Si bien muchos problemas que afectan hoy en día a las personas tienen su base en una baja autoestima, el quererte a ti mismo no garantiza que vivas una vida libre de problemas. Tampoco garantiza que tus problemas se resolverán. Sin embargo, si tienes esta fuerza poderosa, podrás ver tus problemas desde otra perspectiva y los podrás afrontar mejor. Tener una alta autoestima te hará actuar sobre algún problema en vez de sólo lamentarte. Si no te quieres ni aceptas a ti mismo, corres el riesgo de estancarte en el problema sin ver ninguna solución posible.
Invertir en tu amor propio es invertir en tu felicidad y en la de los demás. Es bueno que sepas que el amor a uno mismo no es egoísmo ni es pensar sólo en ti mismo. Es amarte y, cuando se ama, se experimenta emociones positivas que se transmiten a los demás. Entonces, si te amas a ti mismo, podrás también amar a los demás.
En su famoso libro, Usted puede sanar su vida, Louise Hay decía que "las personas que se aman a sí mismas no abusan de sí mismas ni de los demás" (8); y en su otro libro, El poder está dentro de ti, refiere que "si nos amamos no nos hacemos daño ni se lo hacemos a los demás. Es la receta para la paz mundial" (9). Y esto es porque el amor siempre va unido a lo positivo y a la felicidad. Si tenemos mucho amor por nosotros mismos, nos será fácil tener amor por los demás. Si realmente tenemos amor dentro de nosotros, querremos hacer cosas buenas por nosotros y por los demás. Si realmente experimentamos amor por nosotros, nos daremos cosas buenas y querremos dárselas a los demás. El amor nos hace querer dar siempre lo bueno. La ganancia no sólo será para ti, sino también será para los demás. Amarse a uno mismo es bueno para ti y para los demás. Lo dice la lección: quien mucho se ama poco se lamenta.
Referencias
(8) Louise Hay. Usted puede sanar su vida.
(9) Louise Hay. El poder está dentro de ti.
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Corazón que aprende lección que permanece
Non-FictionCreo que muchas personas coincidirían conmigo en afirmar que la etapa de la adolescencia, entre los 11 a 18 años aproximadamente, es una etapa particularmente difícil por todos los cambios que se van dando y las experiencias que a uno le toca vivir...