Me vi rota, me vi irreconocible, me vi llorando en silencio que se escuchaba a lo lejos, me vi en la desesperación, me vi en el suelo, me vi agotada, me vi sin vida.
Me vi desmayada, me vi sola, me vi ignorada, me vi juzgada, me vi en rostros llenos de burlas y de lastimas, me vi cerca de la muerte, ahí, en el suelo, ni la silla que me rodeaba pesaba tanto como mis miedos.
Me vi sin dinero, me vi sin apenas alimentos, me vi en la calle sin ayuda, me vi luchando contra todo y todos, me vi queriendo morir y a la misma vez queriendo llegar lejos, resurgir de mis cenizas, y ser como el ave Fénix.
Me vi acobardada, me vi con moratones, me vi en las uñas mi defensa personal, me vi echándote de menos, y grité "¡basta! ".
Y ahora me veo renacida, me veo con fuerzas para que aquellos que me hirieron, que me ignoraron, que me señalaron, vean a una mujer que ni en sus peores momentos se olvidó de seguir.
Sigo, porque aunque te haya sacado de mi vida, también de mi corazón, debo de sacarte de mi mente.
Me vi siendo otra por ti.
Carmen Delia
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Superación personal y cómo amarse a pesar de la oscuridad
Literatura FaktuTodos pasamos por situaciones desagradables, que nos llegan a cambiar. Pero amarse en ese proceso no es fácil, pero no imposible. Aquí iré dejando escritos mis experiencias, que sinceramente, espero les sirvan, porque quiero que todo lo que he pasad...