✶ 𝗞𝗶𝗹𝗹𝗲𝗿𝗺𝗼𝗯 | 𝗧.𝗸.

36

— Buenas tardes señor kaulitz, ¿Que sucede? ¿Busca a alguien?

— Si, estoy buscando a alguien. — lo observó — ¿Recuerda la vez que vine con mi hermano y mis amigos? Bueno, ese día observé a una chica...una chica rubia, tenía ojos cafés y no se podía mirar más allá de eso, tenía una malla roja y bailaba árabe o algo parecido, ¿Se encuentra aquí? Necesito verla.

El joven se quedó pensando por unos segundos, se preguntaba. ¿Porque la buscaba? El sabía que Tom era un hombre peligroso y le causaba algo de corte la pregunta, de igual manera debía responderle. Ella estaba en la cocina y si salía Tom la vería, si no hablaba quedaría como un imbécil.

— Bueno, estuvo de licencia por unas semanas porque se enfermó, ahora está aquí. No tiene malla puesta ni nada, está vestida normal. Vino porque quiere reincorporarse, está almorzando en la cocina — susurro.

Tom alzó su ceja y sonrió, después acarició suavemente su mandíbula y se alejó del lugar, dejando al rubio hablando solo.

— Veamos rubia, veamos cómo eres sin la misteriosa máscara. Espero que seas una buena presa.

Camino hacia la cocina rápidamente, al estar a punto de entrar escucho una conocida voz.

Esa aguda y alzada voz, la conocería en cualquier lugar. Si no se equivocaba era la voz de Britney, aquella chica que fue a una de sus carreras junto a su amiga y que fue bastante molesta.

— "Ha,ha,ha. No sé crean, tengo mucho más por vivir. Si no aproveché mi vida antes, ahora lo haré. Aprovecharé cada mínimo segundo y viviré al máximo, les aseguro que lo haré"

— Está maldita voz.....— susurro Tom, después miro hacia el frente y al intentar entrar, chocó con alguien frente a frente.

Ambos chicos se miraron por unos segundos, si. Si son quién se imaginan, la sonrisa que Britney tenía en sus labios se desvaneció por completo. Tom hizo lo mismo al verla, su mirada de confundido paso a ser una de furioso, estaba maldiciendo volver a ver a esa chica tan molesta.

Britney estaba en shock, ver de cara a cara esas trenzas, ese alto y temeroso hombre, le hacía volar la cabeza, era lo peor que podía pasarle en estos momentos.

— Tu..— susurro.

— Maldita seas, ¿No ves por donde caminas? Me regalaste tu asqueroso jugó en mi ropa.

— Yo iba saliendo, ¡No tengo la culpa de que tú no vieras hacia el frente!

Tom apretó sus puños con fuerza y la ignoro. Camino hacia los otros chicos que estaban sentados, todos estos lo miraban con confundidos y asustados.

— Donde está esa mujer. ¡Donde esta! — dio un casi gritó.

— Disculpe jefe, no sabemos de qué mujer habla..¿Nos podría explicar por favor?

Tom miro a aquella pelirroja conocida, se acercó rápido hacia ella y le hablo.

— Tu, Eres olivia, ¿Verdad? — la señaló.

— Oh, si, si soy yo..¿Porque?

— Aquella noche que vine con mi hermano, tu estabas bailando con tres chicas más. Una pelinegra, una Castaña y una rubia, ¿Recuerdas?

— Mm si, si me acuerdo.

— Dime ahora mismo donde está la rubia, necesito verla. No vi su rostro aquella vez pero ahora necesito contactarla, ¿Sabes dónde vive?

Britney, quién se encontraba escuchando esto, abrió sus ojos con asombro y miro a Olivia, está ya se encontraba mirándola fijamente.

— Oh, bueno. — giro su cabeza hacia Britney y la miro maliciosa — Tiene la suerte de encontrarla aquí hoy, afortunadamente está aquí junto a nosotros.

— ¿De que hablas? ¿Donde esta? — el miro hacia donde estaba mirando ella, observó a Britney quién se encontraba mirándolos sin parpadear un solo segundo.

Ella se levantó de el mueble y camino hacia britney, todos estaban asustados. No sabían para que la buscaba, era demasiado extraño.

— Bueno, querido jefe. Aquella mujer que usted busca es mi querida compañera, Britney.

La miro por unos segundos analizando la situación, ella a él también y no sabía qué hacer, no sabía cómo reaccionar porque no sabía para que la buscaba.

— Ven conmigo ahora mismo.

La tomo fuerte del brazo y la saco del lugar, ella mientras tanto intentaba soltarse del agarre, se estaba lastimando.

— No, a donde me llevas. ¡Suéltame!

— Callate. Callate, idiota. Hablaré contigo por las buenas, callate y déjame explicarte — la recostó de una pared.

Ella se quedó pensando, se quedó quieta mientras esperaba que el de trenzas le hablara.

— Es algo muy sorpresivo, nunca pensé que fueras prostituta. — se burló.

— No soy una prostituta.

— Tampoco pensé que fueras tú aquella chica por la que vine, de verdad es algo muy loco. — suspiro— bueno, en realidad vine a buscarte para ofrecerte algo, es una propuesta de trabajo.

— ¿Propuesta de trabajo? Estas loco, quién sabe en qué quieres meterme.

— Mira, te explicaré todo. — tomo asiento en una pequeña banca — Yo tengo a alguien, digamos que es mi enemigo. El me está dañando mis cosas y da movimientos inesperados, Ivón y yo pensamos en algo. Pensamos en buscar una prostituta a la cual haremos que lo enamore, o al menos que le guste. Si lo hace podrá estar junto a él y averiguar cada detalle, no los informa y después nos serviría de ayuda para joderlo, ¿Entiendes?

— Ajam, ¿Y en eso que tengo que ver yo? — pregunto aún sin entender.

— Bueno, tú seras esa prostituta, serás nuestra nueva muñequita.

— ¿Estas loco? ¡Ni mierdas! No haré algo para beneficiarte, ni que me pagues todo el dinero del mundo lo haría, maldito. — Espeto sin pensar.

— Oh, que triste. ¿Eso quiere decir que no lo haras por las buenas? ¡Genial! Lo harás a mi manera entonces, será por las malas y como me gusta, te arrepentirás.

— Lo que digas, maldito.

— Si, está bien asquerosa prostituta, veremos si en dos días dices lo mismo, te aseguro que vendrás a mis pies a rogarme que te ayude, te lo juro.

Dorita.

Holaaa, como están? Quiero ponerme al día nuevamente, espero puedan soportar lo q se viene.

Gente ayuda, un señor me está mirando mucho y me hablo, me da miedo help😭

Intentaré actualizar por la noche, lxs amo.🌸‼️

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