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¿Su vida?

Siempre fue una porquería con P mayúscula.

Bueno en realidad no tanto, le gustaba su vida le gustaba su jardín y su casita sencilla en medio del campo, era privacidad segura y aprobada de que ningún fisgón estaría observandolos.
Lo malo fue que Mamá terminó siendo otra cosa totalmente diferente a la que siempre creyó y también se llevó consigo su pequeña mente infantil, para luego destruir cualquier esperanza de sentirse bien con algún ser vivo románticamente hablando claro está.

Jamás amaría a nadie como amó a su mamá, eso sería punto final, al carajo si el mundo se acababa por su culpa él no iba a enredarse en esa confusión asquerosa de "amor", algo que según él no existía ni servía para nada de lo contrario, en realidad solo era alguna conspiración estúpida de la gente creyente en ello para convertir algo útil en inútil por la simple y llana razón de no estar solo.

¿Por qué le preocupaba tanto a Papá que él tuviera algo que él mismo quiere o quiso?

Eso del amor no eran más que justificaciones para no sentirse solo, sentirse amado, cálido y un poco de cariño. Pero Azulin se convenció totalmente de que no necesitaba que nadie lo amara así como Papá con Mamá si él se amaba lo suficiente por sí solo, le gustaba su vida de ese modo, era perfecta..

Pero luego tuvo que venir ese tipo de ojos medianamente bonitos a destruir todo.

Por culpa de Coco ya no sabía si su idea del amor tenía sentido o no, osea sabía que el amor seguía siendo patrañas y mentiras del mundo pero ahora teniendo cerca algo siquiera romántico, no le parecía tan repulsivo, es decir se seguía amando a sí mismo pero por alguna razón también quería que él lo amara, no de ese modo malvado como su dueño o como una deidad, sino como un igual.
Qué Coco lo quisiera de forma estereotípica como en esas portadas de revistas en las que la señora está esperando a su marido desde la perfecta ventana de su perfecto hogar, o tal vez como esas princesas (que le parecen estúpidas) que aguardan a por el encantador príncipe galante en caballo, oh probablemente sería agradable ser querido de ese modo, nada de complejos solo cariño mutuo y extrañamente agradable, la calidez de un abrazo y un beso delicado sobre la mejilla es todo lo que pide, ya ni siquiera le interesa cómo es que se lo dará sino que lo necesita.
Casi como si estuviera viviendo los primeros años de su vida y le hubieran regalado flores por primera vez.

Ahora mismo, él se sentia volando por encima de todos, sus pies estaban fuera de la órbita y su cabeza desaparecida en las nubes más suaves de todas, Coco y él regresaron juntos después de ese beso y vaya que se sintió bien por el, siendo realista no era la primera vez que se daban un beso pero vaya que le gustó, Coco era muy bueno para besar y no importaba si no tenía nada para compararlo, a la mierda cualquiera solo se sentía bien por él y eso era el fin. Parecía que el bosque se hacía más feliz con tenerlo a su lado y su cabeza no paró de dar vueltas, su estómago no iba mejor sentía como si le hicieran cosquillas por dentro en todos sus intestinos, desearía saber qué carajos le causaba eso pero cada que intentaba pensar en otra cosa eso le volvía a invadir la mente y no salía de ahí ni siquiera con golpes (cómo ya había intentado tantas veces)
Azulin sintió que su alma se alegró cuando Coco lo vió en la noche y deseó siempre estar así, arrepentido de tener que dormir culpando a su debilidad para no aguantar tanto el sueño deseando ser inmune al sueño, pero al final tuvo que dormir porque de lo contrario sus ojeras iban a empeorar...

Pero para sincerarse mucho no le importaba.

Se fue a dormir con Gordi está vez,  quien se puso feliz de verlo ahí, Azulin solo sonrió cuando se acostaron en su tienda limitada y boca arriba parpadeaba tratando de pelear contra él sueño y la emoción de imaginar el siguiente día, algo estúpido que sólo hacia cuando era niño y venía su cumpleaños, pero incluso antes no esperó tanto el amanecer como esa noche.

Your EyesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora