CAPÍTULO 58- Luna.
Estamos jodidos. Tú estás jodido, ella está jodida, él está jodido, ese perro está jodido, la naturaleza está jodida. Todo, todo, todo está jodido.
Si teníamos 90% de probabilidad de ganar, ese 90% bajó a 80% (vuelve a subir a 82-85% si Kei y esas violadoras de mierda nos ayudan).
Sepgrar murió. Murió... Ella murió... Mi mejor amiga murió.
A diferencia de las otras (a excepción de Frima, Charlotte y Bandia), ella era amable con todos, siempre con una sonrisa y un chiste en su boca. Su personalidad alegre llegaba a dar pena ajena e incomodidad, pero a mí me relajaba y me hacía sentir cómoda. Me hacía olvidar, al menos por unos momentos, que no era feliz. Después de todo, ¿quién en su sano juicio sería feliz al ser obligada a pelear con una Reina Demonio, arriesgando su propia vida por un mundo que le arrebató todo? Perdí a mi hermana, cuando por fin habíamos vuelto a ser felices. Al menos Kei despertó mi esperanza de volverla a ver, con eso de que un antiguo Dios quiere que mate a Fravi y como recompensa va a regresarlo a su mundo, pues el tiempo se encuentra congelado.
Según lo que me contó, conoció a Fravi y ella no quiso pelear con él, pues tendrían que pelear con las mismas posibilidades de victoria. Es como lanzar una moneda al aire, pero vale la pena depositar toda mi confianza en él. Si gana, volveremos a nuestro mundo, aunque no sé si nuestras apariencias volverán a como eran antes o nos quedaremos con la edad que tenemos en este mundo. Será raro convertirme en la hermana mayor de mi hermana mayor, al menos en cuanto a edad. Pero, si perdemos, Fravi nos matará... Sí, vale totalmente la pena el riesgo. O muero luchando contra Fravi, o muero peleando contra la Reina Demonio. Mi habilidad única solo es útil para pelear a distancia o escapar, tiene muchísimos puntos débiles que todavía no fortalezco.
La Reina nos controla a su antojo, pero como Fravi no puede ayudar tanto, no le dirá nada a la Reina sobre mi traición. Estaré a salvo, siempre y cuando no baje la guardia. Me sorprende que Kei no haya detectado mi presencia y se haya puesto a hablar solo el día que descubrí su identidad. Un error muy, muy estúpido, pero Kei Molfer no es ningún idiota, es imposible que no se haya dado cuenta de eso. Tengo la teoría de que ese tal "Dios supremo" le impidió que me detecte y lo obligó a hablar, para que yo me uniera a él. Kei salvó a Near de ser asesinada por Sei Molfer, salvándole el culo a Fravi, pues la Reina Demonio la matará después de matar a los humanos. Gracias a eso, pude unirme al equipo... ¿"Rompe culos de Diosas inútiles de mierda"? Ese nombre lo dijo Kei bromeando en español y pensó que no lo entendería, pero mi español básico me permitió entenderlo.
Seguramente Kei y Sepgrar se hubieran llevado muy bien, ella también decía muchas estupideces en otro idioma para que no la entendiéramos... Sepgrar...
Ella me recordaba demasiado a Kei. Eran casi idénticos en cuanto a personalidad. Ambos eran amables y siempre pensaban en el bienestar de los demás, incluso si tiene que sacrificar algo para lograrlo. Sepgrar sacrificaba su dignidad para hacer reír a los demás para que se olviden de sus problemas por unos momentos y hacerlos sentir un poco mejor, y Kei no solo fue capaz de sacrificar su libro con tal de que mi hermana y yo comiéramos, sino que ahora sacrificó su propia libertad con tal de salvar a los hombres de este mundo, siendo condenado a vivir como un Molfer, donde todos los días se vive un infierno en vida.
Quería que Sepgrar se uniera a nosotros, pero no me animaba a decirle la situación, por miedo de una traición. Kei me conoce, y yo lo conozco a él. Ambos tenemos el mismo objetivo; regresar a nuestro mundo. No hay tanto riesgo de traición de mi parte porque también quiero regresar a mi mundo, pero Sepgrar era muy feliz en este mundo, ella logró adaptarse a pesar de todo y nunca se quejaba... O... ¿fingía ser feliz para no preocupar a nadie? No lo sé... Y nunca lo sabré.
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Soy un ser inferior con la habilidad de seducir mujeres.
FantasiaFui invocado a otro mundo como un héroe, ¡pero como la Diosa odia a los hombres, no me dio ningún poder divino, fui considerado un fracaso y vendido como esclavo por la Reina! Afortunadamente, logré escapar con vida gracias a dos niñas, y ahora debo...