𝐉𝐀𝐈𝐋 •*ᵎ Ggukmin

El veredicto final

Jeongguk tomó aire por quinta vez y empujó suave la puerta, mirando la cara pálida de Chanyeol y sorprendida de Jimin. No entendía que había sucedido, pero él había requerido de salir de la sala un momento, no podía quedarse ahí luego de haber visto como lo recriminaban de ser alguien incompetente y un delincuente.

Jeongguk sabía que tenía un antecedente manchado, que la mayoría veía sus papeles y preferían no contratarlo, que se giraban o iban al otro lado de la calle con tal de no pasar por su lado. Pero él había hecho lo que había podido con lo poco y nada que tenía, y jamás se iba a avergonzar de haber hecho lo que hizo.

Alcanzó a ver un par de fotos de un tipo con la cara magullada, y miró confundido a todos lados hasta que cayó en cuenta que esos golpes habían sido un acto de Chanyeol.

Maldito hijo de puta.

Pensó.

Y de solo pensar que alguna vez ese hombre pudo haber hecho lo mismo con Jimin le hizo respirar fuerte, abriendo sus fosas nasales para intentar tranquilizarse ante la intrusiva idea que había alterado su cuerpo. Aunque sabía que eso no había ocurrido, Jimin se lo hubiese contado, pero si aquello realmente hubiese sido un tema, Jeongguk para estos momentos estaría compartiendo celda nuevamente con Kim y Chanyeol... Bueno, tendría un lindo ataúd.

—Park Chanyeol es un hombre que juega sucio, avaricioso, mezquino. Él jamás será apto para el cuidado del menor Park Dakho, incluyendo a su fiel compañero, quien ha contribuido a su favor teniendo parentesco con mi cliente. —Taehyung le dio un rápido vistazo a la mujer que para estos momentos parecía estar cerca de sufrir un ataque de nervios. — Madre de Jimin, Haneul, mujer de negocios que no se dedica a eso, pero que sabe llevarlos muy bien... Su señoría, tengo evidencia de que ella ha estado causando violencia hacia Jeon Jeongguk durante los últimos cinco años, no solo ejerciéndola indirectamente, sino manteniendo contratos con carteles ilegales.

—Entrégueme la evidencia, Kim.

Taehyung lo hizo, girándose para mirar a Jeongguk antes de sonreír ladino.

—Hye Haneul es una mujer corrupta, contrató a Kim Han para encargarse de violentar a Jeon Jeongguk durante sus días de prisión, atormentándole para que no volviese a acercarse a Dakho. Además, amenazó al mismo para que dejara a Jimin o, y cito, ella misma se encargaría de deshacerse de ellos... Le he entregado además unas conversaciones donde se puede confirmar que ella estaba muy consciente y emocionada de violentar a un niño de diecinueve años. Jurado, —Taehyung se dirigió específicamente a la decena de personas que los miraban. — todos hemos estado aquí discutiendo qué es lo mejor para un menor, pero creo que el único que puedo realmente contribuir a eso, es él mismo. Por favor, permítanme adentrar al menor Park Dakho para una breve declaración. —el juez y jurado asintieron y el oficial parado en la puerta salió. — Ah, y tomaremos medidas legales en contra de Hye Haneul con respecto a la evidencia adjuntada. Sin más que decir, con permiso.

Haneul se alzó, cerrando por primera vez su boca luego de haber sido expuesta de tal manera, e intentó negar todo lo que Taehyung había dicho de ella, pero el juez la silenció de inmediato, sus ojos fijos en los papeles que leía.

Taehyung la miró con suficiencia y volvió a su asiento, girándose cuando la puerta se abrió. Jeongguk copió la acción y se giró para mirar a Dakho entrar de la mano con Seokjin. Él no había estado muy de acuerdo en que se incluyera a Dakho en todo el lío, pero sabía que la opinión de él era sumamente importante para el caso, y más aún, para que el jurado viese con quién Dakho realmente se sentía cómodo. Aunque para este momento las cosas estaban bastantes claras, por un lado había un hombre al que condenaron de inestable emocional y psicológicamente junto a un criminal agresivo y peligroso, y por el otro, una corrupta con contratos ilegales de sicarios o carteles criminales junto a un maltratador que golpeaba a su pareja.