Lección 6 (II) - Identifica los pensamientos innecesarios

6 2 0
                                    

María tenía una cantidad de pensamientos que nunca la ayudaron en nada. Pensamientos innecesarios que lo único que hacían eran hacerle sentir mal con ella misma.

Un día escribió lo siguiente en su diario: "Llegué a mi casa y lo único que hice fue llorar. Llorar porque todo lo que trato de hacer bien, lo hago mal... Admito que no sirvo para nada y que estarán mejor sin mí... Y eso es cierto, todo lo que siempre trato de hacerlo bien, me sale mal".

Quizás María tuvo un mal día y es por eso por lo que pensó de esta manera. Puede llegar a pasarte que, de acuerdo con cómo te vaya en el día, pienses de manera positiva o negativa. Si pasó algo bueno que te hizo feliz, probablemente pienses que todo está bien en tu vida. Por el contrario, si pasó algo malo, tal vez te fue mal en un examen, vas a pensar de forma negativa. Esto es muy normal porque ya habíamos visto en la lección de las emociones que las mismas pueden influenciar nuestros pensamientos y viceversa.

El problema está en si tienes esta clase de pensamientos negativos constantemente. El problema está en si te quedas con estos pensamientos y comienzas a creer que son verdad.

Sobre lo que escribió María, por ejemplo, yo puedo identificar tres pensamientos que pueden ser muy comunes y que quizás todos alguna que otra vez los hemos tenido. Capaz tú los hayas tenido alguna vez o los vas a tener. Son pensamientos innecesarios, que no conducen a nada, que no te hacen crecer y que lo mejor que puedes hacer es dejarlos correr.

"No sirvo para nada"

Este pensamiento puede ir relacionado a otro: "no soy lo suficientemente bueno". Muy común pensar de esta manera cuando las cosas no salen como uno lo espera, cuando nos equivocamos, cuando no conseguimos algo que nos esforzamos, cuando nos comparamos con los demás, cuando nos dejan de lado, cuando perdemos, cuando nos sentimos solos, y así...

No sirve de nada pensar que no sirves para nada. ¿Qué es lo que quieres hacer y no te sale? ¿En qué no eres lo suficientemente bueno? ¿Para quién? ¿Según quién? ¿Qué es lo que te salió mal o lo que no te sale bien que te hace pensar así?

Y otras preguntas más que me gustaría que te hagas: ¿Qué ganas pensando así? ¿Cambiarás la situación? ¿Conseguirás lo que quieres? ¿Podrás hacer bien lo que hiciste mal? ¿Podrás ser mejor en eso que te propones?

Tal vez te digas "no sirvo para nada" porque no eres bueno en lo que quieres ser bueno, o en lo que otros son buenos. Tal vez no seas bueno en deportes, pero eres bueno en artes, o eres bueno haciendo amigos. Tal vez no eres bueno en matemáticas, pero eres muy bueno en ciencias. Tal vez no eres bueno en el canto, pero eres bueno en el teatro.

En el colegio, especialmente, va a ser normal que te sientas así. Vas a relacionarte con muchas personas y además se te pueden presentar muchas actividades para demostrar tu "talento". Si te parece que no eres bueno en ninguna actividad o que no tienes ningún talento, no significa que no sirves para nada. Tu "talento" puede estar en otro lado y tú no le estás prestando atención. Pierdes un tiempo valioso pensando que no eres bueno, cuando puedes perder tiempo buscando y descubriendo tus talentos, habilidades y cualidades. Todos tenemos talentos, habilidades y cualidades. Sí. Todos. Los que piensan que no tiene ningún talento es porque no lo descubrieron, pero está ahí. Busca ese talento tuyo. Sí sirves para algo. No pienses lo contrario. Pensamiento que no te hace crecer déjalo correr.

"Estarán mejor sin mí"

¿Quién o quiénes? ¿Por qué estarían mejor sin ti? Hay jóvenes que piensan que su familia estaría mejor sin ellos porque creen que le causan muchos problemas, pero esto no es la realidad. Efectivamente, a nadie le gustan los problemas, pero en una familia nadie es perfecto, todos se deben aceptar y respetar mutuamente. Todos se deben querer y estar en los momentos buenos y malos. Tu familia te quiere en los buenos y malos momentos. Ellos no estarían mejor sin ti.

