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Se cambia el pantalón, se coloca medias y zapatillas limpias, Susan no dice nada, cuando Leny se enoja es mejor tomar distancia.

Louisa grita enojada al ver que su puerta no tiene cerradura, se saca la ropa mojada tirándola contra la pared en el pasillo y sale con su cabello aún chorreando agua. Toma un bolso y le mete un montón de ropa, sale echa una furia e intenta abrir la puerta de la cocina, pero está con llave, los tres que están ahí ven su accionar, ella se rinde y se deja caer en una silla apartándose de sus madres.

—Esto es la última gota que rebalso el vaso Louisa. Caer al día siguiente, en madrugada, borracha y en el estado deplorable que estás ¡Solo tienes 16 años!

—¡¿Y qué?! Es mi vida y con mi vida hago lo que yo quiera.

—Mientras vivas bajo mi techo, vas a respetar mis reglas —Leny se pone firme, ambas de ojos verdes se miran fijo— de ahora en más tu toque de queda es a las 12 pm y estoy siendo buena. Tienes 3 Strike, los agotas y te llevaré, y pasaré a buscar a la escuela para venir directo a casa.

—¿Si sabés que no entro a clases verdad? Tú no me mandas Eleanor, no tienes autoridad para decirme lo que está bien o mal. Te acuestas con una mujer, en pareja además con otro.

—Sigo siendo tu madre —Leny se levanta de golpe tirando la silla— sigues siendo menor y sigue siendo mi casa.

—¿Sabés que desearía?

Ahora es Susan quién interviene, sabe que la chica con tal de hacerle daño a su madre, le diría cualquier cosa, inclusive que desearía que ella estuviera muerta en vez de su padre y ella no va a permitir que le haga daño de esa manera. Tanner deja el vaso de agua y se coloca atrás de Leny, instintivamente para protegerla.

—¡ALTO AHÍ LOUISA! —le advierte la rubia— ten mucho cuidado con lo que vas a decir —la joven había aprendido a quererla, y congeniaba mejor que con su madre, a ella si le tiene algo de respeto— no te voy a permitir que digas algo sabiendo que puedes herirla.

—¿Algo cómo que desearía que mi padre estuviera vivo para irme con él? —cambia la mala intención de su pregunta.

—Pero no lo está —esta vez es Tanner quién habla— están ellas dos, que siempre han estado para nosotros, que nos han dado todo y tú te comportas como una cría mal criada que haciendo berrinche quiere llamar la atención.

—Siempre tan correcto y devoto a mamá Leny —ella también llama a Susan mamá en la intimidad del hogar— siempre tan lame culo y mamero.

—Y tú siempre tan idiota y caprichosa niña de papi —se coloca frente a su madre— papi muerto, claro está.

Ella lo empuja, y él le devuelve el empujón. Entonces ambos se enfrascan en una pelea cuerpo a cuerpo, pegándose. Las mujeres como pueden los separan, entre gritos.

—¡¿Que les pasa?! ¡son hermanos por Dios santo! —Dice la castaña llorando.

—Exacto soy tu hermana ¡Idiota! Y aún así la elijes a ella.

—¡Las elegiré mil veces! Es mejor que elegir a un muerto, alcohólico y ladrón. Sigues llorando el fantasma de una de las peores personas que han pisado la tierra.

—¡Era nuestro papá!

—Y menos mal que ya no está.

—¡Tanner ya basta a tu habitación! —le grita Leny— y tú también.

—Yo me voy —le da una patada a la ventana y saca su bolso.

—¡Es lo mejor que vas a hacer estúpida! A ver si así podríamos vivir finalmente en paz.

—¡Tanner! —ahora es Susan quién le grita.

—Tranquilas mamás que no volveré a molestarlas —se escabulle rápido por la ventana rota, toma su bolso y corre.

El día empezó mal, Susan toma las llaves del auto y sale a buscar a su hija, da varias vueltas por todos lados y vuelve a las tres horas, con su cara agotada. Abraza a Leny que está hablando con su hermano Marlon, quién se asegura de ayudarles a encontrar a su sobrina.


