Your Eyes

19

Los ojos mar se mezclaron con los violeta haciendo una emulsión entera llena de confusión y ligera incredulidad.

Coco apretó las muñecas de Azulin obligándolo a soltar el cuchillo por la fuerza este mismo cayó al piso del baño en un estruendo metálico hueco que resonó por todas las duchas y acto seguido ni siquiera le dió tiempo a pensar porque Coco lo estrelló contra la pared golpeándolo con las llaves del agua en el momento, Azulin se quejó de dolor y rápidamente reclamó por su libertad mareado por el golpe aún con las manos tras la espalda tomadas en una sola del moreno. Coco formuló rápido en su cabeza pequeñas teorías y no pudo evitarse pensar en la minúscula posibilidad de que ¿Azulin fuera el asesino? se preguntó sorprendido.

No era subestimarlo pero ¿Azulin? ¿De todos los ositos capaces de asesinar? y la teoría del "asesinato" ya era mucho para Coco, aún no se creía eso del suicidio y mucho menos cuando Azulin se lo había dicho en el entrenamiento, luego venía a matarlo, o al menos lo intento dándole crédito a su pensar y la hipótesis.

—¡Sueltame desgraciado!—

Le gritó Azulin con la mejilla inflamada, tenía la voz arrastrada y taponada como si estuviera constipado, Coco hasta se sintió halagado de tal golpiza que lo dejó así de roto tanto física como emocionalmente así que en su lugar lo apretujó más contra la pared escuchándolo bufar al estar entre él y los azulejos, Coco puso una de sus piernas entre las del azabache sin querer obviamente lo único que buscaba era tenerlo bien pegado a la pared para que no fuese a golpearlo...

Claro que para Azulin significó más que un agarre de "lucha" a comillas.

—Te preguntaré solo una vez y quiero la verdad, sino te haré pedazos contra la pared—

Otro diálogo que no le sirvió, para Coco era una amenaza de romperle el cráneo a golpes pero para Azulin era más como una invitación a algo indecoroso y hasta sexual...

"¡Por dios concéntrate! ¡Van a matarte y piensas en sexo!"

Se gritó Azulin en la mente pero aún incómodo por la pose que Coco le estaba haciendo permaneció defensivo dejándose manipular por sus pensamientos intensivos acerca de lo que podía pasar, en otro universo porque en este Coco lo iba a golpear otra vez.
El moreno pausó leves segundos y tras formular la pregunta antes habló con voz seria, gutural y con precisión sin saltar a nada con total determinación a sacarle la verdad.

—¿Por qué mataste a Caramelo?—

El silencio vino tras esa pregunta, un silencio tan pero tan incómodo que hasta se podían leer las mentes entre los dos, Azulin expresó confusión alzando las cejas y frunciendo los párpados como diciéndole "¿Qué?" apenas con signos, Coco también esperó la respuesta y al no recibirla exasperó dando otro golpe contra la pared.

—Te pregunté algo Azulin, habla ya o te arrancó la lengua —

El más delgado siseo como ofendido y tras vocalizar unas palabras (aún seguía sin saber que decir) contestó tartamudeando.

—¿De qué me hablas Coco? Yo no maté a nadie—

La respuesta por más que Azulin hubiera querido sonar convincente y seguro terminó haciendo que sonará a algo con demasiado sarcasmo y hasta maldad, el moreno ya más enojado tomó de los cabellos a Azulin y lo obligó a verle la cara tirando de su melena para que voltease y quedando los dos mirándose fijamente Azulin una vez más pensó en lo extrañamente sexual que se veía eso, obviamente a Coco no le iban esos mismos pensamientos pero por alguna razón a Azulin sí y vaya que estaba disfrutando la interrogación.

—¿Nos vamos a hacer los tontos entonces?—

Azulin iba a responderle que no estaba jugando ni nada pero sus palabras fueron violentamente empujadas dentro de su tráquea debido al golpe de su cara contra la pared cuyo golpe hizo rebotar el cráneo ya de por sí adolorido del azabache sacándole gemidos de dolor quejándose bajo Coco, sí seguía haciendo eso probablemente le daria una neurisma primero antes de saber la verdad pero no se estaba midiendo ni medianamente con el más joven, estaba enojado no solo por sus cartas sino porque aún después de la golpiza que le dió venía a matarlo, Azulin o era muy estúpido o era muy bueno en su trabajo, solo que la segunda opción lo tenía pensando todavía.