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MEGAN

Esa noche fue complicada porque teníamos a cada uno con un berrinche distinto, Lila era la que se mantenía más al margen, por lo que fue la que más llamó nuestra atención.

- Li? -dije mientras preparaba la cena.

- Sí?

- Como van tus clases de actuación? -pregunté.

- Bien... tengo una muestra... me dieron el papel protagónico...

Lizzie se sorprendió al igual que yo, lo dijo muy a la ligera.

- Amor! Pero... por qué no nos dijiste antes? Es hermoso...

- Te felicito, princesa -dijo Lizzie acercándose a ella para abrazarla.

Yo también fui y la apachurramos tanto que nos tuvo que pedir que nos alejáramos.

- Es que tampoco es la gran cosa...

- Es la gran cosa, amor... por qué no te emociona?

- Es que... no sé si realmente soy tan buen o si es sólo por quiénes son mis mamás...

- Sos muy buena actuando, Li, en serio, y no me parece raro que hayas quedado vos, sos demasiado buena como para no sobresalir -dijo mi esposa.

- A parte, no aparecés con nuestros apellidos, amor, puede que lo sepan muchos pero la que va a estar en el escenario sos vos -dije.

Entró Eva que fue directo a Lizzie, se sentó en sus piernas y se acostó en su pecho, sin decir nada.

- Van a ir a mi muestra? -preguntó Lila con timidez.

- Que si vamos a ir? Vamos a estar en primera fila con una cartel enorme con la foto de tu cara -dijo Lizzie emocionada.

- Y el cartel va a decir "mi hija es la protagonista!"

Ella se tapó la cara con las manos por la vergüenza.

- Puedo pedirles perfil bajo? -preguntó seria.

- Lo más bajo que podemos ofrecerte es no gritar "Esa es mi hija" cuando aparezcas, después vas a estar pidiendo demasiado -dije.

Lila rió sabiendo que sí la haríamos pasar vergüenza.

- Cuándo es? -preguntó Lizzie.

- Mañana...

- Qué?! -gritamos con mi esposa.

- Pero... - comencé-... Cómo no dijiste nada?

- Es que quería que fuera sorpresa...

- No me diste ni tiempo para presumirlo en todos lados -dijo Lizzie.

- Por eso mismo no les dije, son mis únicas invitadas, solo ustedes dos.

- Tus amigas del colegio?

- No les quise decir nada por si lo hago mal...

Lizzie, que tenía a Eva a punto de dormirse en sus piernas, se levantó apoyando a Eva en su cintura para sostenerla mientras estaba parada al lado de Lila.

- Yo sé que lo vas a hacer genial... no te voy a obligar a invitarlas, pero siento que deberían estar.

- Quizás mañana en el colegio les dijo -respondió.

LIZZIE

Al otro día, Lila estaba muy nerviosa, iba de un lado al otro de la casa preguntándonos a nosotras cosas sobre actuación.

- Si te pones muy nerviosa, miranos a nosotras, sí? -dijo Meg.

Ella asintió.

- Comiste algo hoy? -pregunté mirando a Lila, no recordaba verla almorzar, sólo el desayuno.

ELIZABETH OLSENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora