✶ 𝗞𝗶𝗹𝗹𝗲𝗿𝗺𝗼𝗯 | 𝗧.𝗸.

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Tom empezó a entrar y salir de ella rápidamente, sin importarle el dolor que está sentía. No le importaba escuchar su llanto y gritos desesperados, el solo disfrutaba el asqueroso momento.

— Oh, mierda. — musitó — ¡Eras virgen! Bueno, un poco de sangre no me hara nada, algún día dejarías de serlo, es un logro ser el primero en poner su pene dentro de ti.— Siguió dando fuertes embestidas mientras sonreía.

La chica sollozaba desesperada, el dolor que sentía en su parte íntima y en su cabeza por el golpe que llevo, era inigualable..nunca se había sentido tan adolorida. No le deseaba lo que le estaba sucediendo ni a su peor enemigo.

Tom paro por unos segundos, estaba muy sudado al igual que Britney, la sangre que salía de su entre piernas se regaba poco a poco por el piso, Tom tomo un fuerte aliento y espero, después sonrió.

La tomo de las caderas y la apreto, preparo su pene y sin esperar nada, lo metió por completo. Todo su aparato estaba dentro de ella, cosa que hizo que la chica soltara un gritó entre cortado de dolor, no podía soportar más. Estaba a punto de desmayarse por el golpe en su cabeza y todo el dolor en su cuerpo.

— Ya, ya no mas, Por favor....— susurro ella, haciendo que el parará, estaba muy sudado y se notaba agotado, saco su parte de ella y se levantó, dejándola en el piso sin ninguna fuerza ni ganas de levantarse.

— Que va, espere más, no sentí nada en particular. Solo otro agujero más donde meter mi pene, es lo mismo de siempre. me cogí a otra de muchas. — Sonrió malicioso, sus ojos estaban muy rojos y su respiración agitada, le dio una última mirada a Britney y salió del lugar.

THIS IS BRITNEY'S POINT OF VIEW

Todo lo que me acababa de suceder me dejó en shock, Tom.. el "mafioso" malvado que jamás pense malvado, acaba de abusar de mi a la fuerza. El dolor y asco que siento ahora, es horrible. Jamás pensé que me sucedería esto, otra cosa que más me duele es que...no pensé que Tom fuera así, ha hecho muchas cosas malas pero en el fondo llegué a pensar que podría ser alguien bueno. ¿Porque? Por qué lo idealice. Todo este tiempo que he estado junto a él, lo imaginé de otra manera. Pensé que podría llegar a ser una buena persona y muy en el fondo, dentro de mi estaba llegando a sentir algo amoroso por el. pero no, aquella persona que dibujo estrellas en mis sueños, aquel hombre que dibujo estrellas sobre mis cortadas, sobre mis cicatrices....no existe, el verdadero Tom acaba de hacerme lo peor. Lo que una mujer jamás desearía. ¿Ahora que haré? ¿Seguirá abusando de mi? Me doy asco. Ahora sí que soy una mascota, alguna vez dije que no permitiría que me tocarán un solo pelo, ¿Y ahora? ¿Que haré? ¿Quien me cuidara de el? ¿Quien me ayudara? ¿Escaparé de aquí? ¿Viviré? Todas esas preguntas rondaban por mi cabeza en pocos segundos, aún seguía en el piso. Aún seguía sangrando, aún seguía doliendo.

Esto es algo que quedara por el resto de mi vida. Algo que nunca sanará y me atormentara siempre, si no llego a escapar me mataré, no puedo soportar los abusos de..de este maldito hombre, no puedo verlo después de lo que me hizo, ahora mismo lo estoy odiando con toda mi alma y deseo que muera, que alguna vez muera de la peor manera que un abusador podría morir.

Aún seguía boca abajo, gire mi cabeza hacia atrás para observar mi trasero, todo este estaba lleno de sangre y cosas, estaba tan asqueada que deseaba que todo lo que sucedió fuese un sueño, pero no. Por más que quiera esto es la vida real, soy un objeto para estos hombres, soy una...soy una maldita muñequita.

Quizás ustedes piensen, ¿Como esta tranquila después de que abusaron de ella salvajemente? Bueno, no es que este tranquila. Simplemente aún no lo asimiló, no puedo aceptar que abusaron de mi...no puedo aceptar que estoy siendo usada en todas las maneras. Ni quiero imaginarme lo que vendrá para mi, ¿Como podré verlo a los ojos? ¿Como podré controlarme para evitar golpearlo hasta matarlo, al momento en que lo vea? ¿Alguna vez pagará por lo que me acaba de hacer? ¿Alguna vez podré ser libre y no recordar esto?

El dolor que siento ahora mismo en todo los sentidos, no se lo desearía a nadie. Hubiese sabido esto y preferiría estar muerta.

— Te-te odio, Tom kaulitz. Te odio con toda mi alma....

Mi voz esta entre cortada y mi respiración también, intente levantarme y cerré mis ojos con fuerza intentando soportar el dolor, me levanté un poco y me quedé quieta por unos segundos, unas lágrimas salieron de mis ojos,  recorrieron mis mejillas, humedeciendo estas y mojando mis labios, aquellos labios que se encontraban sangrientos y rotos.

Mi cuerpo estaba sucio. Yo estaba sucia, jamás podría olvidar esto. Mis ganas de llorar y de romper todo a mí al rededor eran grandes, estaba a punto de romper en llanto.

Doris.

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