La mansión Hodar - Oliver, estaba repleta de flores en cada esquina, de distintos colores y distintas formas. La boda entre Ruslana y Denna, por fin se realizaba después de muchos años, solo faltaba un detalle, despertar a Ruslana.
—Rus...— Violeta trataba de ponerla en pie, pero el nerviosismo de la pelirroja había sido tanta que llegó a desmayarse —Vamos, debes estar... Bromeando— hacía esfuerzo en levantar a su amiga —¡Rus! ¡Ya!— la dejó caer nuevamente —¡Denna está esperando!— se cruzó de brazos.
Para alguien que tenía miedo al compromiso, a pesar de tener ya toda una vida junto a su pareja, es simplemente algo aterrador y difícilmente va a estar tranquilo.
El móvil de Violeta volvió a sonar por tercera vez, Chiara había estado llamando por el nerviosismo de Denna, pensaba que la había dejado plantada.
—Sí, sigue desmayada— respondió —¿Y qué quieres que haga? Es algo difícil para ella.— escuchó la voz de Denna en la otra línea —No, no, Denna, escucha, no llores.— suspiró —Ella te ama, solo comprendela. Si no te amara, no te hubiera pedido que te cases con ella— caminó al rededor, veía a Ruslana comenzar a abrir los ojos —Sí, ya sé que lo hizo cuando estaba celosa y ebria, pero lo hizo.— señaló —Ya está despertando, así que ponte tranquila, ya vamos— colgó.
—La boda— Ruslana pareció reaccionar —Es tarde— se levantó de inmediato, estaba alterada —¡Voy a llegar tarde!—
—¡Espera, espera!— la detuvo antes de que saliera.
—¡Me voy a casar!— sacudió a Violeta sin cuidado alguno.
—¡Ay, Ruslana! ¡Cálmate!— la abofeteó. Ruslana se encontraba nuevamente en el suelo.
—G-gracias...—
—¿Mejor?— la pelirroja asintió —Está bien, primero, si vas a ir a tu boda, primero relájate— la ayudó a levantarse —Y segundo— sostuvo sus mejillas —Nada va a cambiar, solo es un papel.
¿Está bien?— trataba de calmarla.—Nada va a cambiar— asentía, nerviosa —Solo es un papel, de acuerdo.—
—Bien, ahora vamos— tomó el ramo de flores y se lo entregó —Denna está esperando en el altar.—
—¿Qué?— caminaba confundida —Se supone que yo iba a salir primera.—
—Mamá— ambas giraron ante la voz de Jade. Ya era toda una adulta, a sus veinticuatro años, había ocupado el puesto de Ruslana en su empresa —Date prisa, mamá quiere venir a buscarte— regañó, estaba igual de nerviosa.
—Sí— Ruslana asintió rápidamente —Vamos, vamos, no quiero que se arrepienta de darme el sí— madre e hija salieron.
Violeta sonrió al verlas irse, estaba felíz por sus amigas, se notaba que se amaban mucho y que eran una familia felíz. Esto le traía recuerdos de su boda, su amiga decía que nunca iba a casarte, que no lo necesitaba, pero nunca digas nunca.
—Ya estoy aquí— Violeta susurró al llegar al lado de Chiara, ella sostenía al pequeño Oliver de apenas cinco meses.
Kiki la recibió con un beso en los labios y sonrió al ver a Violeta hacerle mimos al bebé, su nieto era lo más lindo para ellas, era simplemente adorable.
—Se vé felíz, mírala— comentó Chiara al ver a Ruslana, el nerviosismo ya no estaba, sus ojos brillaban al estar perdida en Denna.
—En la carpa estaba que temblaba— Vio rió —Aproveché para abofetearla— rió.
—¡Violeta!— regañó Chiara en una risa.
—Perdón— Hugo llegaba apurado. Tenía un traje negro puesto, llegaba junto a su esposa. Habían ido a cambiar Alberto, su hijo, este se veía molesto —Ya estamos aquí— sonrió al ver a su otro hijo, Oliver —Hola, campeón— cargó al bebé —Gracias, mamás— levantó la mirada —No sé qué haría sin ustedes— besó la frente del pequeño.
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Lovesick Girls
FanfictionChiara recibirá un castigo por parte de su padre por ser tan mimada, vivir por un tiempo con una de las trabajadoras de su mansión, Violeta, la jardinera a quien a estado atormentando desde que ingresó a trabajar. |Adaptación de @MasiGG|