E l día antes del encuentro las chicas me llevaron de compras, a depilarme y un sin fin de cosas más.
Hablaban y hablaban ya me estaban enloqueciendo y estaba a punto de explotar.
Hasta que los comentarios graciosos entre vestidores resurgieron. No solo me obligaban a probarme cientos de vestidos ellas también lo hacían.
̶ Es enserio si el tipo está quebrado huye! Antes de que te mate. - Decia Nai entre risas.
̶ Basta no la pongan nerviosa. - Se quejaba Grissel.
̶ ¿Nerviosa? Si resulta ser que el chico tenga una tercera pierna ¿Creen que ella abandonara?, ni mais Zamira es una golosaaaaa. - Dijo Naura extendiendo esta última palabra de manera jocosa.
Todas explotamos en carcajadas y la expresión de una de las asistentes de vestidores estaba para morirse.
̶ Lo mejor no sería eso... imagínense a Zamira gimiendo desbocada. - Decia Seoanne entre lágrimas de la risa.
Maldita ramera infeliz lo pagarás.
̶ Ja. Ja. Ja. Muy graciosa. - Entoné sarcástica.
̶ Vamos dámela! Dámela! Oh si! Vamos nena!. - Se burlaba Nai.
Mierda si no les hubiera dicho nada esto no pasaba.
Pero en fin la risa era risa y el bulling era balido.
Al salir de la tienda fuimos a casa a tener una noche decente.
Estábamos tiradas en la sala. En diferentes posiciones para nada sexys. Seoanne estaba pecho arriba en el suelo con las piernas en el sillón principal y las manos entre las piernas de Naura.
Estaba viendo la tv de cabeza maldita subnormal.
Grissel estaba con la cabeza apoyada en mi regazo y los pies en la cabeza de Gissy y a su vez esta ultima estaba pecho abajo sobre Nai y esta ultima tenía la cabeza entre las piernas de Grissel.
Media hora después tocaron a la puerta. Me levanté sin siquiera maldecir ya que sería un gasto innecesario de mi fuerza vital.
Al abrir allí estaba Roderick.
̶ Ay no!. - Dije como un susurro y cerré la puerta en su rostro con fuerza.
Volví a mi lugar.
̶ ¿Quién era?. - Preguntó Gissy.
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¿Gigolo?
Genç KurguZamira Monte Cristo es una estudiante de medicina y una joven poco usual, con un carácter extremadamente fuerte e imponente últimamente se siente desubicada. no tolera a sus amigas, sus cinco estrellas de la suer...