Soy un ser inferior con la habilidad de seducir mujeres.

CAPÍTULO 42.5 Una pequeña aventura con una loli.

CAPÍTULO 42.5 Una pequeña aventura con una loli.

(Pov- Kei.)

Sabía que este momento llegaría.

Lo sentía en mis entrañas.

Estaba preparado.

Lo esperaba con ansias.

Mi pobre corazón humilde está en su límite.

El gran momento cliché.

¡La loli del protagonista!

—Mmm... Creo que no está en el norte. Vamos a buscar a tu madre al sur de la ciudad.

—¡Vamos!- Dijo la pequeña niña, mientras juega con mis orejas.

En este momento, estoy cargando en mis hombros a una pequeña niña de 8 años.

¿Por qué? Se perdió.

Y esta niña no es cualquier niña normal que se puede encontrar en cualquier parte, esta niña es extremadamente especial. ¡Un caso verdaderamente único!

Hace una hora, decidí salir y comprar comida. Quería seguir experimentando con mis recetas.

En esta ciudad debo usar mi forma como aventurero. No quiero llamar la atención usando mi forma normal.

Kei Molfer es extremadamente popular, no quiero que el nombre de Crisfa se vea opacado.

Quiero que Crisfa sea uno de los aventureros más representativos del país, es por eso que debo asegurarme de que Kei Molfer no resalte tanto, al menos por un año, así la popularidad de Crisfa crecerá como espuma.

Y cuando logre ser popular como Crisfa, mantener una doble vida será muchísimo más fácil, y ahora más que nunca necesito eso. Los demonios ya saben sobre la traición de Drin, es cuestión de tiempo antes de que me tengan como uno de sus objetivos principales, pues fui capaz de convencer a Drin de traicionarlos. No preocuparse por eso sería un error fatal, y estoy seguro de que ellos no cometerían tal error.

—Disculpe, señorita, quiero una bolsa de manzanas azules.

Sí, azules. Hay comida muy rara en este mundo. Deliciosa, pero rara. Aunque la comida más rara que mi boca ha probado es el algodón de azúcar hecho con sangre humana... Mi madre realmente me asusta, y odio que su receta me haya gustado, aunque debo admitir que mi sangre es bastante deliciosa con azúcar. Mi madre hizo algodones de azúcar con mi sangre después de romperme la cara por llamarla "anciana temperamental". Lección aprendida.

Después de pagar, tomé la bolsa y me dirigí a otro puesto.

—Disculpe, señor, quiero comprar condimentos, verduras y carne.

Después de gastarme más de 550 monedas de oro, guardé las compras en mi anillo mágico.

—Será suficiente por ahora... ¿Qué prepararé de cenar?- Dije, mientras me disponía a irme a casa.

Mi plan original era regresar a casa y cocinarles una deliciosa cena de disculpa a las chicas, pues todavía debo contarles acerca de Mia y Treka, pero el llanto de una pequeña niña cambió por completo mis planes.

Escuché el llanto de una niña bastante cerca e inmediatamente me dispuse a ayudarla.

—Alguien está en problemas.

Me dirigí al origen del llanto, que se originaba dentro de un callejón.

Un callejón en una gran ciudad siempre será señal de algo muy malo, por eso me preocupé más, pues pensé que alguien trataba de matar a una pequeña niña. Ya me estaba mentalizando que vería a una niña muerta.