A mí la ansiedad me ha hecho ser lo que no soy en verdad.
Me ha hecho hacer cosas de las que me arrepiento.
He de admitir que la ansiedad en más de una ocasión se burlaba de mi vulnerabilidad.
Pudo conmigo.
Hasta que cuando no he querido levantarme de la cama, lo hice. Cuando no he querido salir por el jodido ataque de pánico, he salido. Cuando no he querido hacer algo, lo he hecho. Cuando mis pensamientos me agobiaban, los evitaba cantando, escribiendo, haciendo ejercicio...
Y ahora me río yo de ella, que cuando llega sin avisar y la siento como un nudo en la garganta, los demás me verán sonriendo, dando positividad, así es como se engaña a la mente.
Puede ser un arma de doble filo, por eso a veces suelto mis miedos, mis tristezas en mis poesías, pero en mi día a día siempre sonriendo, estando en paz. Por una vez, decido ir despacio, no saturarme más por quererlo todo enseguida.
Disfrutando el proceso para lograr lo que siempre he querido, teniendo tranquilidad.
Porque puede que todo a mi alrededor esté en silencio, nunca hay nadie, pero estoy yo y mis pensamientos que no se detienen ni durmiendo.
Aún así sigo mi camino, me veo mejor sonriendo, dando de mí lo mejor.
No sé cuando aprendí a levantarme, pero siempre que me caigo y me cuesta, termino volando.
Brillo más que hace meses, creo no, estoy segura de que todo está mejorando en mí.
Continúo adelante y eso lo cambia todo, cambia mi destino.
Carmen Delia
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Superación personal y cómo amarse a pesar de la oscuridad
No FicciónTodos pasamos por situaciones desagradables, que nos llegan a cambiar. Pero amarse en ese proceso no es fácil, pero no imposible. Aquí iré dejando escritos mis experiencias, que sinceramente, espero les sirvan, porque quiero que todo lo que he pasad...
