Capítulo 7

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Narrador Noah

—¿Quieres dejar de reírte pedazo de esquizofrénico? Además, no entiendo porqué te ríes, ¿acaso no te enteraste de que nos acaba de mentir para no estar con nosotros?

Las palabras de Kenan no podían afectarme menos, incluso hacían que me riera más fuerte. Es tan cómico el como se monta todo un espectáculo y que segundos después nos enteremos que es mentira... solo de pensarlo hace que me duela el estómago de la risa.

—Pues menuda imbécil, si no quería quedar con nosotros solo tendría que haberlo dicho —Comentó Jesús, verdaderamente molesto.

—Ya, tampoco era como para llamar a alguien para que la rescatara —Prosiguió Amanda.

—MEJOR que no vengan, ¿habéis visto como se viste? Seguramente estaríamos todo el rato en tiendas super pijas y viendo vestiditos y falditas, eso es super aburrido, sería mejor si vamos solo nosotros y vemos tiendas más masculinas —Esa última frase la hizo mirando un poco a Charlotte y Amanda, aunque no muy exagerado, pero yo me di cuenta. ¿No quieres que vengan? Literalmente la idea fue de Charlotte.

—Me parece raro que Avery se comportara así... suele ser bastante sincera —La defendió su amiga.

—¿No estáis exagerando un poco? —Intervine— La chica es nueva, la hemos metido en una mesa con amigos de toda la vida y ella no nos conocía de nada. ¿Acaso no os habéis fijado en como le costaba sentarse? Debe de estar aterrorizada. Dejémosla adaptarse, cuando nos vayamos conociendo mejor ya tendremos más confianza.

—¿En serio quieres seguir siendo amigo de alguien que te acaba de mentir en toda la cara?

—No considero que haya mentido, si no... que se estaba salvando el culo.

Todos se miraron entre sí, dudosos, pero luego asintieron. Sonreí victorioso, soy la mejor persona convenciendo a la gente. Debería hacerme político, si sobrevivo para ello.

—De verdad tío, ¿Cómo es que siempre miras el lado bueno de las personas y las defiendes? Eres jodidamente amable, ¿acaso nunca te enfadas con nadie? —Kenan puso su brazo alrededor de mi hombro y me juntó más a él.

—¿Para que enfadarme y pelearme con nadie pudiendo llevarme bien?

—Das mucho asco de lo amable que eres tío —Varios se rieron.

—Pero entonces ¿vamos a ir o no? Porque yo tengo que avisar en casa —Preguntó Charlotte.

—Ir si queréis, yo no puedo. Me queda lejos de casa y hoy no tengo quien me lleve —Dije alejándome de Kenan.

—Pues vamos al que está cerca de tu casa, ¡no te puedes quedar tu solo! —Bea se puso a mi lado, envolviendo mi brazo con los suyos. Me incomoda un poco que haga eso de la nada, pero simplemente me callo.

—Te podemos llevar alguno de nosotros si quieres.

—¡Claro! Le puedo pedir el coche a mis padres, así llevo a varios. ¡Vamos tío! Seguro que tu plan era quedarte estudiando —El mismo gesto que hizo Kenan antes lo hizo Reggie, obligando a Bea a apartarse. Agradecí eso.

—Pues de hecho sí.

—¡Y es nuestro primer día oficial! Ni de coña. Confirmado, te vienes con nosotros.

Todos me miraron suplicante, insistiendo compulsivamente. Como no tuve que acabar aceptando, y la alegría que vino después me puso muy feliz. En serio, si puedo disfrutar de momentos como estos con personas a las que quiero, ¿para que me molestaré en enfadarme con alguien por esa tontería? Y más Avery, que después de lo que la molesta voy a tener yo derecho en enfadarme. 

El muerto, el British y el gayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora