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Corea del Sur.
Seúl.
Mansión Jeon.


Jungkook tenía entre sus brazos al rubio, el cuerpo de Jimin se estremecía por las caricias del castaño. Se encontraban desnudos disfrutando la calidez del otro, el castaño besaba el cuello y la clavícula del rubio, sus manos se deslizaron por su espalda hasta llegar a sus nalgas la cuales apretó y nalgeo, un jadeo salió de los labios de Jimin.

Jungkook estaba siendo algo brusco, pero aún así cuidaba de no lastimar a Jimin a quien se le notaba el vientre algo abultado.

El pene de Jungkook ya estaba erecto y buscaba desesperado entrar en el recto del rubio, tocó el ano dándose cuenta que ya estaba húmedo y listo para la penetración.
Lo acostó cuidadosamente en la cama, se agachó besando los muslos blancos de Jimin. Disfruto tanto los gemidos y jadeos del rubio, su boca se abría y tomaba aire, suspiraba cada vez que sentía los labios de su Alfa. Un pequeño grito salió de sus rechonchos labios haciendo sonreír de placer al castaño.

-Jungkook por favor.-El rubio jadeaba duramente.- Cogeme duro.

Jungkook soltó una pequeña risa, sostuvo las piernas del rubio para alzarlo levemente, acomodo su miembro en la entrada de Jimin y lo penetró sin piedad, un grito de dolor y satisfacción salió de los labios del rubio.

-Mas rápido Jungkook.- el cuerpo del rubio ardía de placer.

Así lo hizo, en cada envestida movía su mano para más placer en el pene de Jimin el cual se estremecia y se retorcía por el placer. El semen de Jimin salió disparado hacia su abdomen, se retorció y grito el nombre de su amado. Jungkook tomó las caderas del rubio y siguió moviéndose, a pesar de la súplicas que el rubio le decía, quería que parara ya que el placer era demasiado para su cuerpo. Jungkook siguió penetrando hasta que eyaculo, fue tan salvaje que apretó demasiado al rubio. Soltó sus caderas al escuchar su quejido.

-Lo siento no quería lastimarte.- Estaba aún jadeando por la eyaculación.-¿Estas bien?

El rubio asintió con los ojos brillosos, había disfrutado como siempre el placer que solo Jungkook sabía proporcionarle, lo abrazo sintiendo su cuerpo sudoroso y jadeante.

-Te amo Jungkook.-El castaño sonrió y beso los labios de Jimin, disfruto la saliva y el meneo de su lengua.

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El rubio se bañaba con la puerta corrida dando a ver todo su cuerpo desnudo, Jungkook se lavaba los dientes mientras lo observaba por el espejo, estaba molesto no con Jimin si no con el mismo. Observó su cintura y aventó el cepillo al fregadero, se enjuago la boca y suspiro.

-¿Que te sucede?-Las manos delicadas del rubio tomaron el brazo del castaño y lo giro para que lo mirara, ya se encontraba con una bata cubriendo su cuerpo aún mojado.-Te he notado muy raro estos días, ¿Que pasa?

-Ya no te tocaré.-Eso hizo que el rubio lo soltara, su sonrisa se desvaneció y miró al castaño sin comprender.- Creeme que te deseo mucho, no hay día que no quisiera estar contigo. Pero a veces no controlo mi fuerza y algo que puede provocar algún daño físico o a nuestro hijo...

-¿Son por los moretones?- El castaño asintió.- No debes preocuparte amor, entiendo, aunque si puedo hacerte varios trabajos.

El castaño sonrió ante ese comentario, le agrada tanto ese rubio quien no le temía decir lo que pensaba, beso a Jimin el cual se entregó disfrutando totalmente, metió la lengua y Jungkook soltó un pequeño jadeo. Jimin sostuvo el rostro de su Alfa y así fue bajando las manos hasta llegar a la cintura del mayor, sus manos fueron hacia el trasero de este pero antes de tocar algo fueron detenidas por el.

LOVE EXISTS - MAFIA «Parte 1»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora