¿Gigolo?

¿Y qué? ¿Te aplaudo...?.

D espués de la sesión de fotos, que todo se calmara y Camile se marchara a casa Taylor y Cesar se ofrecieron a cubrirnos en el show. Mientras Adrian, Raven y yo invadíamos la oficina de Camile.

Nadie sabía que habría detrás de aquella puerta Camile siempre ha sido muy reservada y no se le conocía familia solo amistades.

Como si fuésemos ninjas nos adentramos allí y no solo mi sorpresa fue exorbitante los semblantes de Raven y Adrian estaban para premios Nobel. Si me lo hubiesen contado simplemente no lo hubiera creído, en su oficina había un cuadro de Camile embarazada con un vientre por demás abultado.

Nadie sabía nada acerca de un hijo y mucho menos de un embarazo por parte de Camile. En su escritorio había portarretratos dispersos, había una foto de ella con un hombre de pelo cobrizo y ojos castaños por demás abrazándole por detrás y sus manos reposaban sobre su vientre.

Se veían sumamente felices jamás había visto en Camile una sonrisa tan genuina, era la viva expresión de la felicidad. Entre aquellas fotos divisé una en donde sostenía una pequeña de pelo negro azabache y ojos castaños claros idénticos a los de el hombre de la fotografía anterior de unos seis meses cuando mucho quizás siete.

Eran como dos gotas de agua ambas sonreían abiertamente en aquella foto. Camile jamás había dicho nada. ¿Por qué lo ocultaría? ¿Qué había sucedido con su familia?.

̶ Stefan... . - Susurró Adrian.

̶ Lo sé. - Dije volviendo a la realidad.

̶ Démonos prisa juro que Camile tiene pacto con el diablo y podría aparecer en cualquier momento. - Se quejó Raven.

Cada uno tomó un archivero y buscó en los más recientes. No había nadie con el nombre de Leah no podía ser posible. Resoplé agotado posando mis codos en mis piernas con las manos cruzadas apoyando mi frente hasta que llegó la luz a mi mente.

Volví a rebuscar pero esta vez con un objetivo diferente.

̶ Stefan... . -Bisbeo Raven.

̶ Shhhh!. Conozco esa expresión. -Dijo Adrian.

Al verlo me pregunté ¿Cómo pude haber sido tan inútil?, lo tuve frente a mi todo este tiempo su nombre no era Leah... figuraba como Zamira. Vociferaba victorioso y los chicos se acercaron. Para observar.

̶ Zamira Monte Cristo... . - Dije finalmente.

̶ Aun semanas después esa mujer te sigue troleando. - Dijo Adrian divertido observando la fotografía que ella había utilizado como broma.

Todos nos reíamos victoriosos y salimos de la oficina no sin antes tomar fotografías Taylor y Cesar lo exigieron como pago por no poder venir con nosotros.

Al igual que nosotros se sorprendieron grandemente con las fotos de Camile yo investigaría que sucedió no podía quedarme con aquella duda y los chicos tampoco.

Debíamos averiguar que sucedió.

Zamira

Estábamos en emergencias yo amaba esa área ya que medicar en el segundo piso no era lo mío. Por el simple hecho de ser rutinario y aburrido, mi madre había llegado hace unos días y trajo consigo un regalo excepcional. Seis entradas para BARBARELLA!.