Superación personal y cómo amarse a pesar de la oscuridad

A veces la vida pareciera estar hecha de golpes.

A veces la vida pareciera estar hecha de golpes, que te abren heridas del pasado, que parecían estar cicatrizadas,pero no es así, siguen ahí, día tras día contigo, recordándote aquellas lágrimas que derramaste, aquellas personas que te decepcionaron, que te partieron en mil pedazos. Y aún así sigues viva, o al menos eso parece ya que respiras. Pero la vida aunque respires sino la vives, estarás muerta en vida. ¿ Cómo dejar que la vida siga si no puedes olvidar? O tal vez en eso consiste la vida, avanzar sin olvidar, y aprender de lo pasado, de los errores, del daño que te hicieron los demás, y que tú inconscientemente te diste cuenta tarde. ¿Sería bueno olvidar para avanzar? A veces es bueno olvidar ciertas cosas, pero si las olvidamos, caeríamos de nuevo, al mismo error, con la misma persona, o con otra. Es mejor recordar el pasado, como una experiencia que te enseña a no tropezar otra vez con la misma piedra. Y a veces, aún recordando el pasado, perdonas, y tropieza de nuevo. Perdonar alivia el alma, pero a veces aunque uno diga que perdona, en realidad, no perdona, y es que perdonar no es así de fácil, se puede decir te perdono, pero muy dentro de ti, notas que las cosas han cambiado, que puede que con el tiempo, mejore, pero ¿ y si el tiempo no fuera suficiente? Hay veces, que es mejor perdonar, pero evitar tener contacto con esa persona. Porque te dañaría mucho su presencia, repito, tal vez el tiempo cure las heridas, o las cicatricen, pero la mente y el corazón son dos mundos muy diferentes, el corazón puede perdonar, porque es ese sentimiento, que no entiende, de odio, ni mucho menos de querer vengarte. Pero la mente, sí, y por ese motivo, mente y corazón son mundos diferentes. Yo era de las que pensaba, que la persona que te dañara tenías que vengarte, pero con el tiempo, la madurez, y las experiencias, te hacen ver, y comprender que vengarte no solucionarán las cosas sino las empeorarán. Es verdad, que querer vengarte, a veces parece una medicina que te sacia el sufrimiento, pero cuando lo haces descubres, que no es así. Que te hace sentir igual o peor que esa persona. Lo mejor, dejar que la vida por si misma, le dé su escarmiento, porque al final, nadie manda en nadie y aunque te hagan daño, tú no puedes seguir su misma línea, entonces este mundo, estaría peor del que está. Hace tiempo leí algo que me hizo valorar lo que tengo y comprender mejor que hay personas peores que yo, que lo están pasando terriblemente peor que yo. Y me salió esta frase ¨del mas pobre habrá otro más pobre aún¨. Leí que un vagabundo estaba por el campo cogiendo hierbas para alimentarse, y se preguntó a sí mismo quién será mas pobre que yo y al darse la vuelta vio como otro pobre cogía la hierba que el vagabundo tiró al suelo. Y eso me enseñó mucho, porque todos nos quejamos, somos muy quejicas, demasiado. Pero si miramos mas allá de nuestro propio sol veremos que hay otra persona sufriendo algo más doloroso que lo que sufres tú. 

Te duele, sí, pero siempre pudo haber sido peor. Recuérdalo. 

Carmen Delia