CAPÍTULO 60- Un protagonista tímido y sádico.
Ponerse cachondos, calientes, excitados, duros como una roca, mojadas, etcétera. Todos se sienten excitados por ver o sentir ciertas cosas, como los pechos, los traseros, pies, lenguas, o en el peor de los casos, sufrimiento ajeno y el material ilegal. Todos tenemos un fetiche que nos avergüenza, como ser dominados, lamer pies, tener sexo al aire libre, incluso comer excremento humano, que es uno de los fetiches más famosos por ser muy asqueroso.
Todos tenemos un fetiche, pero ¿cuál es el más común de este mundo? Fácil: tener sexo con alguien poderoso. Simple y sencillo. El poder se convirtió en algo tan importante, que incluso es motivo de atracción sexual. Las mujeres y hombres de este mundo, se sienten atraídos hacia los que son más poderosos que ellos, y en el caso de las mujeres, esa atracción es tanto romántica como sexual, y ese es el motivo principal por el cual las parejas lésbicas representan el 95% de las parejas románticas del mundo. El 4.99% incluye a las mujeres que tienen fetiches de dominar a sus parejas, humillarlos, hacerlos sufrir. Sei Molfer y su madre pertenecen a ese muy, pero muy, muy pequeño porcentaje que se enamoraron a primera vista de un hombre, ya sea por su atractivo físico o porque admiran el esfuerzo que hacen para ser mejores, a pesar de sus límites masculinos. El resto son matrimonios arreglados, en donde no hay amor, solo intereses económicos y políticos.
Y el hecho de que Nerka se esté masturbando al aire libre, sin importarle ser vista por las Elfas oscuras y su propia abuela, refleja a la perfección el poder que tiene ser muy poderoso en este mundo sobre los más débiles.
La mirada asesina de Kei, una mirada que no refleja remordimiento alguno, una mirada ardiente, capaz de llenar de miedo a cualquiera. Ver a Kei con esa mirada, mientras la sangre de su enemigo recorre su rostro, llena el ser de Nerka con dos emociones diferentes: miedo y excitación. Miedo porque su instinto de supervivencia le advierte del peligro que representa Kei en esos momentos, pues aunque sabe que Kei nunca le haría daño, Kei da tanto miedo que incluso sabiendo que él no le hará daño, no hace que el miedo desaparezca de su cuerpo. Y excitación porque Kei hizo básicamente su "perra" a un enemigo que podría matar fácilmente a Nerka, y ver a Kei tratarlo como si él fuera un simple insecto sin valor, hace que el cuerpo de Nerka reaccione, obligándola a entrar en "celo".
Reproducirse con los mejores individuos está en la naturaleza de todo ser vivo. En la naturaleza, los machos se pelean por las hembras, y aquellos que salen victoriosos se quedan con la hembra, pues demostraron ser la mejor opción. La naturaleza guerrera de Nerka la está obligando a entrar en celo, porque los Elfos siempre quieren mejorar su raza, teniendo hijos con personas poderosas, y Kei es la mejor opción de todas, y por mucho.
"¡Quiero tener sexo con Kei ahora mismo!" Fue lo que pensó Nerka, mientras observaba como Kei estaba torturando a un hombre... O mejor dicho, un demonio.
Los delgados dedos de Nerka acariciaban sus labios inferiores, con un movimiento rápido, desesperado, incapaz de controlar su movimiento por estar tan concentrada en el espectáculo que ocurre ante sus ojos.
El sonido humedo de sus movimientos se escuchaban con claridad, pero nadie le prestaba atención. Terkiana lo ignoró por estar vigilando a su alrededor, para evitar un ataque sorpresa (y por el bien de su salud mental), y las Elfas oscuras simplemente no podían creer lo que estaban viendo: un inferior torturando a un demonio.
Kei, con sus uñas, poco a poco le estaba quitando la piel al demonio, que no gritaba por dos razones: estar acostumbrado al dolor y porque Kei le quitó la lengua cuando le arrancó la mandíbula.
Los demonios están acostumbrados a sentir dolor, pues han estado entrenando por miles de años, pero eso no significa que no tengan miedo de morir, y el miedo es sin duda el sentimiento que más predomina en el demonio en ese momento. Miedo de morir sin haber vivido realmente una vida.
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Soy un ser inferior con la habilidad de seducir mujeres.
FantasyFui invocado a otro mundo como un héroe, ¡pero como la Diosa odia a los hombres, no me dio ningún poder divino, fui considerado un fracaso y vendido como esclavo por la Reina! Afortunadamente, logré escapar con vida gracias a dos niñas, y ahora debo...