Capítulo Veintitrés: Pobre ángel.

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ONU estaba en su habitación observando la ventana.

Tenia miedo de lo que pasaría y no había parado de llorar en silencio.

Temía que FBI lo observara.

Cada que sentía que lágrimas caían de sus ojos, rápidamente las limpiaba.

Intentaba calmarse, pero estaba demasiado aterrado.

Lo solicitaban con urgencia en su oficina. Tenía bastantes documentos que revisar.
Ya no podía quedarse más tiempo ahí ¿y qué pensaba? Subestimó la inteligencia de España.
Supuso que estaría desesperado por querer atacar ya mismo, así como en su momento lo estuvo para amenazarlo si no lo dejaba salir.

En su lugar, parecía ser que España esperaba el mínimo descuido para atacar.

Era inútil y estúpido esperar sabiendo que no haría nada por la seguridad que los rodeaba.

No sabía qué hacer, o como dirigir la situación.

Estaba en un pésimo estado, que ya comenzaba a dudar sobre por qué era él la organización de paz si no podía con esto.

Recibía mucha presión por parte de si mismo, no quería defraudar a nadie y que nadie salga lastimado.

Ese era el motivo de su llanto.

—. Amor, México y yo hicimos un postre, ven, vamos a comer! —. Dijo el FBI ingresando a la habitación.

—. Oh! Enserio? —. Preguntó con una sonrisa —. Quiero probar eso!!

Lo tomó de la mano y ambos bajaron a la cocina.

Esta olía muy bien, al parecer habían hecho panecillos.

Al comerlos, ONU se sintió en el paraíso. Tenían un sabor tan dulce y suave.

No pudo agradecer verbalmente por aquella maravilla que disfrutaba.

—. Jajaja te gustó? —. Preguntó su esposo acariciando su cabello —. Cuando regresemos a casa después de todo esto te los prepararé.

ONU asintió viéndolo con tanta ternura.

—. Como se conocieron? —. Preguntó Zephyr —. Y cuando se casaron? Son muy lindos juntos!

—. Eso fue hace mucho tiempo. Lo conocí por asuntos de trabajo, pequeño —. Respondió FBI —. Cuando lo vi, me sorprendió mucho que la organización mundial de la que tanto me habían hablado sea un ángel tan hermoso.

—. Awww~

—. Después simplemente nos fuimos conociendo cada vez mejor. Admito que siempre intentaba que nuestros horarios de trabajo coincidieran, todo para verlo.

—. Empezamos a salir y a los pocos meses me propuso matrimonio. Dije que sí al instante —. Mencionó ONU observando a su esposo.

—. Es una historia muy común, y me alegra que no hayamos tenido inconvenientes en el camino.

—. No sabía que podías llegar a ser tan romántico, FBI —. Dijo USA desde el lavadero mientras lavaba todos los utensilios.

—. Romántico y fiel~

Todos comenzaron a reír ante aquel comentario.

Claro excepto USA y México.

—. Carajo, me lo meresco, sí —. Mencionó el norteamericano con una ligera sonrisa.

—. Mi papá está cambiando, okey? —. Reclamó Zephyr —. Él es bueno ahora >:c

—. Aww mi amor —. Mencionó USA dándole un pequeño besito en la cabeza —. Te adoro

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