Tu familia, tus compañeros, tu colegio, tus amigos no serían lo mismo sin ti. Tu entorno no sería lo mismo sin ti. Eres alguien importante. No subestimes el afecto que las personas te tienen, descubrirás que no es el que tú piensas. A menudo las personas caen en el error de creer que otros las quieren menos de lo que realmente las quieren. A menudo se piensa que los demás no nos quieren lo suficiente. Y es porque se tienen ciertas expectativas de cómo otros se deberían comportar con uno mismo. Esto puede pasarte con tus padres. Podrías llegar a pensar que ellos no te quieren porque piensas que deberían ser más comprensivos, porque deberían confiar más en ti o deberían dejarte hacer lo que tú quieres. Lo mismo puede ocurrir con tus amigos. Puedes pensar que ellos no te quieren porque no son cómo tú quieres que ellos sean.

Tu familia te aprecia mucho más de lo que tú crees y seguro que tú los aprecias también más de lo que ellos creen. Imagínate que alguien de tu familia o tus amigos te dijeran que tú no los quieres cuando esa no es la realidad. No te gustaría que pensarán así las personas a las que más quieres. No te gustaría que alguien a quién quieres mucho piense que en realidad tú no la quieres.

También, ponte a pensar en tu mejor amigo o amiga. Alguien a quién quieres mucho. Imagínate que esa persona piensa de esta manera: "estarán mejor sin mí". ¿Qué le dirías? ¿Le dirías que tiene razón? No, no creo que le dirías eso. Le dirías otra cosa porque quieres a esa persona. Entonces, ¿Por qué no te lo dices a ti también?

Nadie estaría mejor sin ti, pero tú estarías mejor sin ese pensamiento. Es un pensamiento inútil. No te hace mejorar ni soluciona tus problemas. No te hace crecer. No te hace mejor persona. No te hace feliz. Déjalo afuera de tu vida. Pensamiento que no te hace crecer déjalo correr.

"Todo lo hago mal"

¿De verdad? ¿Todo lo haces mal? ¿O solamente estás prestando atención a las veces que te equivocaste o fallaste? ¿O solamente estás prestando atención a un día malo que tuviste?

Pensar "todo lo hago mal" no va a hacer que, de pronto, hagas las cosas "bien". Raramente uno hace bien algo cuando se siente mal y, con este pensamiento, lo único que haces es hacerte sentir mal contigo mismo. Cuando piensas así, no quieres intentar nada porque te agarrará el miedo a equivocarte. Creerás que volverás a fallar.

No todo lo haces mal. El tema es que sólo estás viendo una parte de las cosas que haces y no todo el panorama de tu vida. Para ver lo positivo y hacer las cosas "bien", deja de pensar negativamente. Confía en que puedes hacer muchas cosas. Claro que vas a equivocarte, y probablemente muchas veces, pero eso no significa que siempre lo harás todo mal. Este pensamiento no te lleva a ningún lado, no es necesario... déjalo correr.

"Nadie me entiende"

Si alguna vez tuviste este pensamiento, no estás solo. Yo los he tenido en algún momento, tus padres, tus hermanos, y amigos los habrán tenido alguna vez. Todos hemos pasado por momentos en los cuales no nos sentimos comprendidos o nos sentimos diferentes al resto. Es más, me atrevo a decir que mientras tú piensas eso, otra persona cercana también lo está haciendo.

Te sientes diferente porque, efectivamente, eres diferente y único. Nadie es igual que tú. Tú tienes algo que otros no tienen y así también no tendrás algo que otros tienen. Es la riqueza de la diversidad. No hay dos personas iguales y es por eso por lo que sólo tú te puedes entender. Sólo tú te conoces más que nadie. Sólo tú conoces tu historia. Sólo tú tienes tu historia completa. Las personas a tu alrededor sólo tienen una parte de tu historia, incluso tu familia. Porque tú eres más de lo que muestras exteriormente. Tú tienes muchas cosas guardadas en tu interior.

Te invito a que vivas tu vida desde tu persona y no desde la de alguien más. Te invito a que descubras lo importante y lo valioso que eres. Si nadie te ha dicho nunca esto, entonces es momento de que tú te lo digas a ti. Puedes pensar que es ridículo o que no es verdad, pero recuerda: es verdad si crees que es verdad, no es verdad si no crees que es verdad. Tú decides lo que es verdad para ti sobre lo que eres como persona. Tú decides tu verdad.

También, si sientes que nadie te entiende, te invito a que puedas ayudarle a las personas a entenderte. Expresa cómo te sientes, cómo piensas, lo que te hace bien y lo que te hace mal. Ayúdale a la gente a conocerte y a saber cómo eres en realidad.


Corazón que aprende lección que permaneceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora