Tómala del pelo sin lastimar,
con la fuerza del morbo,
y sólo con ese delicado acecho de la noche ve trayendo su desnudo quebranto,
haz estragos aunque no lo requiera el momento,
de lo impredecible nace la locura recuérdalo!!
Rompe el hielo con tu boca y sumérgete hasta que hierva cuánto líquido divino topes,
que ni un grito quede atrapado en su timidez,
acércate al oido y no se culto en ese momento,
di cuánto te nazca,
pervierte hasta su alma y adueñate de su inconformismo,
nunca te detengas aunque el silencio toque su boca,
recuerda que no se reprime por egoísmo un grito sin que no se quiera volver gemido en una cama que huele a sexo al anochecer.
Danza hasta que el rítmico movimiento se vuelva galope,
recorre todo su lienzo pincel en mano y no dejes de hacerla casi creer agonizar de locura cada segundo,
provee de aire pervertido y has que se destile en jadeos,
que no halle otra palabra de clamor que no sea pedir a gritos más castigo,
que sus manos deshile las sabanas y su cuerpo agonice en desaliento,
amada y amando,
cayendo el amanecer...
Isayo
ESTÁS LEYENDO
POESIA ERÓTICA Y OTROS DEMONIOS
PoesíaLIBRO DE LAS NOCHES PROFANAS Advertencia!! Si buscas un libro que no hiera las susceptibilidades propias, si has crecido escuchando que la mujer está al servicio del hombre bajo el dominio clerical represivo, motivados por el ejercicio del débito co...
