Lovesick Girls

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Como lo había dicho el abogado, volvió en dos días para recibir la respuesta de Violeta, este sonrió contento al escuchar a la pelirroja aceptar la herencia del señor Oliver y no tardaron en firmar los documentos, todo en compañía de Chiara quien estaba al lado de Violeta, apoyándola.

Este no había sido buena noticia para el padre de Cris, pero tampoco lo hizo enfadar, el señor
Oliver había sido un buen amigo para él y respetaría su última palabra.

Violeta daba su última firma y estrechó manos con el abogado antes de que este se retire.

La pelirroja se recostó en el sillón de la sala y cerró los ojos en un suspiro, volvió cuando Chiara se sentó a su lado y besó su mejilla.

—¿Estás lista?— se apoyaba en el hombro de su novia.

—¿Para qué?— giró a verla.

—Para presentarte frente a tus empleados— sonrió.

—¿Tan.. Tan rápido?— mostró un ligero temor —Yo no sabría que decir, ¿Y si les caigo mal?—

—Tú quédate tranquila, lo único que debe importarte es que ellos hagan bien su trabajo, solo eso, pero antes— se puso de pie y ofreció su mano, Violeta la tomó sin dudarlo —Debes llegar presentable— la puso de pie —Haremos lo que más me gusta hacer— la abrazó del cuello y sonrió —Iremos de compras.—

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Salma se encontraba en su despacho cuando un anuncio de una revista apareció en un extremo de la pantalla de su portátil.

Extrañada por ver el nombre de Chiara, ingresó al artículo y quedó sorprendida al ver el encabezado junto a la imagen.

"¿Quien es el amor oculto de Chiara Oliver?"

En la imágen principal aparecían Chiara y Violeta besándose frente a un edificio, la foto había tomado desde una larga distancia que difícilmente se lograba distinguir, pero en la segunda se veía claramente el rostro de Violeta por el acercamiento, traía una sonrisa mientras miraba a Chiara, y en la tercera foto, se lograba ver claramente que era la morena, bajaba de su coche dónde en el interior Violeta aún estaba sentada en el asiento del copiloto.

—Están... ¿Están juntas?— se acercó a la pantalla para observarlas bien —Aue bien por ti Chiara— bufó al aceptar que sí eran ellas —Suertuda de...— se quedó pensando, hasta que se dió cuenta de la realidad.

Salma, preocupada con que los paparazzis comenzaran a acosar a Violeta, llamó inmediatamente a Denna para que pueda comunicarse con Chiara.

Por la última pelea habían perdido cualquier tipo de comunicación, al igual que con Violeta, que había decidido ignorarla desde que supo que Chiara le había contado a la pelirroja lo que había hecho.

—Contesta— pedía.

Denna ahora estaba en una reunión junto a los inversionistas y escuchaba atenta el nuevo proyecto de Ruslana, los moviles de ambas estaban apagados y la reunión apenas había empezado.

Suspiró con frustración y observó dudosa el número de Chiara, bufó con resignación y comenzó a llamarla.

—Genial, me tiene bloqueada— pronunció suspirando con enojo, decidió llamar a Violeta y este solo timbraba —¿Que pasa que nadie contesta?— el móvil de la pelirroja se había quedado dentro del coche de Chiara.

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—Bien, mírame— pidió Chiara y Violeta esperó a la morena la observara de pies a cabeza —Todo te queda perfecto— acomodó su saco de traje, solo se lo había puesto encima —Te verás muy bien usando traje— sonrió y Violet le devolvió la sonrisa.