Capítulo 58: Todo relato termina

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~ Este es el "final" de esta serie tan enrevesada.

Gracias por todo, gente ~.

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Sunny se quedó recostado en su cama de preso. Aún seguía en esa habitación para posibles visitas próximas de aquél psicólogo con quien se sentía cómodo a más no poder. Su mirada, permanente estática frente al gran techo blanco inexpresivo, se mantuvo por un gran rato. Casi por una hora, aproximadamente. Su cabeza se giró, notando cómo las luces del pasillo se apagaban. Su luz se esfumó debajo del hueco de la puerta.

Llevaba casi un año entero en la cárcel. Aún recuerda que, cuando ya se recuperó primordialmente, policías lo interrogaron a más no poder. No dejaron de crear un estrés constante en él y tuvo que confesarlo apropiadamente.

Al haber confesado que asesinó a Rowan en defensa propia, los policías, ciertamente siendo unos gilipollas, lo encerraron a la espera de un juicio justo hasta nuevo aviso. Prácticamente no lo dejaban ver a nadie, contestar llamadas... Nada. Lo tuvieron allí en contra de su libertad. No pudo hablar con Aubrey, Hero, Basil, Kel, su madre, Abby... Con nadie. Ni siquiera en el hospital tuvo la oportunidad. Finalmente, hubo un juicio privado, aunque a él le pareció estúpido hacer uno privado. Prácticamente estaban él, un abogado que le asignaron por ley, el juez, el tribunal, etc.

Prácticamente era mayor de edad en ese momento, con dieciocho años. El haber matado a alguien habiendo cumplido la mayoría de edad no era bueno.

Por desgracia, y aún con los intentos de su abogado para poder testificar a su favor, no obtuvo la atención necesaria. Finalmente, Sunny fue enjuiciado por homicidio en defensa propia por unos cuatro años. Esto, teniendo en cuenta que también irrumpió en propiedad privada a altas horas de la noche y rompieron algún que otro material del colegio. Claro, fue enjuiciado, pero tenía derecho a que pagaran una fianza.

...

Finalmente, fue encerrado en una prisión no tan mala. No era gigante como en las películas, pero tampoco era pequeña. Era mediana. Su cuarto antíguo, cubierto por los barrotes era su zona de confort. Ningún adulto mentalmente estable parecía querer algo de él en el ámbito del mete-saca. Aunque hubo alguno que otro raro...

Pasó cumpliendo la condena sin muchos problemas. Si seguía con este ritmo, podría salir más temprano que tarde debido a la buena conducta mostrada. Curiosamente, a ningún preso lo visitaban realmente, ni tampoco los llamaban sus familiares. Se sentirían tristes, de no ser porque sí que lo hacían...

Solamente, los policías no dejaban que tuvieran contacto con el exterior. En su tiempo de cárcel, pudo darle significado a una de las frases más sonada por allí.

"Dios no baja a hablar con mortales. Y si no hablaba antes, no lo hará con los que son inmorales".

"Dios" era la manera de llamar a los familiares, amigos, etc. Si "Dios" no hablaba con la gente normal en ningún momento, ¿por qué lo haría con gente como ellos? Cometieron algún crímen espantoso y por eso estaba aquí. La frase podía mejorar, pero lo entendía al saber que no todos estaban... Bien mentalmente.

¿Perdón? - OmoriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora