y felicitaciones pues estaba empezando más que bien.

Muy bien, chico. Nada me hace más feliz está noche, no hay nadie mejor que haya podido ser escogido que tú, para ser líder, padre de esta manada y de la nueva generación Kim — la alfa se levantó, apretando la mano de Seokjin y mirando con fastidio a su nieto, que seguía sentado mientras los demás se ponían de pie para despedirse de ella.

Seokjin movió un poco su pie, golpeando una pierna de Namjoon suavemente quien se levantó al notar lo que todos estaban haciendo, de inmediato realizando una reverencia a su abuela.

Uhm, hijo... el chico luce cansado, deberían descansar un rato, podrían dejar un rato el lugar — propuso Taehyung, tomando de la mano a su esposa para que se pusiera bien de pie

Zapatos altos... — hablo JinRi, haciendo reír a los demás, menos a su hijo y a Namjoon, quiénes se miraron incómodamente

No, no podemos dejar la fiesta así como así... uhm, es nuestro día. Por ahora solo deberíamos conversar — todos se sentaron de nuevo, felices por el ambiente.

Namjoon solo suspiró tranquilo, al menos su abuela se había ido y lo dejaría en paz.

Los dejaremos un momento, por favor... necesito hablar algo con mi omega — los adultos solo rieron divertidos. Se alegraban de ver que los chicos finalmente se aceptaban como destinados, o eso creían.

Namjoon fue jalado por Seokjin, hasta un pasillo vacío en el segundo piso del edificio. Creyó que lo regañaria por hacerlo quedar mal al estar de distraído pero se quedó sin palabras ante las disculpas del alfa por robarse sus ideas.

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Mmm🌚

[margaritas] - JinNam©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora