S E B A S T I A N
Ni siquiera sabía que estaba haciendo aquí. O bueno tal vez si.
Esta fiesta era importante para mis amigos, las únicas personas que han estado pendiente de mi desde el incidente que sucedió en mi departamento. Se que era importante para rivers que todos estuviéramos ahí, aún que no podía soportar estar entre tanta gente podía hacer un esfuerzo para hacerle saber a rivers que estoy bien.
No quiero hacerla sentir mal cuando ella estaba muy ilusionada de que yo también estuviese el día de hoy aquí.
Ni aún que bella estuviese en el mismo lugar que yo, y que nos hayamos ignorando desde que llegamos a la fiesta privada organizada por ibai. Admito que me dolía verla hablar con otros chicos y reírse como si fuese la cosa más divertida lo que aquella gente les contaba.
¡Yo podría hacerla feliz con tan solo una palabra!
¿Por qué no puedo ser yo esa persona que la haga feliz?
Sinceramente no sabía por qué estábamos así, no entendía que es lo que habíamos echo mal. Todo iba tan bien, ¿no es así?
O solo soy muy ciego para no notar lo evidente. O imaginar lo inimaginable.
Lo único que tengo ahora es a filis a un lado mío bailando de un lado a otro mientras habla animadamente con diego. Suspiro tomando de mi vaso resignado al no sentir que me estaba divirtiendo lo suficiente como ellos.
Era mi culpa, tal vez debería de tomar más alcohol.
— Saben si tienen más de esta cosa? — Pregunté en voz alta ya que la música muy apenas me dejaba hablar.
Diego señaló la cocina. — Allá tienen de todo wey, ve sírvete lo que quieras!
Sonreí en forma de agradecimiento y sin dudar me abrí paso entre la gente, no sabía cómo es que en este pequeño departamento había tanta gente metida. No podía evitar hacer una cara de disgusto al sentir como los cuerpos chocaban con mi hombro y notaba el sudor en ellos.
Cuando me adentre a la cocina maldecí por lo bajo al ver como parejitas se besaban en los rincones, lo que más me sorprendió fue ver a uno de mis amigos ahí.
Osvaldo.
— A la madre..— Me mordí el labio al retener una risilla traviesa en cuando lo note.
Este al verme de reojo finjio tomar de su bebida y hablar con la chica que tenía encarcelada a un lado de la barra, trate de evitarlo para no incomodar su "cita", pero por dentro me estaba que me moría de risa.
Divise la hilera de botellas de tequila y vodka, después estaba una bebida roja que al olerla supuse que era ponche.
— Que sea lo que diosito quiera..— Solté por lo bajo al rellenarme el vaso.
ESTÁS LEYENDO
Doble vida | Roier
FanficLas reglas de la amistad siempre fueron tentadoras para Sebastián y bella. « Así que decidieron romperlas para saber lo que era correr un riesgo peligroso.» 〼 A Roier fanfic: Part one [Finalizada] 〼 female oc...