One Shot. En las garras del lobo. Parte 1.

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En las garras del lobo

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En las garras del lobo. Derek Hale.

Flashback. Hace 10 años.

El corazón me latía a mil por hora, estaba en un estado horrible luego de ver todo eso. Intentaba creer que se trataba de una pesadilla o tal vez había consumido las drogas de mi padre sin darme cuenta y ahora estaba viendo cosas que no debía haber visto. Intentaba creer que solo estaba alucinando al ver a Derek de esa forma, con sus ojos amarillos cargados de ira, colmillos prominentes asomándose por su boca y esas garras que podrían cortar a un animal en pedazos. Estaba aterrada y solo pude salir corriendo de ese lugar, la casa de los Hale había pasado de ser mi refugio a convertirse en la pesadilla de cualquier película de terror llena de clichés. Derek Hale, el chico que amaba era un monstruo y no estaba preparada para lidiar con algo así, más porque vi reflejado a mi padre y los recuerdos de todas esas noches de terror llegaron a mi mente en segundos.

Había perdido la noción del tiempo mientras corría a toda velocidad por el bosque hasta llegar a casa. Había tenido la intención de llamar a la policía y contarles que un animal estaba suelto en la ciudad, algo peligroso. Pero ¿Quién creería en la hija de un drogadicto? Eso jamás pasaría. Mi padre había sido un delincuente conocido, detenido en muchas ocasiones por robo, violencia intrafamiliar y narcotráfico y yo había crecido con esa figura a mi lado. Y claro había sido detenido en más de una ocasión. Mi madre nos había abandonado cuando yo tenia tres años, ella me dejo a manos de un ser vil y despiadado que descargaba su ira conmigo cada que algo le ocurría. Vivía con miedo constante, hasta que lo conocí a él y me hizo sentir segura. Pero ahora al verlo en esa forma, todos los miedos habían regresado.

Termine huyendo de Beacon Hills, tomando las pocas pertenencias que tenia en mi poder y simplemente desaparecer del mapa, borrando toda huella de mí, como si yo nunca hubiera existido en ese lugar. alcance a tomar el ultimo autobús y mientras este salía de la ciudad, aquel mensaje por parte de Derek logro provocar las lágrimas en mí, me dolía el corazón, más porque lo amaba, pero era demasiado cobarde para entender o siquiera preguntar. Lleve una mano hacia mi cuello, donde aquel collar aun estaba. Un pequeño trisquel que el me había obsequiado para mi primer cumpleaños. Tuve la intención de quitármelo y arrojarlo por la ventana, seria una forma de olvidarme por completo de él.

Fin Flashback.

Me convertí en una mujer exitosa, dejando de lado todo mi oscuro pasado que ahora se mantenía oculto en lo más recondito de mi mente. Deje de lado todo lo relacionado con Beacon Hills y lo que me unía a ese lugar. Ahora ya era alguien digna de transitar por las calles y no sentirme avergonzada por las cosas que decían sobre mí. Me había convertido en doctora y por alguna razón ahora iba camino a ese lugar que había dejado atrás para iniciar mi trabajo en el memorial de Beacon. Estaba nerviosa, si lo estaba. Era un mar de nervios tenia miedo de revivir todo ese miedo que sentí aquella noche en la que escape.

— Vamos Danielle. Eres exitosa, una gran neurocirujana. Tu puedes hacerlo. – Dije mientras aparcaba el auto afuera de la que era mi antigua casa, claro que no viviría ahí, el lugar era un completo basurero, las ventanas rotas y parte de la estructura quemada. Seguramente los vagabundos la usaban como hotel. De todas formas, baje para avanzar hacia el lugar. – este lugar sigue igual.

La chica StilinskiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora