Cap 5

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La noche fue mucho peor de lo que podría haber sido cualquier noche, en lugar de dormir estuve en vela poniendo cubetas por toda la casa para que no se mojaran los muebles. 

Este sitio cada día estaba más destruido.

Ni mencionar el frío que padecí, no pude prender la chimenea porque los cartones y maderas que tenía en el patio con el fin de ser usados como "leña" estaban empapados, lo que significó que tampoco pudiera hacerme un té o comer algo.

Entonces, esta mañana no me quedo otra que pedirle a la vecina, la Sra. Alysaya que por favor me permitiese calentar agua para bañarme, al menos necesitaba eso, sacarme el frío que se había instalado en mi cuerpo. 

Le conté que papá estaba internado y ella se ofreció a ayudarme con lo que pudiese, estaba agradecida, toda ayuda era bienvenida en este momento.

Ahora solo le pedí que mientras me mantuviera ausente controlará que nadie robe mi casa, cuando vean que en gran parte del día no había movimiento de gente se prestará a pensar que es una casa abandonada. 

No tenía idea cuánto tiempo estaría mi padre internado. La hipoxemia era el terror de los asmáticos, ni siquiera quería imaginar cómo se encontrará su cerebro cuando despierte.

Me bañé a la velocidad de un rayo y preparé una mochila para ir al hospital, hoy iría en mi bicicleta, los diez kilómetros de distancia no serían significativos porque no los caminaba y sabía cómo tomar atajos.

Cuando llegué al hospital me dirigí inmediatamente a la recepción para pedir novedades sobre mi padre, las enfermeras amablemente me guiaron hasta la sala donde estaba en terapia.

Gracias al Dr. Jeon estaba en una habitación privads, debido a la gravedad del cuadro, no se me permitía entrar ya que no había trajes especiales para prevenir al paciente de que le contagié alguna enfermedad del exterior.

Las enfermeras me dijeron que seguía en el coma inducido y que ante cualquier cambio me avisarían, que no era necesario pasar todo el día allí; por nada del mundo me iría, siempre que tuviera un momento libre estaría aquí esperando que papá despierte.

***

Y de repente me encontré que los días habían pasado como el agua bajo el puente, viernes otra vez y una semana desde que papá estaba en coma.

Durante la última semana mantuve una rutina, cada mañana temprano salía para ir al colegio, cada mediodía salía de clases para venir al hospital y aquí, dónde ahora me encontraba sentada en el área de descanso de la terapia intensiva esperando cualquier novedad hasta que llegue la noche e ir de regreso a mi hogar a prender la chimenea, comer algo, descansar y volver repetir lo mismo al día siguiente.

Solo los sábados y domingos que no tenía clases me levantaba temprano para salir a buscar los reciblables que servían como leña para la chimenea, acarreando lo que encontraba hacia el patio de casa.

El invierno había llegado mientras tanto y cada día se notaba más, según la gente del barrio iba a ser la peor temporada de las últimas décadas, en la radio oía un sinfín de supuestos especialistas que hablaban del niño, la niña y los efectos del calentamiento global, y todos coincidían que se avecinaba una ola polar en asia. 

Está semana era la última de exámenes para el cierre del trimestre, solo debía rendir matemáticas y física, en todas las demás materias las tenía aprobadas y estaba segura que estás dos también ya que había estudiado sin parar. Es increíble que en seis meses estaría graduada.

Con Minnie estábamos alejadas, lo asociaba con la maratón de estudios, cada una en lo suyo y no nos daba tiempo ni charlar en los recreos, de hecho ni siquiera le había contado sobre papá porque tampoco habíamos estado chateando.

ERES MI DESEO   (LISKOOK//LIZKOOK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora