El lunes y la rutina escolar llegan, ellas no se hablan y apenas se miran en la escuela. Dos extrañas y siempre bajo la mirada de Stinky atento a cada uno de sus movimientos. El receso escolar está a solo una semana más, y ya serán libres de él y de la escuela.
Afortunadamente el ansiado día de vacaciones llega y al fin pueden respirar.
—Adios apestosin —dice Susan sonriendo saludando a un confundido Stinky al otro lado del patio— ojalá te bañes más seguido. Viejo asqueroso.
—¿Viste a Eleanor?
—Se acerca Eduard a la rubia.
—Sabes bien que Rigby y yo ya no nos hablamos.
—¿Harás algo estas vacaciones?
—Eduard ¿Somos amigos? —el niega— ¿Soy una persona que se abra con cualquiera? —vuelve a negar— ¿Y entonces porqué te comportas tan cercano conmigo?
—Susan se marcha— La invitaré a salir Susan, le pediré que sea mi novia este verano. Digo después de todo ella está soltera y yo también.
—Ella voltea con una sonrisa burlona— ¿No te parece que el pre requisito es gustarle al menos?
—Dices que no basta con que sea hombre —Susan abre los ojos grande— y soltero, aparte cambie mucho desde las últimas vacaciones, creo que puedo tener una oportunidad.
Una sospecha se siembra en Susan ¿Qué sabe Eduard? Ellas supusieron que fue Stinky quién las vió, pero ¿Sino fue él?
Eduard había cambiado y eso era cierto, no es el mismo que cuándo comenzó el año, sus gruesos lentes han sido reemplazados por lentillas de contacto, la nueva innovación de la época, su cuerpo flacucho había dado un cambio cuando empezó natación y ha cortado su cabello al estilo de la época, ahora se junta con los populares a los que les hacía la tarea y desde que golpeo a Theo Neuman, el bully de la escuela, ya nadie se mete con él.
—¿Y porqué me lo dices a mí?
—Se encoje de hombros— Solo lo comento Susan, no es necesario que te tenses o te pongas a la defensiva. Mira ahí viene Leny —le golpea a la rubia con el brazo— se ve hermosa ¿No crees? Me encanta como le queda esa faldita roja y el cabello tomado en una coleta alta. Es buen material para ser esposa y madre. Deseame suerte Susi.
La rubia no pudo hacer más que mirarlo con furia. Él se acerca a Leny y colocando un brazo sobre su hombro que ella saca, caminan juntos, la castaña mira a la rubia que la sigue con la mirada enojada. Quería reventar a Eduard, quería gritarle que ella era su novia y que jamás en su puñetera vida tendría una oportunidad con ella, quería pero no hizo nada.
Esa noche Leny trepa a la ventana de Susan quién la abre y en cuánto la castaña tuvo un pie adentro, la besa y la abraza fuerte. Esa noche la toma en su cama, intentando fundirse con ella, intentando que en ese acto sublime de amor, dónde se entregan en cuerpo y alma, pueda transmitirle, logre hacerle sentir que la ama verdaderamente, y que cada una se pertenece a la otra. Claro que tomaron la precaución de bajar el colchón al suelo, la cama las hubiera delatado.
—Susan ya estoy agotada, paremos ¿Qué pasa?
—El imbécil de Eduard pasa. Dijo que quería ser tu novio, y sospecho que sabe algo más. Supusimos que fue Stinky quién nos vió, pero no lo sabemos con exactitud y tampoco estamos seguras de que él haya tomado la carta.
—¿Dices que ellos saben?
—Leny si tienes que estar con alguien, si estás con alguien más, cualquiera menos Eduard.
—¿De qué hablas Susan? No quiero estar con alguien más. Tenemos estás vacaciones para pasarlas bien y juntas, no nos preocupemos por separarnos, nos queda el año que viene. Plan A ¿Recuerdas? Fue tu idea.
—¿Haremos el plan A?
—Es la mejor opción para seguir juntas.
Las vacaciones se la pasaron yendo en bicicleta al lago, al cine y a citas como la pareja que son. Son las mejores vacaciones de sus vidas. Con el regalo de la abuela de Susan por su cumpleaños, una Polaroid, se sacaron muchas fotos juntas, muchas de esas fotos dobles y no todas las fotos las podía ver cualquiera, en muchas salían juntas, pero en otras besándose y esas solo se las quedaron ellas.
Pasean por el centro comercial, han comprado pulseras igual, ya que los anillos serían demasiado evidentes. Van tomadas del brazo, en vez de las manos. Tienen una cita tomando un batido y conversando, cuando alguien se sienta al lado de Leny y las risas se cortan.
—Miren si es un pañuelo el mundo y esta ciudad es chica. Hola ¿Ya son amigas de nuevo?
—¿Qué quieres Eduard?
—Que hubieran seguido las reglas —suspira e intenta tomar la mano de la castaña que ella saca— me pareció muy lindo tu sueño Leny, claro que si en el panorama hubiera entrado yo y no ella, la que se supone es tu mejor amiga... bueno amigas, amigas no son ¿Novias? Sí, novias. Dos mujeres, aberrante.
—¿Qué quieres? —le pregunta Leny.
—Quizas —mira la hora en su reloj de pulsera— deberían irse a casa, ya tienen que saber sus familias —intenta colocar un mechón de cabello detrás de la oreja de Leny. Susan lo aparta sacándolo de su lado y lo tira al suelo estirándole la mano a Leny— Leny te hubiera ido mejor conmigo. Mi tío ya debe haberles dicho a sus padres. Deberían haber hecho caso chicas.
—Muerete Eduard —sentencia la rubia.
Ambas corren a sus bicis y pedalean lo más rápido que pueden a sus hogares, detrás de cada puerta hay un infierno diferente. No tuvieron tiempo de despedirse.
Susan entra y sus padres tienen la caja dónde guardaba cada nota y cada carta de Eleanor, ambos la miran furiosos, su padre arremete contra ella y la abofetea dejando su rostro marcado, la toma del brazo empujándola adentro y la tira prácticamente sobre uno de los sillones.
Leny entra y su casa está en silencio, algo inusual, su respiración es agitada y no por haber pedaleado a todo lo que daba, sino por el temor, su corazón late desesperado en su pecho. Sus padres están esperándola sentados en el comedor, tienen la pila de cartas que ellas se han mandado y su madre llora en silencio.
Ambas se sienten invadidas, vulnerables, desprotegidas. Ambas sienten que este es el fin.
Ahora están frente a sus padres y ninguna puede respirar con normalidad ¿Fue tonto ingenuo de su parte pensar que podrían permanecer juntas? ¿Fue el deseo de amarse, de no poder permanecer separadas, demasiado ambicioso? ¿Cuánto tiempo más hubieran podido guardar el secreto de su amor? Ahora toca pagar el precio de amarse, ahora es cuándo la verdadera prueba comienza ¿Qué tan lejos están dispuestas a llegar por permanecer juntas?
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Mas que amigas.
Romance¿Cuánto tiempo más se puede guardar un secreto familiar? Los secretos tienen un precio, ellas ya pagaron por el suyo hace tiempo y muchas y muchos antes que ellas ¿Cuánto tiempo más está dispuesta la familia a guardarlos a esconderlos? Ellas, la nu...