Jimin y Jungkook, ambos de 16 años se verán enfrentados al odio y los celos de un psicópata que desea a Jungkook.
Dos familias ligadas de distintas formas a la mafia. Los Brambilla Kimjeon una familia ítalo-coreana, poderosos, manejan los hilos del...
-Al fin llegas Joo, ¿traes loque te pedí? - el chico afirmo note su rostro golpeado y su mano vendada, - ¿Qué te sucedió?, ¿por qué vienes tan maltraído?, ¿Supongo que quien te golpeo era alguien mayor?,- el chico agacho su cabeza- Bien dime, dime quién fue y te daré apoyo para una buena venganza, como agradecimiento por esto, - señale el sobre que me entregaba-
-Gracias señor, no sabe cuánto necesito esta venganza, - dijo el chico tomando mis manos, me solté rápido.
-Lo que digas, solo dame el nombre niño, -
-Bueno uno es Jimin, el chico que está saliendo con su ángel, el que aparece en las fotos, el otro él es... en realidad no sé quién es, señor, solo me dijo que la familia Brambilla Kimjeon enviaba saludos- Sentí como la quijada se me caía, el chico también lo noto.
-¿Dijiste Brambilla?,- el chico asintió, pensé que el pecho s eme cerraba- ¿dijo algo más?, ¿te dijo algo de mí?,- zamarreé al chico, con furia. -
-No, no, señor, no me dijo nada de usted, más bien fui yo, quien lo amenazo diéndole que esta era su zona, señor- entre en ira con un tanto de pánico, golpe al chico con una bofetada
-¡LE DIJISTE MI NOMBRE, MALDITO IDIOTA!, ¡CÓMO PUDISTE SER TAN ESTUPIDAMENTE IDIOTA! - volví a dar golpes al estúpido de Joo.
-¡SEÑOR, SEÑOR POR FAVOR PARE! - me gritaba Joo en medio de los golpes, lo tome una y otra vez golpeándolo donde cayeran mis puños- ¡SEÑOR YO NO DIJE SU NOMBRE...- lo deje hablar- solo le dije que el pederasta tenía el control de la zona- este chico era realmente un idiota era cosa de sacar cuentas para que los Brambilla sumaran 2+2 y llegaran a mí.
-¡Eres un maldito idiota Joo, ¿no te das cuenta, realmente no sabes quién es esa familia?!, ¿realmente eres tan estúpido? niño, Sabes quine son ellos dentro de los Kkangpae,- el chico negó con pánico en sus ojos, eso me gusta de él... el pánico.
Tome el rostro del chico que, le di un beso, sabía que eso le gustaba, - Estoy molesto contigo Joo por eso te golpee, te lo merecías, abriste la poca más de la cuenta, me estresas pequeño, no sabes cuanto me hiciste enojar.
-Señor, por favor perdóneme, yo... yo... yo puedo hacer que se relaje, usted lo sabe, déjeme hacer que se relaje, señor, yo, yo puedo solo permítame...- suplicaba el chico arrastrándose hacia mí por el piso, camine hacia mi sillón, el llego a mí empezó a masajear mi erecta entrepierna, mientras suplicaba por mi aprobación, - Señor solo permítame mostrarle cuan arrepentido estoy, so...solo déjeme ayudar con su estrés para que pueda perdonarme.
Aprobé entonces desabroche mi pantalón, saque lentamente mi miembro ya duro, tome el fuertemente el rostro de Joo, ordenándole abrir la boca, el simplemente lo hizo, introduje mi miembro de un solo empujón su boca se sentía tan bien, como siempre, Joo ya no era de mis favoritos, pero era bueno en las mamadas, empuja su cabeza para sentir que llegaba más profundo, adoraba las arcadas que le causaba a Joo, el simplemente seguía mamando sin objeción, una y otra vez arriba y abajo, su boca estrecha alrededor de mi glande eran buenas, estaba en el éxtasis, explote en su boca, exprimí todo, fue bueno el momento, pero este chico ya no me satisfacía de la misma forma, necesitaba algo nuevo mientras mi ángel caía a mis pies.
Joo se limpió, seguía pidiéndome perdón, mientras lo escuchaba saque la foto del sobre que me había dado, el chico, el chico en la foto me parecía conocido, lo conocía de antes, escuchaba la vos de Joo a lo lejos, hablándome, lo interrumpí pidiendo el nombre del chico en la foto, J- Kim Jimin, dijo Joo, ese nombre, ese apellido yo lo conozco, entonces recordé, fui hacia mi gaveta mientras Joo retorcía sus manos preguntándome como podía compensar su estupidez...
Busque entre los papeles, y ahí estaba la deuda que recordaba del viejo J- Kim Suk, una deuda, que debía ser cobrada, fije mi mirada en las fotos, de los niños con los que cubriría la deuda y los que nunca pudieron encontrar mis hombres, realmente unos niños hermosos, como recordaba el hermoso rubio de labios pomposos, era uno de los pagos adeudados. vi las fotos las compare, era el mismo chico, no podía creerlo, eso me estaba divirtiendo, obtendría mi pago y me desharía de quien acosaba a mi precioso ángel, entonces vi la segunda foto, esa foto ya no me hizo gracia, tan cercanos, tan juntos, ese niño no solo debía ser mi pago debía destruirlo, él tenía la mirada de mi ángel, una mirada que nunca le había visto.
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-Joo, ¿quieres compensarme?, pues bien debes traerme a este maldito J-Kim Jimin, lo quiero ante mí lo antes posible, si no me lo traes prometo que te matare, lentamente, - Tome mi chaqueta y salí decidido a buscar a Jungkook y traerlo de vuelta no volvería a salir de la casa hogar.
Al cruzar la plaza me encontré con la imagen más dolorosa que podía existir para mí, ahora sí tenía la razón suficientemente poderosa para acabar con el chico rubio, por pervertir a mi pobre ángel, el estúpido niño me devolvería todos y cada uno de los besos que me pertenecían y que él había osado robarme.
