El día había llegado; hoy seria el día especial de su bebé, es por eso que despertó antes y se dirigió a la cocina de su hogar a prepárale el desayuno a amada.
Ya iba por su tercer hotcake cuando le abrazaron por la cintura.
Volteo a ver a su bebé que aún tenía los ojos cerrados mientras se abrazaba de él.
—buenos días cariño ¿qué haces levantada?—
De respuesta sólo recibió un sonido como si fuera ronroneos de gatito.
—ve a la cama mi amor, te llevaré el desayuno—
—ven conmigo, vamos a dormir otro ratito por favor—
—ve amor, ya voy contigo—
La rubia comenzó a caminar hacia la salida de la cocina y Min clavó la vista en ese par de piernas al descubierto que dejaba aquella playera que le quedaba enorme a su amada.
—Mi vida...
La rubia volteo a verlo con su ojito libre puesto el otro se lo estaba tallando con su puño.
—feliz cumpleaños amor—
En el pecho de la chica la dicha renació, si bien es cierto que hace un año la familia Min le había hecho una fiesta para festejarle sus 17; este año era diferente; era el primero en que la felicitación había llegado del hombre que más amaba.
—sabes Yoonie voy a recibir mi desayuno aquí—
Y la rubia regreso a la cocina y se subió a la encimera y comenzó a comer los hotcakes que estaban en el plato con un poco de miel y mermelada de fresa.
El hombre que bebía su café era feliz viendo a su bebé disfrutar de su desayuno sin remordimiento alguno, no pudo más y la comenzó a besar y pudo saborear la combinación entre la mantequilla, la mermelada y la miel que se mezclaba con el sabor del café en su saliva.
Y su memoria muscular se hizo presente, posó su manos en los muslos de la chica y comenzó a subirlas poco a poco recorriendo esas largar piernas que le hicieron espacio para que se colocara en medio de estas.
Sin previo aviso levantó la playera que traía la chica y se dio cuenta que debajo de esta no traía absolutamente nada.
Min marcaba es hermoso y estilizado cuello, mientras Jimin se iba recostando en aquella encimera, mientras el contrario iba bajando un poco más hacia la parte del sur del cuerpo que ya se estaba retorcido de lo bien que se sentía.
El pálido tomó la cintura de su bebé y lo atrajo más hacia él, y sin previo aviso se metió el rosado pene de la chica que se deshacía en gemidos.
Soltó el miembro de la rubia y con su lengua comenzó a subir por todo el torso, parecía un niño disfrutando de un dulce.
—bebé me quiero enterrar en ti, tan fuerte como no tienes una idea—
—hazlo daddy, hazlo por favor—
Y sin previo aviso volteo el cuerpo dejando a su merced ese culo que tanto le gustaba.
Con sumo cuidado comenzó a enterrarse en esa pequeña y rosada apertura, ardía como el mismo infierno así que lo hizo con toda la delicadeza y paciencia del mundo, besaba la espalda de la rubia que gruñia por la intromisión pero no quería que se detuviera.
Una vez su longitud estuvo adentro esperó un momento hasta que comenzó un vaivén cadencioso y delicioso para ambos.
Para Jimin no había mejor manera de comenzar su día qué haciendo el amor con su daddy.
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La futura señora del Ceo Min
Fiksi PenggemarTodo el mundo sabe que Ceo Min piensa pedirle el divorcio a su esposa dentro de dos meses. Todo el mundo sabe que el Ceo Min planea casarse con su linda chica. Lo el mundo sabe es que el Ceo Min ha dejado a su esposa por una mujer más joven y herm...