Mas que amigas.

31

1977

Susan recibió la última carta, la abrió temblando y la terminó de leer llorando. Su hermano quiso ir a buscar a Leny, Susan había perdido a su hermano mayor, a sus amigos y al amor de vida en el mismo año.

Ambas siguieron con sus vidas.

Susan desde la película se hizo más conocida, ganó un premio como actriz revelación y desde ahí, su carrera despegó, todos querían a la rubia de ojos azules para sus películas, todos querían a la nueva estrella. La energía de Susan y su sonrisa son magnéticas y con tan solo 23 años ha logrado alcanzar una fama digna de las mejores estrellas, pero no le vamos a quitar el mérito ella es una excelente actriz.

Scot se volvió su representante, es en quién más confía, el único en quién confía. Su padre no estaba muy de acuerdo con su carrera, pero ella no le dejó muchas opciones, era mayor de edad y podía hacer lo que le diera la gana, que de hecho lo hizo. Ya una vez permitió que ellos se metieran en su vida y eso le costó su novia.

—Te llaman en el set, ya te toca grabar la siguiente toma.

—Bien ya voy.

Termina de escribí y dobla carta guardandola en una caja con llave. Jamás pudo dejar de escribirle, aunque ya no van a ningún destino, ella no puede dejar de escribirle cartas a su primer y único amor.

—Susi —la toma del brazo— ¿no te parece que es hora de avanzar? Le sigues escribiendo a un fantasma.

—Scoty tú y yo somos iguales —le aprieta las mejillas—, seguimos amando a fantasmas. Solo escribo para desahogarme, lo necesito. Ahora a grabar que esa toma no hará sola.

La rubia ahora de 23 años es como un vino, mientras más pasa el tiempo, mejor se pone, mientras trabajaba, estudiaba actuación y se perfeccionaba, no quiere que nadie dude de sus capacidades o su talento. Aunque su principal pasión es escribir y lleva trabajando en un libro hace un tiempo y aunque no duda de sus capacidades, está haciendo una carrera de literatura de la que pocos saben, y va a publicar su libro bajo un seudónimo, porque quiere ser tomada en serio como escritora y que su fama de actríz no eclipse su talento al escribir o que se impulse de eso.

—¿Cuándo saldrás conmigo?

—Mmm Warren por favor, trabajamos juntos. Ya sabés que no cago, dónde como.

—Te lo volveré a preguntar cuando terminemos de grabar la película.

Warren es un hombre de padre italiano, de madre norteamericana, un excelente actor  que no ha tenido casi relaciones, que no habla de su vida privada, las pocas exs hablan bien de él, es demasiado atractivo y aceptó el papel en la película por Susan.

—¿Cuándo le darás una oportunidad? —pregunta Scot a su lado.

—Que pesado eres.

—Vamos Susi, has tenido tus amoríos por ahí, pero ninguna relación desde hace 5 años, ya es tiempo. Aparte te dieron permiso ¿Crees que ella no siguió con su vida?

—No voy a casarme con él, ni con nadie. Sé como termina esto, seguro en algún momento te pedirá consejo, pero yo no voy a casarme ¿Quedó claro?

—Con esa fe, construye una iglesia.

—Sé lo que va a pasar.

1983

6 años son los que están en pareja luego de la película que fue taquillera, gracias a que sus protagonistas fueran pillados infragantis cenando y con un par de besos en un restaurante. Susan le da una oportunidad, y a ella misma de ser feliz.

—Warren fui clara cuándo empezamos la relación, no pienso casarme contigo, ni con nadie, el matrimonio no es para mí.

—Vamos a ser padres, tienes 29 años, lo tenemos todo Susan.

—Que pesado eres ¿Scoty no te lo dijo? No era buena idea proponermelo y menos delante de todos. Mira el tabloide —tira la revista con la primera plana en la mesa del rechazo de ella—. Primero, nosotros venimos mal en nuestra relación hace tiempo, segundo, casarnos no va a resolver el hecho de tu infidelidad, tercero, no me haces falta para criar a mi hijo.

—Eres una perra fría y desalmada.

—Bueno que linda manera de tratar a la madre de tu hijo —aplaude—. No gastaré energías en ti, ahí tienes un bolso con tu ropa, vete de mi casa.

Se toca el vientre con 4 meses de embarazo y se sienta a cenar. Abre la habitación de su hijo, con la cuna que hay que armar aún, lo único que tiene pegado en una de las paredes es el nombre del bebé.

Ese fin de semana va a una entrevista, dónde la entrevistadora es una de sus exs "parejas" en realidad una de las personas con las que compartió sabanas. Ella se mete en terreno personal, sabiendo que Susan es reacia a responder sobre esos temas.

—Bueno señorita Reinolds. La gente tiene intriga, sobre su primer amor, ya que a grabado una película romántica, quieren saber que tal es usted, como fue su experiencia con parejas en su vida.

Mira a la morocha frente a ella y sonríe, Jackie siempre se ha característizado por sus preguntas filosas y jugadas sucias. Pero  ella conoce a su enemiga y eso le da una ligera ventaja, para salir de esta situación.

—¿Qué quieren saber?

—Bueno ¿Quién fue tu primer amor? ¿Cómo era? Digo los primeros amores siempre nos marcan.

—Era una persona culta, inteligente, bastante perseverante, una persona romántica pero no cursi.

—Ríe— Parece que describes a una mujer.

—Bueno si te fijas en mi vientre, no creo que esto lo haya hecho una mujer. Digo después de todo Warren es mi pareja de años, se podría decir que sería raro llegar a los 30, soltera y sin hijos. Por cierto ¿Cuántos años tienes Jackie?

—33.

—¿Y tu esposo? ¿O tus hijos? Es que a veces lo olvido.

—No tengo.

—Uy bueno. Ya conseguirás al indicado cariño —le da una palmadita en la mano—. Hablando de la película, ahí podrán ver varias historias de amor, de primeros amores, de los que marcan, de los que se olvidan en una noche —mira a Jackie—. Los invito a todos a ir a ver la película, que se estrenará el próximo jueves. Ahora debo irme a ver a mi médico, tengo turno de control del bebé.

—La entrevista termina— Diste un golpe bajo —le susurra la morocha al oído.

—Tú también. No te vuelvas a meter conmigo. Yo sé el nombre de tu actual novia, y de tu ex ¿Qué tan afectada se vería tu carrera?

—Eres una perra.

—Es la segunda vez en la semana que me dicen eso. Sean un poco más creativos. Y para la próxima, limitate a hablar de mi trabajo. Gracias Jackie —se despide de ella con dos besos—, siempre es un placer hablar contigo.

Bueno ya se vienen partes un poco más felices deben entender que ni en los 80, ni en alguna otra época fue fácil vivir amando a alguien de tu mismo sexo, las chicas pasaron demasiadas cosas, pero jamás dejaron de amarse y Susan sobre todo, quien siempre amó un poquito más, está dispuesta a todo por Leny, ella va a darle y ayudarle a vivir una vida mejor, por supuesto que eso solo puede ser mejor a su lado.

Prepárense para lo que viene, no odien plenamente a un personaje, mantengan la empatía abierta. Excepto con Peter, ese si es un mierda con M mayúscula.