1993

Va a ser casi un año de que Louisa huyó de casa. Tocan la puerta de la casa en madrugada, y un auto sale rechinando las ruedas, lo que menos esperaban está ahora frente a la puerta. Susan se agacha y lo toma temblando.

Felicitaciones abuelas ella es Colette, tiene 3 meses y es su nieta. Yo ya no puedo cuidar de ella, un niño tiene que tener un hogar y yo no puedo darle eso.
Mamá Leny espero que con ella hagas las cosas mejor, que tengas una mejor relación que conmigo y que te lleves bien. No sé cuando volveré o si lo haré, estoy bien mamás, solo dejen de buscarme, estoy bien.

No puede ser —dice Leny pálida, destapa a la niña envuelta en trapos solo con un pañal puesto— es nuestra nieta.

Susan se la pasa y lee la carta que Louisa dejó, Tanner se despierta al escuchar el llanto de un bebé y las ve en la cocina, con la niña en brazos.

—¿Quién es?

—Tu sobrina al parecer, se llama Colette —dice Susan— debe tener hambre, no dejó una mamadera ni nada. Ya vengo

Toma un a abrigo, y salen a la farmacia más cercana con Tanner, bajan con un montón de bolsas. Trae pañales, leche, chupete y ropa, para sacarla de los andrajos en los que venía, también compró jabón y shampoo de bebé y cuánto vieron pensando que necesitaban. Llegan con las bolsas, Eleanor desinfecta y lava bien la mamadera antes de prepararle la leche. Una vez llena la niña se duerme en los brazos de la rubia.

—Hablé con Marlon y Gabe, van a tratar de encontrarla, pero no tengo mucha fé. Vamos a dormir mañana tienes escuela —le dice a Tanner besándolo en la cabeza— avisaré a la facultad que no podré ir a dar clases mañana y...

—Amor yo puedo quedarme con ella. Ahora vamos a tener que acomodarnos a la rutina con Colette, cuanto antes empecemos mejor.

Suspira besandola y besando la cabeza de su nieta, una vez cambiada, con ropa limpia, más pañal limpio y la pancita llena, se acuestan con ella, casi no duermen por estar atentas a no aplastarla, entonces se turnean. Eleanor se pregunta cuántas cosas más no sabe de su hija desde que se fue, ¿qué más esconde? ¿Dónde y cómo estará viviendo para haber dejado a la bebé en esas condiciones?

Colette es muy risueña, y sonriente, sus enormes ojos azules resaltan en sus cachetes regordetes y rosados. Su cabello castaño, suave y lacio largo, deja que puedan ponerle coleros, definitivamente esa ternurita de bebé es todo un sueño. Tanner está encantado con su sobrina, a veces se la lleva a dormir con él, la hace dormir, le cambia el pañal y la tiene a risas todo el día haciéndole caras, es el mejor tío del mundo. Para su cumpleaños 16, sale con su sobrina en brazos y sus amigos en la foto.

Colette ya tiene 3 años, nació el 03/04/1993. Hace cuatro años que no ven a Louisa, ella ahora debe tener unos 21 casi 22 años, mientras que Tanner entró a la universidad para ser profesor de educación física, Louisa anda Dios sabe dónde.

1996

Leny está sola en casa con Colette durmiendo en la cuna de su habitación, el teléfono suena mientras ella se prepara para ir a acostarse, mañana tiene examen y esperaba la llamada de Susan que está grabando una película del agente 007 en Latinoamérica.

—Hola amor.

—¿Señora Eleanor Rigby?

—Sí, soy yo.

Deja caer el teléfono al suelo y corre para tomar a Colette y salir rápido de casa. Cambia a la niña, y la abriga lo más rápido posible. El teléfono quedó descolgado en el suelo, sube al auto lo arranca y sale rápido pero con precaución lleva a su nieta con ella.

Llega al hospital con la niña dormida en brazos se enuncia en mesa de entrada y la hacen pasar a la habitación. Al entrar la ve irreconocible, esta no puede ser ella.

Mas que amigas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora